Matar y Sobrevivir [Dueto Destructores #1]

21. Anabella

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ANABELLA

Tres semanas después.

[Jul es navidad en Noruega]

Es diecinueve de diciembre, y en esta isla parece que les entusiasma muchísimo jul. Cuando vivía en Rertfold también me emocionaba jul, era mi época favorita del año porque a pesar de que todas las personas teníamos problemas se sentía cierta vibra de felicidad. Jul nunca estará sobrevalorada para mí.

Cuando era más joven soñaba con pasar la navidad con una gran familia, mi propia familia. Me veía frente a una chimenea comiendo galletas con pijamas navideñas horribles, un esposo que alentará mi espíritu navideño y niños corriendo por todo lado.

Ese sueño solo se quedaría en eso, un sueño.

He decidido salir a caminar por la isla sola. La última vez que salí fue con las chicas y ahora he decidido que puedo salir yo sola. Me estuve aislando por miedo a lastimar a los demás, pero cada amanecer que he pasado con Lucien no sólo he aprendido a controlar mi poder. Él también me aconseja y a decir verdad ahora me gusta pasar tiempo con mi poder y también con Lucien.

Él es otra persona que se ha ganado mi cariño, casi dos meses son poco, pero paso tanto tiempo con él que incluso lo he empezado a considerar un amigo más, de hecho, a todo mi equipo lo he dejado de ver como simples compañeros, también son mis amigos.

Los entrenamientos de fuerza, velocidad, agilidad y puntería terminaron, me sorprendí cuando note que soy muy ágil. Gabriel nos hizo cruzar un laberinto de túneles y fui la primera en salir de ahí. He notado que cada uno de nosotros se destaca en algo:

Daniel y Lucille tienen una puntería excelente, Daniel nunca fallo con una flecha y Lucille igual con sus cuchillos, siempre dio en el blanco. Gabriel es muy fuerte al igual que Mila, ambos destacan en la fuerza. Lucien y Vadim son muy veloces. Yionne es muy ágil y sus manos tienen una precisión impresionante, no necesita del todo sus piernas cuando con sus brazos puede lograr muchas cosas.

Mañana empezaran los entrenamientos mentales, esos me asustan de cierta manera porque Gabriel ya explico que entrara en nuestras mentes, y dudo que algo bueno salga de la mía.

—¡Helados! ¡Lleven sus helados! —me distraigo de mis pensamientos con la voz del vendedor. Decido comprarme uno ya que he estado ganando dinero al estar en el equipo.

—De vainilla chips y brownie —le pido al señor que con gusto me lo prepara. cuando ya lo tengo en mis manos le pago y sigo mi camino

Otra razón por la que estoy aquí es porque estoy buscando un regalo para Daniel. Ayer gracias a Yionne descubrí que esta de cumpleaños, el número veinte. Tengo los ingredientes para un pastel que espero le guste, ahora necesito un regalo para él.

Me gusta esta isla ya que nadie me conoce y no les resulta extraño ver a alguien como yo, aunque me he tapado con maquillaje mi cicatriz, aun no me atrevo a dejar que todos la vean.

Estando en la playa una niña me regalo una pulsera violeta con un dije plateado diciendo que combinaba con mis ojos. Son tan amables que me gustaría quedarme por siempre en este lugar «Pero no se puede», no porque estoy a menos de tres meses de enfrentarme al juego.

Después de un rato caminando por la isla descubrí a un orfebre y se me ocurrió la idea perfecta para el regalo de Daniel. Recordé que tengo un fondo financiero y con eso pague el regalo que llevarán antes de las ocho a la casa, espero le guste.

Decido descansar cerca de una cascada pequeña donde me siento a comer mi helado, estoy relajada disfrutando del paisaje hasta que siento la presencia de alguien a mi lado.