𝖂𝖔𝖒𝖇 𝕱𝖔𝖗 𝕽𝖊𝖓𝖙 💚 𝕵𝖆𝖊𝕵𝖚𝖓

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Renjun cerró sus ojos sintiendo los besos de Jaemin en su cuello, acarició sus hebras castañas tirando un poco de estas de vez en cuando. Quería desvestirse ahí mismo, pero Jaemin estaba muy entretenido dejando besos y mordidas en su cuello, mientras que el solo sentía fuego dentro de su cuerpo.

Esta vez Renjun quiso dar con la iniciativa y se subió en su regazo, dejando justo su trasero con el miembro ya duro de Jaemin. El omega comenzó a desabrochar su camisa viendo su abdomen el cual no evitó lamer con su lengua y dejar besos mientras seguía desabrochando la camisa hasta llegar al final y dejar su abdomen completamente expuesto.

Jaemin seguía sumergido en la sensación de la lengua de Renjun en su abdomen que ahora dirigía hacia sus tetillas, un pequeño gruñido escapo de su garganta haciendo que Renjun sonriera por su cometido.

Renjun no esperó mucho para el también quitarse su polera y dejar la mitad de su cuerpo descubierto, Jaemin acarició su cintura mientras se seguían besando.

Una mezcla de emociones era lo que ambos sentían, pues eran casi extraños o al menos Renjun lo veía así. Habían pasado cuatro meses desde que Jaemin había ido en busca de Renjun a París y lo llevó hasta su casa para que se quedara, jamás pensó en sentir algo por Renjun, pero uno nunca sabe lo que puede pasar.

— Jaemin~ — Gimió el omega.

Jaemin lo ayudó a quitar sus pantalones y solo quedar en bóxer, sus muslos quedaron expuestos y estos se llevaron la atención de Jaemin. Renjun solo jadeaba pidiendo un poco más de acción, pero de todas maneras lo disfrutaba.

— Deja de besarme y fóllame. — Más que pedirlo fue una orden.

Jaemin no evitó sonreír pues le había causado gracia, quitó el bóxer de Renjun y lamió sus largos dedos para Introducir uno en el omega, provocando que este se removiera en su lugar. Luego introdujo un segundo dedo, esta vez moviéndolos como si se tratara de una tijera.

Y así hasta llegar a los tres dedos, que fue donde Renjun estaba más que preparado. Jaemin tenía una perfecta vista de su mojada y rosada entrada, lamió sus labios y besó una última vez a Renjun.

Antes de bajar su bóxer y dejar su miembro expuesto, Renjun desde su lugar abrió sus ojos de par en par. Sabía que le iba a doler, pero que luego lo disfrutaría como si fuera la última follada de su vida, solo dejó que su cuerpo se relajara, abrió más sus piernas para que Jaemin se posicionara entre ellas e introdujera su miembro de apoco.

— Joder nene. — Gruñó con su voz rasposa.

Cuando Renjun movió sus caderas Jaemin supo que podía moverse, comenzó con un vaivén lento y sin apuros. Solo disfrutando de como las paredes de Renjun se amoldaban a su miembro y escuchando sus gemidos ahogados.

— M-más rápido Jae. — Jaemin solo aceleró más los movimientos de sus caderas, haciendo que sus testículos chocarán con las nalgas de Renjun.

Jaemin dejó una nalgada, que sorprendió a Renjun, pero no dijo nada. Algo avergonzado de lo recientemente hecho, siguió con su trabajo, pero esta vez masajeando sus nalgas.

— Hazlo otra vez. — Dijo entre jadeos.

Jaemin dejó otra nalgada un poco más fuerte, Renjun sintió aquel espasmo en su cuerpo con satisfacción, sonrió y siguió recibiendo las embestidas que Jaemin le daba con delicadeza, era una bestia, pero no quería lastimarlo.

— N-no aguanto...

— Solo un poco más lindo, hagámoslo juntos.

Jaemin dio un poco más fuerte sus estocadas, haciendo que Renjun gimiera un poco más alto. El alfa tapó su boca haciendo que Renjun se ahogara por unos segundos, apenas Jaemin sintió su orgasmo cerca quitó su mano y Renjun se corrió junto a él.

Jaemin se movió un poco y Renjun se quejó.

— Lo siento. — Renjun abrazo su cintura con sus piernas y se quedó quieto hasta que el nudo se deshiciera.

— Gracias Jae. — agradeció Renjun con su rostro escondido en su cuello, el solo respondió con una caricia en su cabello más un besito en su mejilla.

Habían pasado unos cuantos minutos y pudieron separarse, Renjun quería bañarse pues tenía aquel líquido pegajoso entre sus muslos y nalgas.

— ¿Quieres que nos bañemos juntos? — Preguntó Renjun con timidez.

Jaemin no respondió y lo tomó de su cintura, aún desnudos lo llevó al baño y abrió la llave, esperando a que el agua calentará Jaemin lo besó.

Renjun definitivamente amaba los besos de Jaemin, lo besaba como si de un cristal se tratara. En parte a él le gustaba, ya que nadie lo había tratado con tanto cuidado como lo hacía el alfa. Pero por otro lado también le gustaba que fueran rudo con él, más cuando Jaemin lo era y lo besaba como si el mundo se fuera a acabar.

Jaemin se separó y le sonrió, limpiando sus labios que tenían un poco de restos de saliva. Renjun mordió su labio ya rojo y algo hinchado a causa de las mordidas que Jaemin le había dado.

Cuando el agua estaba a una temperatura moderada, Jaemin dejó que la bañera se llenara de agua hasta un cierto punto y ayudó a Renjun a meter sus pies y esperar a que se sentara, para luego seguir él.

— ¿Es malo que me guste estar así contigo? — Preguntó mientras Jaemin enjabonaba su cuerpo con una esponja.

— No sí a mí también me gusta. — Renjun sonrió. — Renjun yo... Olvídalo.

— ¿Qué me quieres decir?

— Nada.

— No me dejes con la duda. — Jaemin dudó en sí decirle o no, pero optó que lo mejor era ser sincero.

— Me gustas y mucho.

Joder se sentía como un adolescente con hormonas alborotadas.

Renjun rió con vergüenza, sintiéndose tímido y provocando que sus mejillas tomaran un color carmesí casi llegando a rojo.

— ¿También te gusto o acabo de quedar como un idiota?

— También me gustas Jae.

Jaemin fue esta vez quien sonrió, pero Renjun se acercó a besarlo, acariciando su mejilla con su mano llena de espuma.

— ¿Cuantos días dura tú celo? — Le preguntó Jaemin.

— Como tres o cuatro días.

— Pediré una semana completa entonces. — Dijo refiriéndose a que sus padres cuidasen a los niños.

— Pero los voy a extrañar, Hyuck también tendrá que irse una semana. — Formó un leve puchero.

— Entonces apenas acabe tú celo los vamos a buscar ¿Sí? —Renjun asintió. — Tu amigo se puede quedar en el hotel.

— ¡Jaemin!

— ¿Qué? Pasas todo el día con él, ya nos tienes abandonados. — Esta vez Jaemin formó un puchero. — Además de que creo que le gustas.

— Lo dudo, Donghyuck sale con Mark. — Jaemin desvió su mirada. — Estás celoso.

— Claro que no, solo no me cae bien.

— Ni siquiera has hablado con él, Jae. — Jaemin se encogió de hombros y Renjun volvió a reír. — Tonto.

— Bésame mejor, bésame, bésame. — Jaemin estiró sus labios y Renjun dejó un besito. — Huang

— Terminemos de bañarnos, tengo frío.

— Mi nene tiene frío.

Renjun le lanzó un poco de agua haciendo que Jaemin se lo devolviera, nuevamente volvieron a besarse, pero esta vez como una pareja.