Capítulo 1: Fermata.

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La familia Vinsmoke, dueña de la farmacéutica Germa 66, era una de las más adineradas de la ciudad. Todos sus hijos eran perfectos según su padre, los varones se quedarían con el negocio familiar mientras que, su hija Reiju, se había ido al extranjero a estudiar derecho, para ayudar en caso de tener problemas legales.

Solo había una excepción en su auto proclamada perfección, Sanji, quien desde temprana infancia aseguraba ser un niño a pesar de haber sido asignado como niña al nacer. Su madre lo amaba tal y como era.

Ya que ni el pequeño ni la madre cedían ante su afirmación de género, Judge, su padre, aceptó brindarle el tratamiento hormonal necesario y cambiar legalmente su acta de nacimiento, con la condición de que nunca se dijera nada al respecto, ya que lo consideraba una vergüenza.

Por sospechosas razones, Sora enfermo, dejando el cuidado de sus hijos a Judge, quien aprovechó para educarlos suprimiendo sus emociones, convirtiéndolos así en máquinas desalmadas, perfectos para los negocios. El único problema en su plan, fue una vez más Sanji. El niño era la persona más amorosa y compasiva entre todos, tal como su hermosa madre.

Usando de pretexto el típico "si eres un hombre, comportarte como tal" su padre, lo sometió a años de maltrato por parte de el y sus hermanos, excusándose en qué los hombres no lloran, los hombres esto y aquello, haciendo que el pobre niño se fuese moldeando en una conducta de hombre reprimido, buscando siempre demostrar su masculinidad. Conducta que se agravio al paso de los años, llegando a la edad de 19.

                                                                    [ .... ]

Los eventos sociales eran obligatorios; mantener las apariencias era una de las mayores prioridades de Judge. Pero Sanji los odiaba. Estar rodeado de gente falsa era abrumador, y ya que su única forma de ser incluido era ser la burla de sus hermanos, prefería escaparse con el pretexto de salir a fumar.

Cierta noche, se dio uno de estos eventos. Todo iba como de costumbre, personas fingiendo disfrutar, ahogándose en alcohol mientras hablaban de sus "maravillosas" vidas llenas de frivolidades y estupideces que a el chico para nada interesaban. Cómo siempre, sus hermanos estaban siendo los mayores idiotas del lugar, por lo que decidió aprovechar para escapar usando la misma excusa de siempre.

Había iniciado su discreta huida cuando fue tomado bruscamente por el cuello de la camisa por Ichiji.

-Directo a fumar pedazo de basura, no hagas nada más, podrás ser una falla, pero aún llevas el apellido Vinsmoke, ni se te ocurra ponernos en vergüenza-

Dijo fingiendo acomodar la corbata del menor.

-Ya lo se idiota, déjame en paz-

Respondió débilmente.

-Bien, ahora lárgate-

        -Bien, ahora lárgate-

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