Legitima Heredera

La orden y la ¿desaparición?

"— ¿Por qué haces esto? ¡Yo confíe en ti! 

—Grave error pequeña. grave error, la verdad es una lástima, pero… mi familia es primero, eres tú o yo y personalmente creo que es una respuesta obvia ¿No?. —se ríe—Además la corte paga bien. —Ella mira la estrella dibujada en su brazo—Bien, hora de enfrentar tu destino Adeleila.

La imagen se volvió borrosa y desperté jadeando, no, no podía ser posible, la orden la había encontrado, teníamos que ayudarla, me paré corriendo de la cama y corrí hacia Clere. —¡La encontraron, ellos la encontraron! ¡El tiempo se acaba! ¡Debemos decirle a Eleonor!. — Clere notó el pánico en mi voz y de milagro decidió hacerme caso, bajamos corriendo las escaleras hasta el cuarto de la tía de Adeleila. 

— ¡Lady Eleonor! ¡Lady Eleonor, despierte! ¡Es una emergencia!  

Eleonor Sinclere salió del cuarto atándose su bata de seda y con notable molestia en sus ojos verdes— ¡Niñas cuántas veces les he dicho que no es propio gritar! 

 Ambas bajamos la cabeza ante el tono de su voz—Lo sentimos.

—Si, claro que lo sienten, siempre es así.—se talla las cienes—Francamente, no sé qué voy a hacer con ustedes. 

Me encojo de hombros—Aceptarnos tal cual somos.

Ella ríe luego de mi comentario—¡Oh Rosalinda! eres demasiado perspicaz para tu propio bien, pero bueno ¿Qué es eso que es tan apremiante? Digo, si no lo fuera, pudieron haber esperado hasta después del almuerzo como personas civilizadas.

— ¿Está diciendo que no somos civilizadas?. —Clere me da un codazo para que guarde silencio. 

—¡Ya niña, no seas imprudente! Habla de una vez antes de que acabes por agotar mi paciencia.

 —¡La han encontrado, la corte sabe dónde está, Adeleila está en peligro!

Ella abre los ojos como platos y luego de musitar un par de maldiciones por lo bajo comienza a caminar en círculos, la desesperación es palpable en sus gestos, me toma de los hombros y suspira
— ¿Estás segura de lo que dices? Este no es un tema como para jugar. 

—¡Yo no jugaría con algo así! Mis visiones no mienten ¡Debemos hacer algo! ¡Envía a la guardia! 

Ella niega repetidas veces—No, no puedo hacer eso. 

Trato de contener las lágrimas
—¿Entonces la dejarás morir? ¡Es tu sobrina por Era! 

— ¡Es qué ustedes no lo entienden! Nadie puede saber quién es, eso solo la pondra en más peligro, el consejo es vil y despiadado solo terminarían por matarla de igual forma. 

—Entonces es todo ¡Solo te rindes y ya! 

— No me estoy rindiendo, pero tampoco pueden saber la verdad ¡entiéndanlo! ¡Elizabeth fue muy clara, si lo saben podrán corromper la magia, la marca de Era se perderá para siempre y entonces el caos se desatará! ¿Quieren eso?

Mis ojos se llenaron de lágrimas y negué con la cabeza— ¡Pero tampoco quiero que muera! 

Ella me abrazo—Se que es difícil, pero así debe ser, el destino es claro.

Negué nuevamente—El destino no siempre es fijo, puede cambiarse. 

—¿Pero a qué costo? Lo siento chicas, pero no hay otra opción. 

Entonces Clere, quien hasta entonces se había mantenido expectante le plantó cara a Eleonor. —Si asciendes hay opción. 

Eleonor se puso pálida y negó repetidas veces con la cabeza—¡Qué locuras dices! ¡Sabes qué las cosas no funcionan así!