DESPUÉS DE LA HISTORIA (YOOSUNG X MC)

CAPITULO 45

DESPUÉS DE LA HISTORIA

CAPÍTULO 45

Coloreaba con rapidez, ya que en cualquier momento su madre tocaria su puerta y...

— Sua...

Justo como pensaba, su progenitora entró a su habitación, centésimos después de tocar la puerta.

De forma igual de rápida, congeló la pantalla del ordenador para que solo viese el protector de pantalla.

— Sua ¿En qué estabas perdiendo el tiempo? Mírate, ni siquiera te has arreglado –se quejó su madre, que desde hace días se había estado comportando con cierta ansiedad, al saber que su hermano menor y su novia vendrían a casa para pasar la primavera con ellos−. ¿Ya te has bañado?

— Si, solo me falta pasarme la plancha y ponerme la ropa –respondió mientras se levantaba del escritorio y abria su ropero para sacar el conjunto que su madre le indicó ponerse antes−. Pero... mamá ¿No crees que te estas preocupando demasiado? –agregó en un intento de calmarla−. Yo he visto a la novia de tontosung en fotos de Oustagram y se me hace que es muy corriente. Con que la recibamos con nuestra ropa que usamos habitualmente, estaría bien.

— ¿Pero qué cosas dices, Sua? –protestó la mayor, con ligero enojo–. Solo se puede dar una primera impresión. Y no se puede juzgar a la gente solo con fotos... No quiero que venga y nos vea como pueblerinos. La gente de Seúl es muy juzgadora y crítica. Lo sé, por qué me ha tocado interactuar con un par en alguno de mis clubs.

— Bien, solo era una idea –se metió al cambiador para mudarse de ropa−. Entonces supongo que iremos a comer a algún lugar costoso. Me pondré tacones altos.

— No, comeremos en casa. Pediré comida a domicilio de un restaurante que encontré. No conozco a esa persona que traerá tu hermano, pero no quiero darle la oportunidad de que critique mi cocina.

— Si la tía va a venir también, será en vano. Sabes que ella critica hasta la forma en que uno respira... Aun no entiendo por qué te volviste a amistar con ella, es tan pesada.

— La familia es la familia, aunque no te agrade tienes que hallar la forma de soportarla. Encima ella es mi única familia, no puedo ser muy selectiva.

— Mmm... pues papá y yo estábamos muy felices al no saber nada de ella.

— Si no te agrada, solo responde por cortesía y luego ignorala.

— Eso pensaba hacer. Me sentaré a lado de los abuelos... ojalá traigan muchos dulces artesanales, como el año pasado.

— Tus abuelos no van a venir hoy. Están muy viejos y no les asienta bien el frío. Además, tengo una misión muy importante para ti estos días.

— ¿Misión?

— Esa muchacha que va traer tu hermano. Quiero que la analices de pies a cabeza. Sácale toda la información que puedas. Pero no seas tan obvia.

— ¿Qué? ¿Y cómo se supone que voy a hacer eso?

— Tiene más o menos tu edad, ¿no? Entre las mujeres es fácil socializar. Deben tener algo en común, Aférrate a eso hasta ganar su confianza y verás lo fácil que es, que te cuente demás.

— Creo que ella no tiene mi edad, ni está cerca... –dijo con voz dudosa Sua, saliendo del cambiador−. Mamá, no me des esa misión...

Sua se sentó en el banquillo frente al tocador, mientras su madre se acercaba y le empezaba a peinar y pasar el secador para peinado.