CAPITULO 24

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Narra Andrea

Eres mía. — Decía Oliver cerca de mi oído. Sentí su respiración cerca de mi cuello. Su mano aún en mi cadera me impedia moverme.
Comenzaba a tener un ataque de pánico. Jamás nadie había estado tan cerca. Trague saliva al sentir cada vez más cerca su respiración. El toque de sus labios sobre mi piel provocó un salto involuntario de mi parte, pero sus manos me devolvieron al lugar.

— Eres mía — Volvió a decir dejando un beso cerca de oído el cual dejo escapar un gemido de placer. Sus labios recorrieron mi mentón hasta llegar a mis labios, con delicadeza unió los suyos a los míos.
El beso era lento pero con pasión, comencé a profundizarlo, quería tenerlo más cerca de mi. Sus manos toman con fuerza mi cintura huniendome más a él. El beso seguía y sin darme cuenta que Oliver me había dejado ensima de la mesa.  Mis manos rodean su cuello, vaya que Queen sabe cómo besar a una mujer. Siento como una de sus manos entra por debajo de mi vestido y no se lo impido. Nos separamos unos segundos por falta de aire.
Pero Oliver besa mi cuello, dejando escapar más gemidos de placer. Sus largos y fríos dedos llegan hasta mi ropa interior la cual hace aún lado, con uno de sus dedos comienza a hacer círculos.

— Por favor — Digo con la respiración entrecortada.

Una vez más une sus labios a los míos, disfrutando más del placer de besarlo.
Sin esperar más un par de dedos siento que entran en mi. Me separé de él, para soltar un gemido fuerte con cada movimiento que hacía en mi.

Solté un gemido tan fuerte que me hace despertar de golpe.

La cercanía con Oliver me había dejado inquieta.
¿Por está razón había tenido un sueño húmedo? Me pregunté y es que era mi primer sueño humedo.

Salí de la cama bañada en sudor, sabía que no era nada malo tener ese tipo de sueños pero me sentía confundida.
Abrí la puerta del balcón para que entrara un poco de aire fresco y me senté en la silla tal vez eran las 3 o 4 am ya que las estrellas y la luna iluminaban la noche.

Cerré mis ojos confiada en que no volviera tener un sueño así.

Por la mañana unos golpes a la puerta me hacen salir del baño después de darme una ducha.
Al abrir me encontré con Raisa para decirme que el almuerzo estaba listo.
Le pedí que lo subiera pues no queria encontrarme con Oliver después de lo de ayer. No sé cómo lo vería a los ojos después de lo que soñé.

Después de medio día baje al jardín quería leer un poco más. Estando en el aire fresco de Ciudad Starling llegaba a mis mejillas.

Andrea — Escuché detrás de mi.

— Si.

— Mañana iremos a Queen Consolidated.  — Decía acercándose más — Algunos inversionistas quieren saber sobre las dos escuelas que elegiste.

— Está bien. — Respondí y ambos guardamos silencio, podía sentirse que era un silencio incómodo.

— Andy yo — Dijo con nervios
— Quiero ofrecerte una disculpa por la manera en que te hablé.

No respondí pues mi mente se había quedado en blanco.

— Mi intención jamás es hacerte sentir asi. — continuo al ver que no respondía. — Por favor di algo.

Me gire para verlo a los ojos — Desde que te conocí — Respondí — Supe que tenías un carácter difícil y lo respeto, más no lo acepto. No acepto que me grites, no acepto que desees hacer conmigo lo que quieras.

Trato Por Amor ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora