Capítulo 4

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Alina:

Mis ojos se quedaron más de el debido tiempo con Heist, y ellos lo notaron, ya que Wendy se aclara la garganta, haciendo que voltee hacia ella.

—¿Quieren salir con nosotros? — dice Heist.

Salir. No soy mucho de salir.

Veo a Heist, —¿Les dices a ellas dos o a todas? Podrías esoecificarte mejor. — digo con amabilidad fingida.

Ser perfecta. Ser perfecta.

—A las tres, a menos de que no quieran.

Una sonrisa ladina se forma en su rostro y Wendy parece estallar. Se levanta de su asiento y sonríe nerviosa.

—Yo no puedo...debo hacer tarea, adiós.

Y con eso, sale de la cafetería.

¿Para qué se enojaba tanto conmigo si se va a poner así así hablar con ellos?

—Si queremos. — dice Sandra, respondiendo por mi.

Heist sonríe, mostrandos sus blancos y finos dientes, —Perfecto.

[...]

Los antidepresivos no estaban ayudando.

Mi ánimo era pésimo, y Frey y Heist ya se estaban hartando de el. Pobres.

—¿Saben qué? Mejor me iré.

Antes de que pudiera dar un paso, Heist poso sus dedos al rededor de mi muñeca, sosteniendome.

—No, no es necesario.

Si, si lo es, mi humor de mierda te está aburriendo hasta querer morirte, pienso.

Le sonrió falsamente, —Bien.

No es que este hablando mal u algo por el estilo, pero eh estado desanimada, con ganas de dormir y sin querer hacer nada.

—¿Qué tal un café? — dice Frey.

—No quiero café.

Heist, quien no había notado que no estaba por estar concentrada en mis pensamientos. Ahora repartía vasos de café.

Recibo cordialmente el mío y le sonrió.

Veo el reloj. Una hora. Solo había pasado una hora desde que había tomado el antidepresivo y si tomaba café, esto podría afectar demasiado todo mi progreso.

Llevo el vaso a mi boca y antes de tomar algo, hago como que se me derramó, manchando mi blusa y falda.

—¡Por el Altísimo! — dice Sandra, corriendo hacia mi.

Veo como Heist sonríe y sigue tomando su café.

—¡¿Estas bien Ali?! ¡¿No te quemaste?! — dice preocupada.

Confundida, bajo mi vista a mi blusa, que fue la que más recibió el café. Pero no siento nada. Era café frío, no caliente.

Le sonrió, —Estoy bien.

—Que bien que me confundí al pedir un café frío, lo mejor fue que te toco a ti. — dice Heist.

Le sonrió, —Si...si fue lo mejor. Iré a mi casa a cambiarme, nos vemos algún otro día.

Con eso, me doy vuelta y empiezo a caminar hacia el lado contrario.

¿Qué casualidad que Heist se había confundido, no?

Cállate vocecilla en mi cabeza, vas a volverme loca algún día.

[...]

Holi.

¿Cómo estan? ¿Con salud? ¿Ya se bañaron? ¿Ya tomaron agüita? Espero que su repuesta sea bien y si a todo.

En fin, gracias por haber leído esto y haber gastado su tiempo valioso aquí <3.

Los amo, bye.

¿Ich liebe dich? [Heist Stein Y Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora