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Habían transcurrido los días desde aquel incidente, y para mala suerte, no pudieron verse por dos semanas enteras ni siquiera para los ensayos debido a diversas circunstancias.

La primera circunstancia fue que Shoto realmente estaba saturado con el trabajo, ya que ahora que tenía un horario fijo ya tenía muchas más responsabilidades y en diferentes puntos del trabajo lo que lo dejaba bastante agotado y pidió que le dieran una semana para descansar bien y no entorpecer los ensayos, cosa que aceptaron los chicos sin chistar.

Y la segunda circunstancia fue que Kaminari se enfermó "misteriosamente" después del concierto y la fiesta de Jiro. Decía tener el cuerpo cortado, temperatura y parecía que tenía gripe, aunque realmente si hablabas con él durante su semana de enfermo se escuchaba bastante bien; de igual forma no tuvieron ensayos por esa semana porque el guitarrista no quería contagiar a sus compañeros de banda.

Así que más o menos después de otra semana perdida, nos encontramos en un jueves a mediados del mes de Agosto. La organizadora del concurso les comentó que ahora tendrían que ensayar también en el recinto dónde se llevaría acabo la respectiva competencia; todos habían tenido que organizarse entre las bandas para que tuvieran un horario justo entre todos.

A los chicos les terminó dando por igual, escogiendo los días jueves de tres de la tarde a ocho de la noche para ensayar puesto que los fines de semana y viernes ya estaban ocupados gracias a que fueron contactando a los concursantes de quienes se listaron al principio y quienes al final. De igual forma les quedaba bastante bien ese horario para cuando los guitarristas entraran a la universidad, ya que no intervendrían en sus clases.

Bakugo había llevado a sus amigos de la preparatoria al recinto por ser el único que tenía auto, dejando las guitarras y un amplificador en la cajuela mientras que las baquetas, las pedaleras y el otro amplificador estaban en los asientos de atrás con el rubio de mechón neutral cuidándolos mientras que el pelirrojo estaba en el copiloto.

El bicolor llegaría por su cuenta, él dijo.

Llegaron al lugar y los tres amigos abrieron su boca de la sorpresa, no conocían el lugar pero por fuera se veía bastante grande. ¿Cuál sería la capacidad? ¿Dos mil personas probablemente? Sea cual sea la cantidad, los adolescentes se sintieron nerviosos ya que de por sí estaban nerviosos por tocar frente a sus amigos, ¿cómo estarían con siquiera unas treinta personas desconocidas?

Sin más que decir, todos bajaron del auto y tomaron sus respectivas cosas para ingresar al recinto por la puerta principal. Debido a la gran carga, el rubio cenizo ayudó con sus pedaleras a sus amigos mientras se colgaba el estuche de las baquetas en su espalda, mismo estuche que cierto bicolor le había regalado hace tiempo; gracias a la nostalgia volteó su rostro en busca de algún coche plateado o la nueva motocicleta del de orbes heterocromáticas, pero nada.

—Hey, Bakugo. —habló el de orbes doradas ya enfrente de la puerta principal. —¿Vienes? Tenemos que hacer el registro todos.

—Por supuesto. —dijo con notorio desánimo.

—¿No deberíamos esperar a Todoroki? —preguntó el pelirrojo, siendo ingenuo ante la situación de la pareja. —Por cierto, ¿por qué no vino con nosotros? —miró al ojirubí.

—Tuvo cosas que hacer. —mintió. —Y él se puede registrar solo, sirve que dejamos todo instalado en cuanto llegue.

Lo cierto es que nadie sabía de la situación de la pareja más que unos pocos, pero en esos pocos no estaban incluidos los guitarristas. El rubio cenizo no quería decirles nada porque tenía la esperanza de arreglarse con el de cicatriz además de que tenían que mantenerse bien por la banda; y bueno, Todoroki no se llevaba tanto con Kirishima como para contarle a diferencia de Denki, aunque tampoco quería decirle a este último por lo mismo de la banda.

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