Cautiva

Capítulo 10

Zack me señala y señala el baño. Asiento y casi corro hasta el baño. Me enjuago la boca unas cinco veces y vuelvo al living, donde Zack charla con su amigo pelirrojo. Los espío un rato.

_ Déjala en paz Jacob

_ ¿Te molesta? Uh...te molesta - dice en tono burlón el tal Jacob-

_ Sí, es una sirvienta pero no justifica que la trates así

_ ¿Cómo? ¿Como la trata tu padre? No me jodas y deja que me divierta un poco

_ Puedo pararte pero no a él. Déjala -le pone el dedo en el pecho a Jacob-

_ Déjame -Jacob hace lo mismo-

Se empiezan a dar golpecito en el pecho como dos machos pelos depilados, Dios son patéticos. Entro en el living con las manos en las caderas y me paro cerca de ellos.

_ Yo...eh...lo siento -Digo. Sonó más como pregunta que afirmación-

_ No, él lo siente -Zack dijo con una mirada asesina Jacob. Él asintió-

_ Okay -me doy media vuelta y camino hacia la cocina para buscar una servilleta-

Jacob me silba y escucho un quejido de parte de él, seguro Zack lo ha golpeado. Me doy vuelta con una mirada asesina y Jacob levanta los brazos en señal de inocencia. Limpio lo que escupí en el suelo y me lavo bien las manos.

Cocino un desayuno para dos mientras Zack clava los ojos en mi nuca. Después de media hora ya me está intimidando, digo, no es que no se sienta bien tener la mirada de un chico tan lindo por dos minutos pero media hora es demasiado.

_ ¿Se puede saber por qué me miras como si quisieras leerme la mente? -digo sin darme vuelta mientras revuelvo el café-

_ Te vigilo -dice simplemente-

_ ¿Por qué? No soy una mente criminal, tu padre sí lo es

_ ¡Te dije! -Jacob exclama desde el living-

_ ¿Qué? -digo mientras pongo algo de pan en una panera. No sé qué desayunarán ellos aquí, pero odio el típico desayuno americano-

_ Zack, te dije que Chels estaría encantada de ser tu novia -contesta el pelirrojo mirando al algo en su celular. ¿Chels? Hm...esperen... ¿Estoy celosa? ¿Qué rayos me pasa? Zack es un maldito-

_ Cállate y come -le dice tirándole un pan. Que manera de desperdiciar la comida-

Jacob se lo mete en la boca con gusto y revolea los ojos. Sonrío ya que estos dos me causan bastante gracia. Apoyo la bandeja con el desayuno en la mesa ratona del living y me quedo allí parada. ¿Qué hago ahora? Podría convencer a Zack para que me deje comer... ¡Que estúpida! Puedo comer sin autorización (creo). Tengo que demostrar una actitud rebelde. Mientras los dos chicos charlan yo, disimuladamente, deslizo mi mano hasta la panera y saco un pan. Mi agilidad me permite metérmelo en el bolsillo rápidamente y quebrarle un pedacito, el cual me llevo a la boca. Pero el pan está tan crocante que es evidente que estoy masticando algo.

_ ¿Estas comiendo? -Zack me agarra la muñeca y me la sacude-

_ No...no... ¿Cómo crees eso? -respondo sin mirarlo a los ojos-

_ Sabes que no puedes comer -mete la mano en el bolsillo y saca el pan- Niña mala.

_ ¡No soy una niña! -Protesto, y que ironía ya que sueno como una nenita encaprichada-

_ Entonces no chilles como si lo fueras -me suelta la muñeca bruscamente-

_ Tengo hambre -hago un puchero matador. Sí, tendré a Zack y a Jacob comiendo de mi mano-

_ Vamos, déjala comer. Sabes que mi padre y el tuyo hacen cosas malas -Jacob sonríe ante mi cara-

_ ¿Y? Sabes que si le doy algo de comer tomará confianza. Las mujeres son como los perros -Ah, que bella comparación (sarcasmo)-

_ ¿Quién es tu padre? -le digo a Jacob...tiene cierto parecido con alguien-

_ Robert Burns -No...puede...ser-

_ Yo-Yo -aprieto la mandíbula y me tiro encima de Jacob- ¡Él me secuestro! ¡Malditos todos los Burns!

Jacob forcejea pero la fiera que hay en mí es imparable. Le tiro el pelo, tiro de su ropa y le pego cachetadas. Él trata de sacarme de encima pero no puede. Ante la situación, Zack está literalmente tirado en el piso partiéndose de risa. Después unos minutos estoy algo cansada pero sigo peleando por...por algo. Jacob se rindió y esta tirado debajo de mí recibiendo mis golpes. Como si fuera una pluma, Zack me levanta del brazo y me sacude.

_ ¿Crees que soy una maraca? -pregunto indignada-

_ Pues...Sí, por las curvas -me sonrojo. Idiota-

_ Deja de sacudirme que no estamos en un concierto y bájame -me revuelvo-

_ Eh...no -El maldito está disfrutando esto- Recuerda que me debes obedecer

_ Zack... ¿Estas pensando en...? -Jacob alza sus cejas rojas. Son dos putos cómplices-

_ Oh sí -Zack asiente. ¿Qué carajos me van a hacer?-

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Y el premio para el capítulo más corto y patéticamente monótono es para...Pandicornia Rosada!

Me lo merezco, lo se lo se. Estuve con examenes y mis neuronas estaban muy llenas lo que no le dejo espacio a mi creatividad D:

Sory, al menos les traje algo