Matar y Sobrevivir [Dueto Destructores #1]

30. Mila & Gabriel

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MILA

Tamborilee mis dedos sobre la mesa en madera mientras no dejaba de mover mis pies por los nervios y ansiedad.

Anoche Bell salió corriendo de su cuarto muy alterada gritando que Riven está en peligro por culpa de los malditos Grosverno y no había cerrado los ojos desde entonces, aunque el cansancio me empezaba a matar.

—Cálmate un poco que ya se están encargando —me pidió Gabriel tocando mi hombro, ignoré su petición y seguí con mi ansiedad. No puedo calmarme cuando se trata de mis amigos, y menos si no puedo hacer nada, porque resulta que al estar en este equipo no me puedo retirar para ayudar a Riven.

—No me pidas eso, no me puedo calmar sabiendo que mi amigo está en riesgo —me ardía la garganta de solo imaginar que Riven podría terminar igual que Hans. Desde que perdí a mi conejo a los seis años dejé de encariñarme con las personas, pero entonces esos dos niños molestos aparecieron en mi vida, si algo le pasa a Riven no sé cómo podría seguir adelante.

—Yionne ya se está encargando de ello —informó Daniel que está sentando en el otro extremo de la mesa igual de expectante que Lucille, mientras Bell se mueve de aquí para allá y entiendo cómo se siente, siempre hemos sido nosotros tres.

Mi familia era una mierda, Lili cuidaba de Bell, pero no le daba cariño, y la abuela de Riven era demasiado vieja para prestarle atención. Siempre fuimos solo nosotros tres.

—¿Dónde está Lucien? —preguntó Vad sentándose.

—No sé —conteste estresada, ahorita él no me importaba.

—Ha estado bebiendo por ahí —contestó Lucille sin más. Me repetí que no tengo tiempo para preocuparme por él sin embargo lo hago. Siento que Lucien ha estado empezando a empeorar su situación emocional, aunque aun no entiendo por completo el porqué.

—Ya —Yionne llegó apresurada hacia nosotros—. Riven está en Manchester, hay pocos Brave por ese lugar, pero tenemos a una de la familia Koskinen allí. Ella se encargará.

—¿Familia Koskinen? —Bell tomó asiento.

—Si, son otra familia que forma parte de los Brave. Igual de efectivos que los demás, su hija mayor será quien cuide a tu amigo y a su novia, mientras su mellizo se encarga de cazar al Grosverno —le dedique una mirada inquisitiva—. Ellos son de mi total confianza, confía en que tu amigo estará bien.

—Savannah y Jensen Koskinen —dijo Daniel con cara de pocos amigos, eso me hizo desconfiar.

—Calma, Jensen y Savannah son excelentes Brave. Daniel solo habla de ellos así porque envidia que Savannah siempre les haya ganado.

—Bah, Savannah solo es una cara bonita.

—Por favor, no seas ardido y mentiroso —Yionne dirigió su mirada hacia mí—. Savannah y Jensen serán los próximos líderes supremos de los Brave, por eso Daniel les tiene tanta envidia. Confía en mí cuando te digo que estarán a salvo, tu amigo está en buenas manos.

—Confío en ti —Bell se metió en la conversación—. Pero si le pasa algo a Riven me iré a salvarlo o al menos vengarlo, y no podrán evitar que lo haga.

—Está bien —respondió sin más Lucille levantándose y yéndose.

—Quiero confiar en ti —le dije—. Pero es complicado confiar cuando no sé qué es lo que espero.

—Estará bien, lo prometo.

Terminé asintiendo, aunque no estaba tan convencida, sin embargo, el sueño empezaba a tomarme y decidí ir a descansar.