Las Hermanas De CRUEL

Capítulo 5

(Isabelle)

Me despierto en una cama. Creería que estoy en la cabaña de los Docs ya que tengo una venda en la cabeza. Muevo la cabeza inspeccionando la habitación y me encuentro a Thomas tumbado en una silla a un lado de la cama.

Me levanto despacio para no despertar a mi hermano. Observo el Claro a través de la rendija de una de las ventanas tapiadas. Parece que los habitantes están reconstruyendo parte de las edificaciones, que hoy se ven peores que ayer.

- ¿Te sientes mejor?- pregunta Thomas a mi espalda.

- Si- respondo tajante sin darme la vuelta todavía.

- ¿Hice algo malo para que me trates así?- pregunta.

- ¿Así como?- respondo indiferente.

- Cortante- contesta mientras me doy vuelta y me acerco.

- Mmm... a ver... ¡Si ya me acuerdo! Venir al laberinto- respondo y acto seguido le doy una cachetada- ¿¡POR QUÉ NO ME DIJISTE QUE ESTABA PLANEADO!? IDIOTA- grito dolida y enojada a la vez.

- Primero que nada AUCH- dice frotándose la mejilla- segundo, ¿que tiene que ver que yo haya venido al laberinto con que tú estés enojada conmigo?

- ¿¡Por qué mierda les borran los recuerdos!?- exclamo frustrada- Thomas, ¿te resulto familiar?- pregunto sin esperanzas.

- Si, a veces apareces en mis sueños junto con la chica que llego inconsciente y otra más- responde.

- ¿Cómo es esa otra chica?- interrogo.

- Es alta, tiene cabello castaño casi pelirrojo, ojos verdes y siempre viste vestidos con zapatos- me describe a la chica.

- Katherine- digo.

- ¿Quién?- pregunta Thomas.

- Mejor siéntate- le digo y el obedece- Thomas, soy tu hermana- digo y abre los ojos como platos- y esa chica que acabas de describir es Katherine, mi melliza, por lo cual también tu hermana- no reacciona solo se queda ahí mirándome fijamente- ¿no dirás nada?

- ¡Izzy! ¡Hermanita!- me abraza y yo le correspondo.

- ¿Me recuerdas?- pregunto.

- No del todo, pero si recuerdo que eres mi hermana- me dice.

- ¿Izzy te sie...? Perdón, ¿interrumpo algo?- pregunta Newt entrando al cuarto.

- No, tranquilo- me río.

- Imagino que ese abrazo se debe a que le contaste que eres su hermana, ¿no?- pregunta arqueando una ceja.