⌦ 𝙑𝙞 𝘐

1.4K 84 7
                                    

ᴺᴼᵂ ᴾᴸᴬᵞᴵᴺᴳ : Sᴛᴀʏ ᵇʸ ᵃʳⁱ ᵃᵇᵈᵘˡ

El lugar estaba plagado de personas, y con estas risas y muchos cuchicheos, gracias a esto la adolescente logró entrar sin ser percibida

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El lugar estaba plagado de personas, y con estas risas y muchos cuchicheos, gracias a esto la adolescente logró entrar sin ser percibida.

Se sentó de golpe en la mesa más cercana y desolada del lugar, su rincón. Se sostenía con cansancio el costado derecho de su abdomen, había estado en una pelea, completamente necesaria, siendo tres contra uno; ganó, claro que ganó, pero no quitemos que eran tres contra uno, así que consecuencias hubo.

La herida más obvia era la de su derecha, pero sabía que en su espalda y cara iba a tener rasguños y moretones, al igual que sus rodillas dolían.

El hombre detrás de la barra al percatarse de la presencia de la castaña sonrió, hace días que no se aparecía por el lugar, y aunque sabía que la menor podía valerse por sí misma, el que los pensamientos desafortunados aparecieran no evitaba su preocupación, al final del día la conocía desde bebé.

Tomó una jarra y ahí le sirvió su bebida de preferencia, tomó dos vasos y le habló a la peli rosa, la cual no tardó en bufar al darse cuenta de porque su turno de descanso había acabado tan pronto.

— Llévaselo por favor— le pidió.

Mientras tanto, la recién llegada intentaba revisar la gravedad de su herida con todo el disimulo posible, no le gustaba llamar la atención y menos que creyeran que necesitaba ayuda, siempre logró valerse por sí misma, le provocaba cierta frustración e incomodidad pedir ayuda hasta para lo más mínimo.

La chica se sentó a su lado, e ignorando por completo el estado de la otra empezó a servirles a ambas.

— ¿En dónde estuviste todo este tiempo? Hasta había escuchado que te habías mudado a Aguas Turbias, lo cual no me sorprendería— dijo con cierto tono burlón.

Al no recibir una broma o comentario sarcástico por parte de la otra la volteó a ver con confusión.

— Liza— la llamó, pero su respuesta fue un murmullo ininteligible— ¿Qué?

La castaña levanto el rostro el cual estaba algo pálido y tenía varios rasguños más un notable moretón rojizo en la frente. Violet se sorprendió y con rapidez la escaneo buscando el foco principal de su estado, encontrándose con las manos delgadas presionando en una herida que ya había manchado sus ropas con algo de su propia sangre.

— ¿Puedes levantarte?— preguntó aún algo aturdida, la otra sólo negó.

Vi se levantó y con rapidez se dirigió hacia el sótano, podía hacerse una idea de porqué Liza se encontraba tan débil sabiendo que se a metido en situaciones mucho más riesgosas de las cuales salía muchísimo más viva que a como se veía ahora.

Abrió su habitación recibiendo un par de ojos curiosos, sin reparar en la menor se dirigió al pequeño armario y de este empezó a sacar todo lo que necesitaba (o creía necesitar) para curar a la otra.

𝗢𝗻𝗲 𝗦𝗵𝗼𝘁𝘀 | 𝘈𝘳𝘤𝘢𝘯𝘦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora