June:
Disfrutaba la mayoría de las actividades que hacía, desde andar a pie, hasta saltar de una cascada, pero jamás se me facilitará estar frente a toda una clase hablando de un tema que frente a mí tenía a un especialista en ello. Mi temperatura corporal había subido, me sudaban las palmas de la mano y también la curva de los pechos.
La mirada profunda del profesor Sánchez no dejaba de clavarse en mi nuca como cuchillas afiladas, seguía teniendo una batalla con el maldito y viejo computador de la escuela. Maldecí cientos de veces en mi mente por ser tan tonta y elegir el sistema cardiovascular, creyendo que solo formaba parte un corazoncito que palpitaba, fui tan ilusa como cuando pensaba que la separación de One Direction solo sería por unos veces.
Tomando todo el aire que pude giré sobre mis talones, cuidando no tropezar con los tacones que llevaba para darme unos centímetros más de altura y mostrar una apariencia profesional con elegancia y por supuesto, sofisticada.
—Buen día, estimados compañeros y profesor, frente a ustedes tienen una imagen de un corazón, tal y como lo conocemos superficialmente. Sin embargo, nada es lo que parece y con ello —cambié a la diapositiva mostrando todo el sinfín de venas, aterías y cavidades con las que contaba el órgano —, este es un corazón desde la vista interna. Comencemos por la arteria cava superior...
Y así comencé a hablar de lo que había estado estudiando por horas. Como iba pasando el tiempo, mi voz se mostraba más confiada y con ello me relajé, mis compañeros estaban atentos a la interacción del modelo tridimensional. Todo iba perfecto.
—
—Lo hiciste muy bien cachorra, al inicio la voz te temblaba, aunque todo lo demás fue excelente. —Me felicitó Justin con su gran humor, contagiándome su gran sonrisa.
—Justin tiene razón, nena, lo hiciste increíble. Hasta Sánchez se limitó en comentar. Algo nuevo en él.
Victoria se acercó dándome un abrazo, como siempre sus comentarios eran dulces y con esa voz tan pacífica.
Los tres caminamos a la salida, se supone que ahí Seth estaría. Me emocionaba verlo y contarle como había ido mi exposición, al pobre ya lo traía mareado con todo ese rollo. A lo lejos lo vi, mi vista no era la mejor, pero podía distinguir a mi novio incluso en un tumulto de gente.
—¿Qué te parece June? —Dijo Justin al percatarse de mi distracción.
—Ah sí, sí. Yo prefiero la playa, algo íntimo.
El cumpleaños número veintidós de Angie se acercaba, estábamos a tan solo unos días y no podíamos ponernos de acuerdo para elegir a donde ir. Yo propuse tener un hermoso día de campo por la noche y encender una fogata a lo hippie. Victoria se negó con la excusa de que era algo muy cliché y nada original, por lo que propuso ir a una explanada en la que todo fuera pasto con vida y silencio; todo aquello me encantó ya que yo amaba con locura el campo y más con mis amigos.
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La chica que se perdió en las estrellas. [+18 ✔️ ]
Ficção AdolescenteEn la vida de June los colores son distorsionados, a veces ve gris, a veces ve amarillo, pero desde que conoció a Seth su vida tomó el color azul salvaje que tanto necesitaba. Ella si lo quería podía pasar desapercibida en cualquier lugar: ternura...