Lena POV.
Creer que todo siempre estará bien, y que no tendrás tropiezos en el camino, es el primer paso hacía el fracaso. Aunque debí suponerlo, era obvio que algo cómo esto sucedería eventualmente. Pero era optimista, y me quería negar lo más posible a esa posibilidad.
El primer año lejos de nuestras familias, fue muy duro. Bueno, en su gran mayoría. Sobre todo para Kara, finalmente ella no hace mucho tiempo había perdido inesperadamente a su padre Jonathan, y algunos meses después, su vida cambió de nuevo, cuándo se fue de su casa para ir a la universidad junto conmigo. Fueron largas noches con su rostro lleno de tristeza por su familia, por su hermano, por su madre, que estaban lejos ahora, y por Jonathan, que ya no estaba en este mundo, y aunque ella no me lo decía para no preocuparme, sé que todos estos cambios y su más reciente pérdida, no hacen más que recordarle a Krypton y todo lo que dejó atrás cuándo huía de su planeta. Finalmente, eso dejó una herida profunda en ella, y aunque fue hace unos años, las cicatrices siempre están ahí para recordarnos nuestro pasado. Y en las noches más oscuras, he sido testigo del relato de lo más extraordinario de su planeta, y de todo lo que solían ser. Y a pesar de que yo no viví ninguna de esas cosas, siento en el alma la pérdida de un pueblo tan maravilloso cómo lo era Krypton. Y me duele aún más escuchar cómo ella habla de la pérdida en el recuerdo, no queriendo dejar morir lo que solía ser su hogar. Yo tomo nota de todo lo que me dice, porque sé cuán importante es para ella, y también tomaré parte en recordarlos, porque cómo pareja que somos, tomamos todo de la otra, así cómo me enseñó Kara, y quiero vivir cada día esas palabras junto a ella. Y cuándo el pesar ha dejado su mente, y ella entra en calma, la tomo entre mis brazos y nos fundimos en un abrazo interminable, sintiéndonos cerca, siendo conscientes de que no estamos solas. He tratado con todo lo que soy por hacerle saber que no está sola y creo que lo he logrado, al menos la mayor parte del tiempo, y eso me motiva a seguir intentándolo día tras día.
Aunque también hay veces en que al igual que ella, extraño a mi madre y hermano, y a pesar que me acostumbré a su lejanía por mi tiempo en el internado, obviamente eso no hace más fácil la falta de ellos, pero al menos la hace un poco más llevadera. Y ahora, en diferencia a la época del internado, estoy con mi novia. Mi Kara. Su sonrisa brillante apenas se despierta abrazada a mí, siendo tan cálida a mi lado, y nuestros ojos mirándose fijamente mientras se recuerdan, era el mejor momento del día. Bueno, hasta que volvíamos a vernos después de clases y nuestros cuerpos se hacían cargo de la situación, saciando el deseo entre ambas, llevando al límite nuestra pasión, dejándonos jadeantes de amor en nuestra cama, amaba ambos momentos del día, porque los vivía con ella.
Cómo desearía que siguiéramos así, tal cuál nuestro primer tiempo aquí, pero no es así. Y me duele pensar en nuestros buenos tiempos, y saber que estos están en el pasado.
Y hoy hace una semana, ni siquiera podíamos hablar por más de un minuto, cuándo la otra estaba abandonando la habitación que compartimos o dónde sea que nos encontráramos al momento de discutir. Me frustraba no poder arreglar las cosas, más cuándo no sabía que tenía que hacerlo. Pero cuándo le preguntaba a Kara que le molestaba, para tratar de solucionar lo que sea que estuviera mal, ella sólo bufaba irritada y se iba o me salía con esas malditas palabras. - No me pasa nada.- Cómo odio esas malditas palabras, y parece ser que Kara amaba decírmelas. Lex me aconsejó que hablará con ella y que pusiéramos en orden nuestra relación y he tratado con todo lo que se me ocurre para seguir su consejo, pero no pasa nada, no está funcionando y no se está arreglando nada entre nosotras, y siento que me estoy perdiendo de algo muy importante en todo esto, y no tengo la menor idea de qué es, pero Kara lo sabe. Incluso intenté con su amigo, Cossimo, llamándolo hasta Dublín, dónde estudiaba ahora, y él me dijo que eso era un problema de pareja y que cómo tal, deberíamos solucionarlo. Por más que intenté con él, fue imposible sacarle alguna información. Y cada día que pasaba se volvía peor, aunque seguimos compartiendo habitación, apenas y nos encontramos, si es que llegamos a hacerlo a lo largo del día. Kara, siempre tiene un trabajo que hacer o algo que estudiar en algún lugar del campus que no sea en nuestro cuarto. Mi último recurso fue pedirle consejo a Camille, poniendo en peligro mi integridad física, que gracias a Dios fue salvada por el novio de ella, Ralph Clayton, un chico alto y fornido, de unos ojos grises que me recuerdan las nubes de tormenta, de piel blanca tostada por el sol, que le pidió que fuera paciente conmigo, gracias a Dios que era compañera de facultad con él, y que se apiadó de mí, porque entre ellos dos me acabarían sin esfuerzo. Pero Camille estaba del lado de Kara, obviamente, y diciéndome qué me gané está situación, y la reacción de Kara hacía mí, y luego se giró y se fue, dejándome ahí de pie sola, cómo una estúpida. Y quedé en las mismas que antes de hablarle a ella, y sin saber qué hacer con Kara, mierda.
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Colors
FanfictionKrypton se ha ido para siempre. Kara Zor-El, pensó que ese era el final de su historia, y de la vida cómo la conocía. Con su pequeño primo y en un planeta nuevo que descubrir, Kara entenderá que lo que les sucedió, sólo era el comienzo de la aventu...