La abogada del diablo

19

Lance las llaves de mi apartamento sobre la mesa. De nuevo estaba aquí, en este apartamento tan vacío y tan callado. Mi nombre se repetía una y mil veces en mi cabeza. Como odiaba ese nombre, no lo había escuchado en siglos y ahora aparecía de la manera más extraña. Abrí la nevera y saqué una cerveza, mi cuerpo me pedía olvidarme de ese nombre y quien me lo había dado.

-eso es lo único que sabes hacer?-aquella voz hizo que de mi mano se resbalara la cerveza-

Me di la vuelta inmediatamente observando la silueta de mi padre. Trague duro, había cambiado demasiado durante los últimos seis años. Juraba poder estando escuchando mi propio corazón latir contra mi pecho. No sabía que hacía el aquí y mucho más luego de que mi día había sido raro.

-que haces aquí? Como entraste?-trague duro dando un paso hacia atrás cuando el dio uno hacia el frente-

-como entre es lo de menos Susana-ahí estaba de nuevo ese nombre-donde estabas?-trate de no reír ante esa pregunta pero la idea de pensar que de verdad le importaba o preocupaba me parecía patética y absurda así que una risa era lo único que podía salir-

-desde cuando eso te importa? Desde cuando te as vuelto papá? Ah, mi papá?-ladee mi cabeza confundida-

-a mi no me hables así Susana -me señaló a lo que nuevamente di otro paso atrás asustada-

-no me llames así...-advertí-

-que haces con este tipo de hombre?-lanzó una cantidad de imágenes mías y de namjoon y algunas entrando en acción a lo que parpadeé sorprendida-

-me estás siguiendo?!-lo mire asustada-que te importa a ti con quien yo ande eh?!

-no dejas de ponerme en ridiculo-pasó su mano por su frente desesperado-

-y porque diablo te importa eh? Que no fuiste tú quien me quito el nombre? Que no fuiste tú quien me abandonó!? Eh?! Porque diablos te importa lo que haga eh?-grite molesta-desde cuando te a crecido la preocupación por mi?! Lárgate!-las lágrimas pedían salir-lárgate como mismo lo hiciste hace seis años...recuerda que me dijiste que me olvidara quien era mi padre...así que tú de la misma manera recuerda que no lo eres....

-es un mafioso Susana..

-que no me llames así maldita sea!-grite aún más molesta-no tienes derecho a decidir que hacer con mi vida desde que me abandonaste...así que lárgate...

-te vas a arrepentir...-se acercó a mi lo que finalmente me aleje más con miedo-

-no abra nada más de lo que me arrepienta más que de ser tú hija...-sintiendo como una lágrima salía-vete...tu familia te espera....

-es mejor que lo dejes, o el será quien termine lastimado, pero por tu culpa...-y sin mas se dio la vuelta y se marchó-

Caí al suelo en lágrimas, tenía mucho miedo. El llanto y dolor se apoderó de mi, haberlo vuelto a ver me había abierto heridas que había cerrado a duras penas. Me envolví en una bola llorando en mi propia falda. Odiaba a mi padre, lo odiaba con mi ser aunque no pudiera. Jamás había entendido que realmente había sido lo que le había echo pero se había empeñado en hacerme la vida de cuadros como si realmente fuera un problema.

Mi móvil sonó pero tan siquiera tenía fuerzas para ponerme de pie. No quería ver ni hablar con nadie, me dolía tener que ser un dolor, una molestia o una carga para alguien y así me sentía desde que nací. Desearía haber conocido a mi madre aunque hubiera sido una vez, tal vez le tuviera el mismo miedo a mi padre que él que yo le tengo pero que me hubiera protegido hubiera sido suficiente, un abrazo suyo podía calmar todos mis miedos y preocupaciones . Aunque de cierto modo me preguntaba que si ella estuviera viva ese señor seguiría siendo igual de malo y abusivo de como lo es. Mi corazón dolía, realmente no entendía cual fue el mal que le hize, solo pedía la atención de mi un padre.

Flashback

Una pequeña de cabello castaño largo corría por toda la casa con una sorpresa para su padre que había echo en la escuela. Su emoción por verle una sonrisa a su padre por aquella pequeña cosa que había echo amor era visible desde una nube. Su cabello flotaba en el aire mientras sus pequeñas piernas corrían a toda velocidad entre cortando a las ayudantes de la casa que la observaban divertidas sabiendo lo traviesa que era. Corrió hasta el despacho de su padre, este se encontraba hablando por móvil , la miró rápido.

-papi papi-le llamo emocionada-

-un momento Susana -le detuvo señalándole el móvil a lo que ella asintió inocente esperando a que soltara el móvil-

Su piernita se movía impacientemente escondiendo el regalo detrás de su espalda esperando a que terminara pero parecía ser eterno. Su papá se tardaba mucho y aunque estaba impaciente su emoción de darle su regalo no se iba.

-papá!-grito la otra voz de niña entrando con un regalo enorme seguida de una sonriente mamá-

Esta corrió hasta a quien procuraba a lo que este soltó el móvil de inmediato para atraparla entre el salto que había dado hacia el. La levantó en una sonrisa mientras que su madre se acercaba para darle un beso. La sonrisa de la pequeña desapareció, estaba muy pequeña para entender pero su corazón y mente no lo estaban. No estaban tan pequeños como para no comprender que no era igual de importante que su familia, que no era el primer lugar de su papá. Su pequeña casita cayó de sus manos y sin una sonrisa dolida se dio la vuelta y se marchó herida.

Corrió hasta la ama de casa y le abrazo las piernas llorando preocupándolas y haciendo que esta soltara todo en manos. La señora miró hacia el despacho y suspiro entendiendo lo que La Niña sentía.

Fin del flashback

Jamás fui ni seria alguien importante para el así que no entendía porque llegar de la nada a decirme con quien podía salir. Subí mi cabeza observando las imágenes en el suelo, y ahora preocupada las tome en mano. Me habia estado siguiendo, trague duro. Namjoon era un mafioso y por culpa de mi padre podía ir a donde todos querían que terminara un hombre como el.

Si antes no me quería alejar de él ahora era tiempo de hacerlo. Por mi podía terminar encarcelado, por mi podía salir lastimado. Yo no podía ser un problema para el también así que mejor me mantenía lejos, no estaba aquí para determinado qué sería fácil.