Gael Gray ©

Capitulo 19

Gael Gray

Dos días después...

—¿No quieres jugar, cierto? —le pregunto a Jean.

Niega con la cabeza.

—¿Qué quieres hacer?

—Quiero a mi mamá. Quisiera morirme —se le salen algunas lagrimas.

No sabia que hacer, me sentía mal. A veces me quedo en estado de shock por saber que mi papá hizo lo que le mandó hacer Alton y soy testigo de eso y no tengo el valor de decirle a Jean, a mi único amigo, que fue mi padre que mató a su madre y si no lo hacia me iba a matar a mi. Que mi padre no tenia otra opción y que de verdad me sentía mal.

Pero esas palabras no salían de mi boca. Me sentía como un asesino también, siento que también maté a su mamá.

Lo abrazo.

—Estoy aquí Jean —lo abrazo fuerte— siempre estaré para ti. Soy tu amigo Jean, recuérdalo.

Me siento como un hipócrita diciendo esas palabras, no debo decirlas. Soy una mala persona.

—Gael —comienza a llorar más fuerte— Mi mamá Gael, ¡Quiero a mi mamá! —grita— Siento un vacío Gael, es doloroso. Duele.

—Hey Jean —viene Yael corriendo.

Jean la vea y se despega de mi para abrazarla a ella.

—Llora Jean, sé que es doloroso. También sentí eso cuando se murió mi abuela...

—Es diferente Yael, creo que es mucho más diferente...

De repente se escuchan gritos adentro de la casa. La voz de mi padre mezcladas con la del padre de Jean que estaba aquí.

Juan vino porque quería hablar algo con mi padre y me dejó con Jean.

—¡Te voy a matar idiota! —gritó Juan llorando. Salió hacia el patio en busca de Jean —¡Vámonos Jean, vámonos de aquí!

—¿Qué pasa padre? —pregunta Jean desconcertado.

Juan lo agarra por el brazo a la fuerza.

Mi papá sale al patio por igual.

—Tranquilízate Juan.

De pronto saca la pistola que tenia detrás y le apunta hacia mi papá.

Yael grita y me agarra corriendo, cerrándome los ojos.

—¿Qué me tranquilice dices? Jodeté Rafael.

—¿Qué está pasando aquí? —escucho la voz de mamá acompañado de un grito— Dios mío Juan. Baja esa arma.

—Rafael. Pagarás por lo que me hiciste. Y sufrirás mucho peor de lo que estoy sufriendo ahora mismo. Te lo aseguro.

Escucho unos pasos alejarse.

Yael quita su mano de mis ojos y corre hacia mamá. Yo hago lo mismo cuando la veo y la abrazo.

—¿Están bien? —pregunta preocupada. Nosotros dos asentimos con la cabeza. Mamá mira a papá —Ahora en que lio te metiste Rafael.

—Hice algo malo, Aingeal —papá estaba de espalda hacia nosotros pero estaba mirando hacia el frente.

—¿Qué hiciste Rafa?

Papá se voltea, mamá nos suelta cuando ve la cara de papá con lagrimas, va hacia donde él y lo abraza.

Yael y yo presenciamos la escena sorprendidos por la reacción de nuestro padre.