Epílogo

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——¡acepto!

Los aplausos estallan, Mada me toma del rosario y une nuestros labios en un  tierno beso.

Soy tan feliz hoy después de casi tres años de retomar la relación, Madara y yo alfin somos lo que siempre soñamos. Marido y mujer.

Itachi abraza Konan quien aplaude feliz por mi. Luce tan linda con su pancita de embarazo, después de casi cuatro años de matrimonio al fin pudo lograr quedar embarazada. Fugaku y Mikoto quienes también nos acompañan en este día espacial están muy felices de convertirse en abuelos. Después de que Madara y yo decidimos seguir con la relación ambos nos han apoyado mucho.

Tayuya carga a mi pequeña Yura, solo tiene 7meses de nacida. Es tan hermosa es idéntica a Madara aunque sus ojos son iguales a los míos el la adora dice que es su pequeña princesa.

A su lado de pie se encuentra mi pequeño hombrecito. Sasha de dos años y medio igual de guapo que Mada. Él sin duda llegó a dar lo que necesitábamos Madara y yo para complementar la relación. Aún recuerdo el día que supe que nos convertiríamos en padres por primera vez, ambos lloramos de alegría. El fue mi ancla pero en los pequeños momentos difíciles del embarazo. Estuvo cada mañana para sostener mi cabello mientras yo desechaba la bilis por el escusado. Estuvo ahí cumpliendo cada antojo, unos más extraños que otros y también aguantando como el hombre compresivo que es cada cambio de humor. De igual manera en el embarazo de Yura.

Y hoy, felices por qué al fin estamos casados. Cómo no recordar la manera tan poco inusual con la que me propuso matrimonio. Una noche, después de terminar cansados y satisfechos después de haber echo el amor. Sin más soltó, "¿Quieres casarte conmigo, Saku?".
Solté una risita, creí que estaba jugando pero no era así, enserio me estaba proponiendo matrimonio. Le abracé y bese, una ves más llore de felicidad.

Ahora enos aquí... Cumpliendo un sueño más.

—— ¡Saku!

Es Tayuya quién me saca de mi mar de recuerdos.

—— lo siento estaba perdida...
¡Ven cariño!.—tomo a mi pequeña Yura y ella ríe mostrándome su sonrisa desdentada—.

—— si lo noté... Te decía que es hora de la fiesta vamos.

Me toma de la mano y caminamos hacia la playa.

Mi relación con Tayuya siguió siendo mejor con el paso de los años, ambas somos como un par de amigas soy su confidente. Adora a sus hermanos y ellos a ella. Supe que hace días Mei y Hidan decidieron dar se otra oportunidad. Por lo visto su amor siguió siendo más fuerte apesar de los años y las circunstancias.

La fiesta es en la playa. Justo a unos metros de nuestra casa.
La casa que Madara diseño y construyó para él, para mis hijos y para mí. Hermosa como la que siempre soñé de niña y con una gran familia. Mi familia...

—— ¿Me consederia este baile, señora Uchiha?.

—— sería un placer...

Konan toma a la pequeña Yura y Madara me lleva a la pista. Llevo mis brazos a su cuello y el me toma de la cintura, ambos nos mesemos al ritmo de la melodía.
Nos besamos y décimos cuento nos amamos mientras continuamos bailando. Madara me hace girar y siento que vivió en una película de fantasía. Me abraza y una melodía más comienza.
Tayuya se acerca y le dejo bailar con su padre. Tomo a mi pequeño Sasha y rie a carcajadas mientras bailo con él. Konan se acerca y le entrega a Yura a Madara. Madara, Yura y Tayuya bailan, mientras Sasha y yo continuamos.

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