Hoy sería un día tranquilo, al menos ese es el primer pensamiento que Meredith tuvo al levantarse. Ya saldría de ese lúgubre lugar que la vio crecer, y aunque lastimosamente nunca fue adoptada, hoy por fin comenzaría su vida. Excepto por un detalle.
—Hoy es tu cumpleaños querida Mery. ¿Te irás?—dice la monja a la chica de cabello castaño.
—Si, pero...no tengo a donde ir—dice con aflicción.
La monja la observa con expresión triste que cambia por una sonrisa de labios cerrados.
—Espera un momento.—busca en uno de sus bolsillos— Ten, aquí están unos papeles que dejó el chico que te abandonó en el orfanato, dijo que cuando cumplieras 18 debías ir ahí.—Pero...—hay evidente confusión en su rostro— ¿Por qué decirme ahora?
—Porque ya es el momento para eso. Espero que estés mucho mejor ahí. Tal vez tuvieron problemas económicos y por esto te abandonaron.
—Entiendo, conoceré a mi familia por fin.—dijo con entusiasmo en su rostro.
—Debes cuidarte mi niña, y recuerda que aquí tienes a otra familia.— convida la monja. Sus ojos se cristalizaron.
—Gracias madre superiora— la envolvió en un abrazo— Vendré a verla cuando pueda.
—Más te vale, bueno, ven, te acompaño a la salida.
Después de recogerlo todo la monja acompañó a la chica a la parada del autobús indicándole el camino a su nuevo hogar.
—Buen viaje mi niña. Es en la última parada del autobús que debes bajarte.— le recuerda.
—Claro, gracias por todo— Sonrió y agitó su mano para despedirse.
Subió al autobús.Durante todo el recorrido se dedicó a observar el paisaje por la ventana, era muy hermoso el pueblo que la vio crecer. Black Ville es una pequeña ciudad tranquila, donde todos se conocen y se encuentra rodeada de bosque. Los ancianos de la iglesia solían decir que ese bosque estaba encantado o embrujado; por supuesto Meredith nunca ha creído esas paparruchadas.
El camino se hacía largo y cada vez quedaban menos personas en el autobús –y en la calle– conforme se acercaban al bosque. Se podían apreciar los abundantes colores verde del paisaje.
—¿ Señorita? ¿Dónde se quedará usted?— pregunta el anciano al lado de la joven.
—Aún falta creo, es en la última parada.— le respondió con tranquilidad.
—¿A dónde va por esos lugares? Es un bosque muy peligroso jovencita.
— A la casa de mi familia, viven en el bosque. Y hace tiempo no los veo.—sus ojos se cristalizaron y su voz se quebró— Y...y los extraño demasiado.
—Pero tenga cuidado, ahí suelen haber vampiros.— la joven lo miró como si en su rostro hubieran surgido cuernos.
—¿Qué dice?— pregunta la joven sorprendida.
—Si, esos seres del demonio mataron a mi hijo hace ya algunos años.— explica el señor— Se alimentaron de él, son seres peligrosos.—su expresión es de horror— El hombre que lo asesinó era de estatura alta, pelo negro azabache, y unos ojos demoníacos. Color rojo y negro. Era terrorífico.
—Pero señor...
—Aquí me bajo. Usted tenga cuidado, y procure llegar antes de que sea de noche.
Meredith se quedó pensando sobre esa conversación. Era raro ese señor.
¿A caso la madre superiora sabía?
¿Sería capaz de mandarla a un sitio lleno de vampiros?
—Solo le estoy dando demasiadas vueltas.— sonrió y continuó observando el paisaje.
Comienzo con la edición de la historia.
Espero que les guste, le voy a cambiar algunas cosas de la historia pero aún así será la misma trama. Si les gusta voten por favor y hagan llegar a más personas está historia.
Me tomo la molestia de editarla porque es la mejor historia que he escrito.
Portada hecha por KimJooniesDimple. Muchas gracias linda, está hermosaaaa. Gracias por la nueva portada.
⚠️ ADVERTENCIAS ⚠️
Esta historia contiene escenas de contenido explícito, lenguaje vulgar y violencia.
Si no les gusta ese tipo de contenido no lean y evitemos comentarios groseros.
Disfruten la historia y gracias por leer.
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Adicto a tu piel ©(+21)[OT7]✓ ᴱᴰᴵᵀᴬᴺᴰᴼ
VampireCasttle es sinónimo de perfección y de perdición. Ellos eran perfectos, si lo sabría Meredith bien, tienen esa ley que hace atraerte a su cuerpo. ¿Será su mirada? Para Meredith, Casttle significa sumisión. ¿Qué rayos era eso que tanto la hacía obed...