Trato Por Amor ®

CAPITULO 14

Por la mañana Sarah despertó primero que Oliver, tomo su ropa la cual se encontraba en el piso, luego tomo la de Oliver y sin querer del saco salió un anillo el cual Queen había escondido.
Sarah salió de la habitación y en lo que preparaba el desayuno sus ojos se llenaban de lágrimas, no entendía exactamente el porque lloraba pero sabía que las cosas estaban por cambiar.

Escucho ruido proveniente del dormitorio, en el desayunador se encontraba café recién preparando, pan, jugo, fruta.

— Buen día, — Decía Oliver estando frente a ella.

— Buen día — Respondió ella dejando el plato de huevos revueltos.

Oliver tomo asiento y comenzó a preparar su café, ambos desayunaron en silencio.

— Tengo la mañana libre. Podemos hacer lo que quieras. — Decía Oliver tomando de la mano a Sarah.

— Encontré esto. — Decía ella mostrando el anillo. Oliver quedó perplejo ante lo que estaba pasando.
— ¿Es tuyo? — Pregunta Sarah.

— Si. — Respondió el endureciendo la mandíbula.

— ¿Te casaste y no pensabas decirme?

— Sarah. No es como lo piensas. — Intenta justificarse.

— Oliver. Esto ha sido divertido, pero si estás casado no quiero volver a verte. — Sentenció.

— ¡Oye! — Dice él.

— ¡Estás casado Oliver! ¡Tienes que respetar a tu mujer!

— No es mi mujer. Solo está conmigo por...

— Sea como sea Oliver. Ella lleva tu apellido.

Oliver mira a Sarah, estaba completamente seguro que no volvería a estar con él. Pues su acuerdo era que si alguno de los dos tenía algún compromiso con alguien más, sus encuentros llegarían al final.

— Seguiremos como amigos. — Decía ella.

— Sarah Perdóname.

— Hablame de ella. ¿Es guapa?

— Si. Lo es.

— Entonces...  Te cuidado, por qué si la conozco capaz y te la quito. — Oliver y Sarah ríen, ella tenía preferencias bisexuales. Algo que a Oliver le gustó desde un principio, varios encuentros con otras mujeres y Sarah hacían unas experiencias inolvidables.

— Me gustaría que la conocieras antes de hacerlo oficial ante los medios.

— No sé si pueda. — Se justicia Sarah.

— ¿Por qué?

— ¿Tienes una idea de cómo se Laurel cuando se entere?

Oliver dejo escapar un suspiro, solo tenía un par de días de haber llegado y ya tiene un problema.

— Los Bonnet tendrán una fiesta dentro de 2 semanas. — Decía Oliver. — Ahí sera dónde todo mundo la conozca.

— Bien. Será mejor que regreses a casa, un hombre casado siempre debe dormir en su casa, junto a su esposa. — Decía Sarah dejando un beso en la mejilla de Oliver.
Este la tomo de la cintura la acaricio por debajo de la blusa que ella llevaba.

— Oliver... — Decía Sarah al sentir las manos de él llegando a sus pechos.

— ¿Te gusta? — Pregunta él en su oído.