Él día en que nos conocimos

229 23 14
                                    

Narra Camus.

Hola, mí nombre es Camus soy él hijo menor de mí familia tengo cinco hermanos mayores quienes se an convertido en mí mayor dolor de cabeza. Mis primeros hermanos son Saga y Kanon son gemelos, mi tercer hermano se llama Shaka un chico muy reservado, él otro se llama Shura y el quinto es mejor conocido cómo Deathmask, no me pregunten porque, bueno y nuestro secreto es... Que somos dragones.

Bueno cierto día en él cuál disfrutaba de mí soledad, no sabía el porque me había dejado manipular por Deathmask para ir a retar a un duelo a los hombres lobo que claramente respondieron a las provocaciones y lo que ocasionó que yo quedará herido, mí hermano decidió esconderme en una cueva que había en él bosque en lo que me recuperaba ya que no quería ser regañado por mis hermanos mayores así que en mí buena voluntad de no querer meterlo en problemas me quedé ahí. Cierto día escuché que alguien entro a la cueva dónde estaba así que me mi instinto actuó gruñendo a la visita y pues grande fue mí sorpresa al ver una dulce mirada ahí era un niño, Él cuál me veía sorprendido. Yo por mí parte también me sorprendi porque lejos de asustarse él se quedó haciéndome compañía trato de darme de comer pero siempre lo rechazaba. Así estuvo insistiendome por una semana hasta que le hablé.

Camus: no tienes porque seguir haciendo esto, creo que ya te debiste de haber dado cuenta de que no voy a comer nada de lo que me traigas, algo que siempre e detestado es que alguien me tenga lastima - dije mientras él sólo me vio - ¿Hablo en inglés o que sucede? - pregunte a lo que él solo se puso de pie y se fué, yo sólo suspiré cansado.

Pasadas unas horas.

Estaba recostado en el mismo sitio, viendo con aburrimiento cómo una vez más él pequeño había dejado un poco de comida y agua cerca mío para después darse la vuelta y retirarse. Era extraño cómo él seguía esforzandose en traer esto aunque supiera de sobra que no comería nada de lo que me traía. Así paso durante una semana que fue lo que me tarde para recuperarme del todo pero extrañamente esa noche él no llegó cómo siempre lo hacía lo cual yo sentí muy extraño hasta que mi hermano mayor llegó a buscarme.

Saga: Camus... Tenemos que irnos de aquí rápido - me dijo mientras me jalaba.

Camus: ¿Qué sucede Saga?, ¿Cuál es la urgencia? - pregunte confundido.

Saga: vamos a mudarnos, eso es lo que pasa - me dijo.

Camus: ¿Y eso porque?, Él castillo nos a pertenecido por generaciones - respondi.

Saga: los dragones rojos están aquí - me dijo.

Yo asustado lo ví, los dragones rojos eran nuestros enemigos desde siempre pero... Cada vez que nos encontraban ellos destruían todo lo que se encontraba a su paso, entonces lo recordé.

Camus: Él niño - dije preocupado para después rápidamente separarme de mí hermano e ir corriendo a la aldea que estaba cerca donde seguramente aquel niño vivía.

Saga: ¡Camus regresa!, ¡La aldea está completamente destruida! - grito para después seguirlo.

Con Camus.

No supe cómo fue que lo hice pero llegué rápidamente a aquel lugar, dándome cuenta de que efectivamente los dragones rojos estaban destruyendo por completo él lugar las personas corrían despavoridas aunque muchas quedaban carbonizados en su intento fallido de huir. Busque rápidamente al niño y logré detectar su aroma en una de las casas que se estaban incendiado rápidamente me dirigí hacia haya y entre el lugar estaba por completo en llamas a él lo encontré inconsciente en la esquina de la casa parecía que se había lastimado la parte frontal de la cabeza ya que le estaba saliendo sangre de ahí. Busque rápidamente a ver si encontraba a sus padres pero lamentablemente lo único de lo que pude darme cuenta fue que debajo de unos escombros habían dos cuerpos y suponiendo que eran ellos decidí mejor sacarlo a él rápidamente de ahí. Así lo hice quise alejarlo de la zona de impacto pero me descuidé de la nada una flecha llegó impactando con mí pecho y un árbol sabía que aquello era un sello cuando levanté la vista pude ver a un anciano con un arco.

Hakurei: traigan al niño - ordenó serio, en ese momento recordé que tenía al pequeño en brazos rápidamente baje la vista para asegurarme de que estuvieran bien, para mí fortuna la flecha no lo había tocado.

Los hombres rápidamente me lo quitaron de los brazos y se alejaron de mí, dejándonos sólo a ambos.

Hakurei: ¿Antes de que te duermas Camus?, ¿Porque mataste a Kardia y Dégel y con que propósito querías llevarte a su hijo? - pregunto.

Camus: Hakurei, ¡maldito miserable! - fue lo último que dije para después sólo ver oscuridad.

Narración normal.

Hakurei por su parte sólo vio él cuerpo de aquella bestia, él sello que le había puesto debería bastar para dormirlo para siempre, no lo mataría pero si lo haría dormir para que no pudiera hacer más daño, pero... Aún se preguntaba ¿Porque matar a los padres del niño?, Entonces uno de sus hombres se acercó.

Manigoldo: Hakurei ¿Que vamos a hacer?, No podemos regresar a la aldea está completamente destruida y Milo... - dijo mientras veía al menor quien permanecía inconsciente en sus brazos.

Hakurei: a él tendrán que alejarlo de aquí. Camus lo quería por una razón - dijo viendo al joven quien dormía en aquel árbol - usarán el pozo de los cadáveres para llevarlo a un sitio más seguro. Cardinale, DeathToll, ¿Puedo confiarse los a ustedes? - pregunto mientras los mencionados asentían.

Rápidamente se acercaron al pequeño para tomarlo en sus brazos y comenzar a irse fueron acompañados por toda la aldea pero lo que nadie se espero fue que al entrar en aquel lugar y todos, absolutamente todos perderían él conocimiento de que ellos existían y se olvidarian de lo que realmente había sucedido ese día. Ese mismo día que una misteriosa leyenda se escribió por si sola dejándose escrita en todas las partes de aquella era aguardando a lo que vendría en él futuro.

Continuará...

Él Dueño Del Dragón (Camus x Milo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora