Después de correr por diez mundos, ya no pude huir

82. Alke I

Capítulo 82
Alke
Parte 1

    ¿Huo Wuling había salido realmente del reino ilusorio?

    Al ver al hombre de pelo negro que había salido de la formación, una mirada de sorpresa apareció en el rostro de Ji Ning, que en ese momento miró hacia él y éste le devolvió la mirada, sonriéndole débilmente.

    Su pelo negro estaba como sumergido en la noche, sus labios eran tan rojos como si estuvieran pintados con sangre, y su piel era pálida, pareciendo aún más demoníaca y llena de inhumanidad frente a los innumerables fantasmas horribles que lo rodeaban.

Ji Ning descubrió de repente que su cuerpo originalmente translúcido se había vuelto extraordinariamente sólido, y la ilusión detrás de él se había paralizado por completo. Había manchas de sangre por todas partes, cadáveres por doquier y fantasmas que aún yacían sobre los miembros cortados: Estos entes royeron carne y sangre, antes de salir volando de la formación ilusoria con un gesto insaciable y silbando hacia Fu Qinghan un momento después.

¿Podría ser que manipuló a los fantasmas para comer personas en todas partes dentro de la ilusión, y luego recuperó su fuerza...?

    La expresión de Ji Ning era algo indescriptible. La formación de ilusión contenía una gran cantidad de energía espiritual que podía alimentar el alma, y aunque no sabía por qué Huo Wuling no había caído en el reino de la ilusión, era básicamente cierto que la formación de ilusión se había convertido en cambio en una oportunidad para recuperar su poder.

    Un gran número de fantasmas voló hacia Fu Qinghan, pero éste estaba protegido por una clara y refrescante aura espiritual, así que antes de que pudieran acercarse a él, gritaron y se fundieron, sin poder hacerle ningún daño.

    Cuando Fu Qinghan lo vio salir, sus ojos se sorprendieron un poco, pero su cara estaba tan tranquila como el agua; no hizo ningún movimiento asesino, sólo extendió la mano y apuntó a la formación de ilusión, el espejismo blanco parecido a la niebla se extendió una vez más y envolvió el cuerpo de Huo Wuling.

    Los labios de Huo Wuling se curvaron ligeramente y al momento siguiente su cuerpo se rompió como un espejo, y cuando reapareció, ya estaba de pie muy por detrás de Fu Qinghan.

    En su mano apareció una biblia, cuyas páginas pasaron rápidamente, y el poder maligno de manipular fantasmas se transformó instantáneamente en un poder puro y sagrado, mientras dos ángeles, uno masculino y otro femenino, aparecieron bañados en luz sagrada; un sinnúmero de plumas blancas como la nieve cayeron como una ráfaga.

    Estas plumas no tenían ningún poder mortífero, pero eran tantas que se amontonaban alrededor de los pies de Fu Qinghan y Ji Ning en un abrir y cerrar de ojos.

    No había cielo ni tierra en el Reino de la Cueva, y el lugar bajo sus pies era sólo un espacio vacío sin luz, pero ahora, bajo la luz sagrada del Ángel Santo, la sombra negra de Ji Ning se reflejaba en esas plumas blancas.

    En ese momento, Ji Ning sintió repentinamente que una temperatura escalofriante se acercaba a él, y su cuerpo fue envuelto por un par de manos en la espalda, y en un abrir y cerrar de ojos, penetraron en su cuerpo, sacando poco a poco su alma.

    "Tu alma es mía".

    Huo Wuling salió de la sombra de Ji Ning y abrazó su alma por detrás, sonriéndole al oído mientras hablaba, tal como había dicho antes, se llevaría el alma de Ji Ning a otro mundo.

    Sin embargo, en ese mismo momento, una luz fría como el filo de un asesino lo golpeó de repente, atravesando súbitamente el pecho de Huo Wuling.