Prólogo

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Tauriel era la más fuerte de los soldados del rey Thrandiul, era responsable, sagas, inteligente, astuta, un poco fría, leal, talentosa, letal y hermosa, no fue sino hasta que se encontró a cierto enano que la hizo conocer lo que era el amor.

El inicio de su amor con Kili fue puro, dulce y tal vez un poco frío, ya que él se encontraba encerrado en el calabozo.

Pero lo más un importante es que fue REAL.

Después de presenciar la muerte de Kili, Tauriel sólo tenía dolor dentro de ella, sentía que era incapaz de respirar, nada de lo que hacía la podía consolar, pero el destino le tenía preparados otros planes, una nueva vida la esperaba.

Kili siempre fue un enano alegre, un poco más alto que la media y muy bromista, el estar con él, era tener un constante dolor en el estómago y las mejillas de tanto reír.

No siempre tomaba las cosas en serio, hasta que apareció ella...

Kili sintió amor por Tauriel prácticamente desde el momento en que sus ojos se posaron en ella, fue como si pisará la tierra por primera vez y se sentía estable, ya no flotaba a la deriva, lo único que había deseado para él era estar con su familia en el reino de Erebor y por supuesto una vida llena de felicidad y amor junto a su amada elfa, pero el destino les tuvo preparado otro plan.

Reencarnar y soñar con una vida pasada y personas sin un rostro definido no siempre es fácil, tanto Kili como Tauriel lo saben, pero piensan que simplemente son sueños, pero ¿que pasaría si sus almas se reconocen y pueden tener una segunda oportunidad?

Una segunda oportunidad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora