La razón de tú odió.

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Afuera del pozo.

Saga mantenía a Camus detrás de él, mientras se mantenían atentos a los movimientos de Milo él cuál mágicamente había creado un arco con flechas con las cuales amenazaba con lanzarle a Camus.

Milo: váyanse... - susurro.

Saga: sólo trata de calmarte Milo. Y baja esa arma despacio - le pidió.

Milo: no puedo hacerlo - dijo asustado, mientras a cada movimiento que daban Milo les seguía apuntando.

Camus: Saga... Hilda está manipulando a Milo. ¿Qué hacemos? - pregunto.

Saga: lo más conveniente, sería que todos nos fuéramos pero si lo hacemos corremos él riesgo de que Hilda pueda matar a tu esposo - explicó.

Shaka: ¿Qué sugieres? - le pregunto mientras poco a poco trataban de acercarse.

Saga: pues por él momento no perderlo de vista - le dijo mientras él también comenzaba acercarse con Camus.

Milo: Vete Camus, tú eres él objetivo a destruir - les suplico.

Camus: estás loco si piensas que lo haré Milo. No te voy a abandonar - le dijo mientras Milo estiró más la cuerda que le daría él impulso a la flecha...

No muy lejos de ahí...

Hilda por su parte sonriendo veía todo en un espejo mientras que al aire pregunto.

Hilda: ¿Que harás Camus?, Si te quedas es obvio que Milo te matará con su flecha y no sólo a tí también lo hará con todos y cada uno de tus hermanos, pero si decides abandonarlo jamás lo volverás a ver - decía mientras sonreía con malicia - ya me aburrí es momento de acabar con esto - dijo pero escucho una voz a sus espaldas.

Mystoria: ¿Qué estás haciendo Hilda? - pregunto llamando la atención de la bruja la cuál se dió la vuelta sólo para ver qué estaba acorralada por los cuatro hechiceros.

Hilda: ¿Mystoria, Dégel, Écarlate, Kardia, cómo es posible que sigan vivos?, Se supone que ustedes habían muerto - les dijo pero tiempo después recordó haber llevado los restos así que sonrío - ya veo... Así que para eso quería sus restos Lyfia - hablo mientras que una flecha fue a impactarse cerca de su rostro.

Mystoria: Te exijo que liberes a nuestro hijo - le dijo mientras le apuntaba directamente a la cabeza.

Hilda: ¿Liberarlo? - pregunto para después sonreír - de acuerdo si eso es lo que quieren - dijo para después tronar sus dedos. Entonces se vio que antes de romperse aquel espejo donde todos lo veían Milo soltó la flecha justo cuándo Camus estubo a pocos centímetros de él.

Kardia: ¿Pero que hiciste? - pregunto molesto.

Hilda: yo no hice nada, sólo lo liberé cómo ustedes me lo pidieron, pero para que se liberará tenía que matar a alguien y creo que lo logró - dijo para después ponerse a reír de la nada sintió algo punzante en su cuello mientras escuchaba a Dégel decir.

Dégel: escucha, nos importa muy poco lo que llegue a pasarle a nuestros cuerpos ahora. Pero si algo llega a pasarle a Milo te mataré lenta y dolorosa mente - le advirtió.

Hilda: quiero ver qué lo intenten - les dijo para después verse rodeados por un montón de hombres que ellos reconocieron al instante.

Écarlate: revivió a los antiguos dragones ¿Porque? - pregunto mientras la veían desaparecer.

Hilda: jajaja, mis queridos dragones espero que puedan disfrutar sus nuevos juguetes - dijo mientras los otros cuatro se vieron a los ojos para después ponerse en guardia.

Con Milo y los dragones.

Por un sólo cabello Camus pude esquivar la flecha mientras todos veían preocupados a Milo que se había quedado inmóvil en su lugar, sin decir ni hacer nada. Ni un sólo movimiento para después verlo caer Camus rápidamente corrió para atraparlo y evitar que se lastimara.

Camus: Milo... ¿Dime estás bien amor? - pregunto mientras Milo abrió un poco sus ojos.

Milo: ¿Porque no se fueron? - pregunto.

Camus: estás loco si piensas que te dejaríamos - le dijo molesto.

Milo: pude haberlos matado - susurro cansado.

Shaka: tenemos que buscar a Hilda - dijo mientras todos se acercaban.

Saga: a Milo lo dejaremos en él castillo, él objetivo somos nosotros así que los demás no corren peligro y estoy seguro que los chicos lo cuidarán bien. Camus no podemos arriesgarlo más - le explicó mientras Camus preocupado vio a Milo dormir.

Camus: está bien vamos - dijo mientras lo cargaba.

Con Milo.

Todo estaba oscuro, escuchaba algunas voces. Camus... Saga, Shura, Death mask, Kanon y Shaka también. Se escuchaban preocupados pero no hay nada que temer. Preste más atención a mi alrededor, encontrandome con una luz brillante la cuál comencé a seguir hasta que pude ver algo.

Esa era la mujer que me había traído a éste mundo, aquel día en él pozo se le veía muy feliz a su lado se encontraba una chica rubia a la que después de ciertos minutos pude reconocer, era Flear, ¡Si!, Era ella, se veía mucho más pequeña de la Flear de mí mundo. Las estuve siguiendo durante todo él día ellas jugaban, reían, cocinaban prácticamente lo hacían todo juntas prácticamente todo los días hasta que llegó una carta desconocida para aquella chica de cabellos plateados. A la cuál se referían por Hilda leyó él contenido del sobre dónde le pedían que fuera a la aldea vecina por un asunto muy importante ella algo dudosa aceptó así que prosiguió a despedirse de su hermanita.

Hilda: Flear, necesito que te portes bien y seas buena niña en lo que tú hermana no está ¿Eh Sido clara? - pregunto.

Flear: si hermana y no te preocupes, yo le portare muy bien durante tú ausencia. Cuídate hermanita - dijo sonriendo para después ver a su hermana partir.

Fue entonces que la tragedia sucedió, la aldea en la que aquella niña se había quedado había sido atacada por los dragones rojos y esa pobre niña había servido de alimento para ellos. Esa misma noche aquella chica llegó viendo lo que algún día llamo su hogar envuelto en llamas y los dragones negros sobrevolando él lugar retirándose de la escena entonces fue cuando una lluvia llegó, dándole un toque más triste a la situación la mujer apretó sus puños con fuerza mientras que furiosamente dijo...

Hilda: Algún día me vengare... Me vengare de todos los dragones lo juro. Pagarán por su osadía. Pagarán él haber matado a Flear - dijo molesta.

Escuché unos pasos a mis espaldas, mientras que sentada en lo más alto de los árboles se encontraba una muchacha, idéntica a mí la cuál veía a Hilda de forma sería. La lluvia mojaba su cabello azul por lo cual este estilaba mientras ella paso su vista a los dragones que estaban en él cielo para después simplemente desaparecer de ahí.

Continuará...

Él Dueño Del Dragón (Camus x Milo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora