Sonic y Silver se estaban preparando para irse del pequeño pueblo en el que vivían, su mejor amigo tuvo que decirle que las clases estarían suspendidas hasta nuevo aviso y que no se sabía con exactitud cuando volverían.
Por ese lado Sonic ya no se preocupaba, pero por el otro, seguía preocupado por su madre, no quería que nada le pasara nada. Absolutamente nada.
—¿Y dónde queda precisamente su isla o donde vivan? —preguntó mientras marcaba una de sus cejas el albino después de mandarle un mensaje a sus padres.
—Ya lo verán.
Después de eso Mephiles se transformó y agachó su cuello para dejar que el albino se subiera en él, Silver al ver esto simplemente accedió y se subió con delicadeza, procurando no lastimar el cuello o tan siquiera su piel; lo cual era tonto ya que su piel era más que escamas.
Se fue adentrando al bosque mientras que su hermano se quedaba con el cobalto hablando, sabía que de más rato los alcanzaría.
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—¿Todo este tiempo fuiste tú el que me salvo?
Era la quinta vez que le hacía la misma pregunta al azabache, pero no podía enojarse con él, a decir verdad por un lado le hacía sentir bien que Sonic ya supiera su secreto , pero por el otro lado, se sentía mal de haberlo metido en problemas.
Sabía que llegando al nido le esperaría una buena regañada por parte de su padre, pero por Sonic, todo valdría la pena.
—Si, no me sentía seguro de dejarte solo, así que decidí acompañarte por las sombras y, si no hubiera estado ahí ese cazador te hubiera hecho algo.
Ambos caminaban por el bosque, faltaban unos pasos para llegar junto al otro par y emprender el vuelo, querían aprovechar los segundos.
—Pero, aún no entiendo muy bien del todo.
No pudo evitar ser sincero y sentir algo de miedo respecto a todo lo que estaba pasando en tan poco tiempo.
—Cuando lleguemos con Padre lo sabrás todo, de momento, tenemos que irnos.
Ambos llegaron a donde estaban Mephiles y Silver, el azabache grisáceo al ver que Shadow y Sonic habían llegado se lanzó para comenzar a volar, claro que se escucho un grito por parte del albino ya que lo había tomado por sorpresa.
Shadow se transformó rápidamente y dejó que Sonic se subiera en él, el cobalto se mostraba temeroso, pero al ver la mirada que le brindó Shadow se tranquilizó un poco.
Se subió en él y trató de sostenerse de los pequeños cuernos que adornaban la cabeza del azabache.
Siendo un poco más tranquilo, se acercó trotando a la orilla de aquel barranco en el que se encontraban y antes de lanzarse, alzó el vuelo con tranquilidad para no asustar a su pequeño.
Sonic se apretó contra el cuerpo escamoso, ya que el aire hacía presión en su cuerpo, le llevó unos segundos acostumbrarse y agradecía que Shadow volará un poco más tranquilo que el otro azabache.
Desde lejos podía ver como jugaba con Silver haciendo que se cayera y luego fuera por él.
Tenía miedo de que algo le pasara, pero Shadow se veía tranquilo así que confiaba que no pasaría nada grave.
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—Esperamos órdenes señor —habló un encapuchado con sus manos detrás de él.
—Paciencia muchachos, no quiero presionar a nuestro individuo, quiero que tenga confianza para decirme donde dejo a ese repudioso reptil. Exterminar dragones ha sido algo que ha estado en mi familia, generación por generación, creí por fin haberme deshecho de esa plaga y no fue así —bufó molesto.
Mantenía en la mesa, un mapa del pueblo y encima de él, sus manos, señalaba con sus dedos posibles lugares donde aquel erizo cobalto escondiera al dragón.
—Con todo el respeto señor, pero, ¿cómo sabía que eran los últimos dragones los que exterminó junto a su padre?
—Eran los últimos —con una de sus manos tomó una manzana, teniendola entre sus dedos mientras la veía con delicadeza.
—¿Entonces, cómo está tan seguro de que aquel erizo está escondiendo un dragón si usted asegura que los que mató hace tiempo eran los últimos?
Hubo un silencio por un momento, hasta que el toro volvió a hablar.
—Ese no es un dragón cualquiera, era un cambiante.
—¿Un cambiante?
—Mi abuelo me contó que por un tiempo, cazó a varios cambiantes, seres capaces de cambiar a un dragón o a un mobian común y corriente, la única forma de identificar a un dragón salvaje y a un cambiante, es que el dragón salvaje siempre será salvaje y te atacará sin importar qué, y un cambiante, dudará y hasta podría volverse dócil contigo, cosa que ningún dragón salvaje haría. Cuando me llegó la noticia de qué un erizo azul estaba caminando junto a un dragón sospeche, fui con el líder del pueblo para que me otorgará equipo para poder encontrar a aquel cambiante, pero no me creyeron. Esos cambiantes únicamente vienen de un pueblo, más bien, de un clan.
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A lo lejos podía observar una pequeña isla que estaba algo lejos de Andesita, volaron cerca de ella hasta llegar a una cascada.
Detrás de la cascada había una cueva la cual tenía un pequeño túnel, volaron por un par de minutos hasta llegar a otro túnel hecho de rocas y piedras sobresalidas.
Al irse acercando más pudieron ver una pequeña luz al final, al salir la luz los cegó a ambos por unos segundos, Mephiles y Shadow aterrizaron dejando que ambos invitados se bajaran de ellos y observarán maravillados lo que había frente a ellos.
Docenas de dragones volando en círculos alrededor de una pequeña montaña, parecía una isla dentro de otra isla.
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—Ese clan, es liderado por alguien llamado Black Doom, el cual mató a mi padre, y ahora, yo mataré a sus primogénitos —aplastó la manzana que seguía en su mano.
—¿Y cómo sabe que aquel dragón es uno de los primogénitos de ese tipo?
—Muy fácil, mi padre y yo conseguimos lastimar a la reina y estuvimos a un segundo de matarla, pero un erizo se entrometio y el recibió el impacto, mi padre me salvó y lo vi morir a garras de ese reptil, más antes de irme, logré ver a dos pequeños dragones junto a la reptil; jamás olvidaré sus cuerpos y facetas.
Dejó caer su puño en la mesa, haciendole unos pequeños defectos, lo cual ambos encapuchados notaron pero no quisieron decir nada. Simplemente obedecerían lo que dictará sin rechistar.
Ambos salieron para dejarlo solo, mientras que Teros sacaba un dibujo de uno de los cajones que se encontraban ahí, logrando apreciar a un dragón negro, con dos grandes cuernos y los ojos rojos, tenía detalles de un verde pasto, mientras que de su cuello colgaban dos collares.
—Te arrepentirás Doom por haberme quitado a mi padre, y te daré donde más duele. Primero asesinare a tus hijos y tu pareja frente a ti, para después acabar contigo y vengar la muerte de mi padre.
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Secreto ||Shadonic||
FanfictionEn una isla alejada de toda civilización, existía un pueblo donde se tiene la sospecha de que aún abundan criaturas mitológicas. Un erizo adolescente se encontrará con una de ellas sabiendo que son deseadas para matar, pero eso cambiara cuando descu...