Legitima Heredera

Tenemos que hablar

Termino de colocar brillo en el contorno de mis ojos...

Lony se pelea del otro lado de la habitación con su cabello rebelde, tocan a la puerta y puedo ver a Ane asomarse, todo se ha vuelto más fácil ahora que la mayoría piensa que ella es una estudiante de intercambio, iba y venía como siempre pero ya no se preocupaba por esconderse y eso también me facilitaba el poder hablar con ella

Lo que aun no entiendo del todo es cómo hizo para arreglarse con la directora, pero bueno supongo que eso es lo de menos, noto cierta preocupación en su mirada. — ¿Qué ocurre? 

—Tenemos que hablar. —No me gusta para nada su tono, suspiro ¿Qué habrá pasado ahora? Asiento levemente y la sigo fuera del cuarto, me arrastra hasta un pasillo solitario y se asegura de que nadie nos escuche. 

—¿Qué ocurre? 

—Creo que encontré la entrada al salón del ser. 

—¡No lo creo! ¿Cómo lo hiciste?. —Estoy tan emocionada por al fin obtener las respuestas que tanto he buscado.  

— ¡Shh no grites! Llamarás la atención, veme después del baile, te llevaré.

Asiento, pero algo en su mirada me dice que no es todo lo que tiene para decirme y eso me inquieta un poco. 

—¿Hay más?. —ella asiente.  

—La verdad no sé cómo decirte esto pero debes hablar con Milton Spoke, no había querido decírtelo porque aún no estaba segura del todo pero he confirmado mis sospechas. 

—¿Qué sospechas?

Hace una mueca se lo piensa un momento pero finalmente exclama
—Adeleila tu novio está en proceso de transmutación, es un Maldrak, un cazador rebelde. 

 Yo la miro confundida—¿Un cazador rebelde? ¿Qué no acaso los Maldrak desaparecieron después de la guerra? ¿Cómo es que Milton es uno de ellos? ¿Y por qué estás tan seguro de ello? 

—Es complicado

—¡Todo en este retorcido mundo es complicado! ¡No entiendo de qué va todo esto! Puedes por una vez explicarme algo.

—Es verdad que luego de las regulaciones mágicas tras el surgimiento de la princesa eterna muchos radicales dejaron las armas, los Maldrak entre ellos.

—Si las dejaron entonces ¿Por qué...?

—¡Si quieres que te explique deja de interrumpir de una buena vez!

—Lo siento, solo trato de entender.

—Lo se pero a veces es un poco irritante.

—¡Auch! Eso me dolió.

—Perdon, no he tenido un buen día, no era mi intención hacerte sentir mal.

—Eso ya no importa, solo continúa.

—Si bien dejaron de atacar no por ello se esfumaron, su hermandad fue creada para cumplir con lo que según ellos debía hacerse para procurar el bien mayor, durante siglos han permanecido ocultos trabajando desde las sombras, reclutan a jóvenes promesas, los entrenan y los convierten.

—¿Cómo es que los convierten?

Ella me mira molesta por interrumpir de nuevo pero se limita a continuar—Ellos son ligado a la orden.

Alguien pasa a nuestro lado y ella hace silencio, toma mi mano y me jala hacia un aula vacía, hace un escudo y suspira.

—Eso estuvo cerca, si alguien se entera de esto puede ser peligroso.