Mi Hermoso Destino.

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Luego del incidente con el ex de Andrea y estar poco más de tres semanas en coma, desperté con la mejor noticia que Andy me pudo dar, por supuesto que me encanta la idea de ser madre, también sé que aún somos jóvenes y nos queda mucho por experimentar antes de convertirnos en madres pero nuestro bebé ya esta en camino y será muy amado o amada por nosotras. 

Andrea no estaba segura respecto a si yo quería hijos o no, después de dejarle en claro que si los quería y más si eran con ella. Programamos la consulta para su primera ecografía, esto me emocionaba mucho el poder ver por primera vez a nuestro bebé, quizá sea demasiado pronto pero ya quiero comenzar a comprarle cosas como la ropa, la cuna, juguetes, etc. Después de recibir el alta medica, tengo que ir a rehabilitación física, no es la gran cosa pero me lo recomendó el médico. Con respecto a la universidad comprendieron perfectamente la situación y me dieron la oportunidad de prepararme durante unas semana para presentar los exámenes finales, siento mucha presión ya que de estos resultados depende si me graduó con Andrea, lo que me ilusiona mucho ya que con ella a mi lado quiero cumplir todas mis metas.

—Sammy, por atención por favor. Recuerda que de esto depende tu titulo... —Andrea parece estar más presionada que yo con esto de los exámenes.

—Tranquila amor, confió en ti y todos tus apuntes. —solo me quedan dos días para iniciar una larga semana de estrés. 

El lunes finalmente llego, hoy tengo que presentar dos exámenes, estoy sumamente nerviosa pero confió en todo lo que Andrea me dio pero sobre todo confió en mi, al final del día ambos fueron aprobatorios. El martes solo tuve un examen me fue mejor de lo que esperaba, al llegar el viernes solo quedaba uno, fue aprobatorio pero lo que más odie de esta semana fue el no poder prestarle la atención de Andrea necesita. 

—Hola. —Luis paso a recogerme, con el motivo de festejar que nos vamos a graduar juntos. —Estás lista para festejar que terminamos la universidad y que vas a ser mamá. —antes de salir del hospital Andrea y yo les dimos la noticia del embarazo a Luis y Ana, su madre.

—Si, pero algo leve tengo que regresar a casa temprano... —eran casi las siete de la noche, realmente esperaba que no tardáramos mucho.

Casi cuatro horas después salimos del bar, llegué a casa pasada la media noche, no tomé mucho pero si lo suficiente como para manejar, encontrar un taxi fue un poco complicado pero finalmente estoy frente a la puerta de mi departamento donde dentro me espera el amor de mi vida. Entre en completo silencio por si estaba durmiendo cosa que no era así, me estaba esperando con mala cara en el sofá.

—Hola amor. —fue lo primero que salió de mi boca. Mal saludo.

—¿Donde estabas?. Te estuve llamando infinidad de veces ya me estaba preocupando que algo te hubiera pasado. —creo que estaba muy molesta conmigo. Y tiene toda la razón de estarlo ni siquiera un mensaje le envié avisándole que estaría con Luis, nada.

—Lo siento de verdad. Se me olvido avisarte que estaría con Luis. —saque mi teléfono que desde que entramos al bar se murió y lo arrojé al sofá. —Y cuando te iba a mandar un mensaje ya no tenía pila, de verdad lo siento. —me acerque a ella con cuidado no parecía muy receptiva conmigo.

—No quiero ser una novia controladora que siempre quiere saber donde estás... —me arrodille entre sus piernas. —Hueles a alcohol ¿manejaste así?. —esta pregunta y su mirada me dejaban ver que realmente se preocupa por mi. Acaricie su vientre que apenas si se empezaba a notar.

—No eres una novia controladora, me encanta que te preocupes por mi, que quieras cuidarme tal y como yo lo hago contigo. Te amo... y no, no maneje tome un taxi. Temía quedarme dormida y ocasionar un accidente. —le di un beso en la mejilla no quería incomodarla con mi aliento a alcohol.