¿Ich liebe dich? [Heist Stein Y Tú]

Capítulo 13

Alina:

Wendy no a parado de hablar de que solo se quiere, prácticamente, follar a Heist.

Sandra rueda los ojos, —Sigue soñando.

Ella ríe, —¿Por qué? ¿A ti también te gusta?

Sandra la ve, —Pfff, por favor, posiblemente ni siquiera me note durante años ¿como quieres que piense en follarmelo?

Wendy ríe, —Puedes irte por el hermano, a ese no lo quiero yo.

Y ahí si me moleste, —¿A caso son comida para venderlos y decir que no quieres ese?

Wendy ríe, —¿Qué te pasa hoy? Estás medio rara.

Suspiro, —Lo raro no es conmigo, es que creas que alguno de ellos podría llegar a notarte algún día.

Y al ver la expresión de Sandra y Wendy, me doy cuenta de que la acabo de cagar. Cierro los ojos y manos, pidiendo que eso no haya sonado muy grosero de mi parte.

Wendy me ve enojada, —¿Y a ti si? Ni siquiera eres tan buena ni linda, no tengo idea de que te ven todos esos hombres ciegos, pero por favor. Solo mírate a un espejo y deja de decir estupideces.

—¿Estupideces? Si tu misma dijiste que soy muy linda y que por eso te robe a todos ¿no? — rio sin gracia —. Deja de ser tan ridícula y querer parecer una santa, porque por algo tampoco estas en las iluminadas.

Ella toma la bandeja de comida y la tira sobre la mesa, causando un fuerte ruido que hace que algunas miradas se posen en nosotras tres.

—Ahora yo. Dime ¿a quien fue a quien sacaron del pueblo por hacer un desastre? ¡Si, a ti!

Ruedo los ojos, —¿Enserió caerás tan bajo como para insultarme con eso?

Ella entrecierra los ojos, —Por lo menos no caí tan bajo como para que fotos íntimas mías se divulgaron por todo el pueblo.

Tomo mi bandeja y también la levanto y la dejo caer en la mesa, a todo esto, ya habían murmuros, muchas más personas viéndonos y otros, inclusive, grabando.

—¿Sabes por qué ninguno de los Stein te tomaría tomaría cuenta? — digo volviendo al tema —. Ah, si, porque eres insoportable.

Ella se echa a reír.

—¿Yo? — se señala a sí misma —. Como tu no tienes que convivir contigo misma, eres una mierda de persona, egoísta, creída y odiosa.

Rio, —¿Creída? Que tu te creas menos que yo no es mi problema.

Ella toma su jugo y lo destapa, lo tira sobre mi, ensuciando mi blusa y cabello.

Tomo el puré que había en mi bandeja y se lo lanzó, —¡Piensa por favor! ¡¿Crees que algún día llegaras a ser más que la amiga que cae mal y que solo le hablan por lastima?!

A nuestro alrededor se escucha un: Uuuuhhh.

Ela ríe histérica, —¡¿Y tú?! ¡Por algo te fuiste del pueblo ¿no?! A lo mejor nunca tuviste que volver...

Lo último lo susurra susurra para ambas, y Sandra, quien se habían quedado en shock, ahora reacciona jalando a Wendy.

—Vamonos por favor, no hagan que años de amistad se vayan a la basura por una estúpida pelea.

Pero Wendy la empuja fuerte, haciendo que Sandra caiga al suelo, —¡No! Ella ya lo cago todo, como siempre lo hace.

—¿Yo lo cago todo? Dime ¿quien es la que andaba detrás de nosotras por años solo porque quería atención?

Y ahí, creo que llego a su limite, ya que se acerca a mi y me da un puñetazo en la cara.

Uh, pelea gratis.

Giro mi cabeza a ella y también la golpeó, ella toma mi cabello y empieza a jalar de él hasta arrancar mucho cabello, mientras tanto yo solo me quedaba quieta, sin hacer nada, solo protegiendome e intentando alejarla.

¡Has algo estúpida, muévete!

—Si me muevo volveremos a ese internado, y no creo que tengas ganas de volver.

Wendy se sigue desquitando conmigo mientras jala mi cabello, araña el cuello y golpea mi cara. A todo esto yo ya tenía hilos de sangre brotando por mi nariz, cabello desastroso y aspecto igual.

—¡Defiéndete ¿o qué, te acobardas tanto?!

Rio sin gracia, —No me acobardo, soy inteligente. Algo que tú — la señaló —, nunca serás.

Ella grita y sigue golpeándome, hasta que alguien la jala y alguien me jala a mi también.

Y ahí me permito inhalar ese perfume que tanto me es familiar.