GLASS {JJK & KTH}

Capítulo 16

-¿Y esta pibita?-Preguntó el más alto de los chicos al llegar a la cocina y verme.

-Buenos días, Lucas.-Dijo Sunwoo.-Se llama Amber.

-¡Uy! ¡Hoy se folla, mis pibes!

-¿Eres idiota?-Añadió el chico cuyo nombre intuía que sería Jay.-Jungkook dijo que si la molestábamos, nos mataría.

-Moriría feliz.

-Te va a meter una paliza.

-Y yo le ayudo.-Añadió Sunwoo.

-¿Qué pasa aquí?-Preguntó el criminal entrando en la cocina.

-¿Traes a una chica y no nos dices nada?-Continuó Lucas.

-Esta no es un juguete, no puedes tocarla.

-Ay, ¡no, eh!

Jungkook me observó, pero yo estaba embobada básicamente mirando a la nada pero pensando en miles de maneras en las que pudiera escapar de ahí.

-¿Has desayunado?-Preguntó el mayor.

-No.-Respondí.

-Oliver, ¿podrías servirle algo de comida?

-No tengo hambre.

-Debes comer algo, no has tomado nada desde ayer.

-Sí, desde que quisiste secuestrarme... Otra vez más.

-Esta tía está traumatizada.-Dijo Lucas con la boca llena de cereales.

-¿De dónde ha salido?-Preguntó Jay.

-Estaba en la casa de los Kim.-Añadió Jungkook.-No podía dejarla allí, podría meterme en un lío.

-Taehyung tiene buenos gustos.-Siguió baboseando Lucas.

-Eres asqueroso.

-¿Has matado a toda la familia?

-Sí.

-¿Y por qué no la has matado a ella también?

-¿Y por qué no te mato a ti, mejor?-Replicó Jungkook tirando su bol de cereales al suelo y saliendo de la cocina.

-¡Mi comida!

-¿Estás bien?-Preguntó Jay, por algún motivo, mirando a Sunwoo.

-Sí, estoy bien...-Respondió el chico, que se acercó a mí y me dio un abrazo segundos después de decir eso.-Vamos a llevarnos bien, ¿verdad?

No respondí, solamente pude escapar rápidamente de sus brazos y correr hacia mi habitación, dejando a los chicos perplejos.

-Nunca fuiste muy bueno con las chicas.-Escuché que Lucas decía segundos antes de cerrar la puerta.

Me tiré a la cama y rompí en un gran llanto. Quería volver a la que fue mi casa por unas semanas, quería volver a reír con Garnet, quería discutir con Jasper de nuevo, quería jugar con Amatista y quería estar entre los brazos de Taehyung de nuevo. Ese sitio no era para mí, yo no pertenecía a un lugar como aquel lo era y jamás lo haría.

-¿Qué ocurre?-Preguntó Jungkook entrando en la habitación.

-¡Déjame en paz!-Grité.

-¿Por qué?

-¡Quiero que me devuelvas todo lo que me has quitado! ¡Eres un puto monstruo!

-Amber, soy esclavo de mis impulsos. Si pudiera volver al pasado y cambiar todas y cada una de mis acciones, lo haría.

-¡Has matado a personas inocentes que nunca te han hecho nada malo!

-¿¡Qué sabrás tú de eso!? ¿¡Qué sabrás tú de todo lo que él me ha robado!? ¿¡Qué sabrás de todo el sufrimiento con el que he tenido que cargar todos esos años!? ¿¡Qué cojones sabrás!?

-¡Taehyung siempre me ha dicho que todo ha sido por culpa de tu impulsividad y agresividad!

-¿¡Quieres que te mate a ti también para que vayas a junto de su alma a preguntarle sobre Jolene, Amber!? ¡Dime! ¿¡Quieres!? ¡Porque estoy seguro de que ahí empezaría a confesar la verdad!

-Él me dijo que ella era una amiga suya.

-Sí, claro.-Dijo evitando que unas lágrimas cayeran por su rostro.-Una puta amiga.

El criminal salió de mi habitación dando un portazo y mi cuerpo empezó a temblar por su reacción. Taehyung me había hablado de Jolene, él dijo que era una simple amiga.

-Taehyung.-Le llamé levantando mi cuerpo lentamente de la cama.-Entonces, ¿Jolene era una amiga tuya?

-Buenos días.-Dijo besando mi frente.-Sí, cielo, era mi amiga.

-¿Podrías hablarme un poco sobre ella?

-¿Celos?-Preguntó con una pequeña risa.

-No, curiosidad.

-Bien...-Empezó a hablar tumbándose a mi lado y clavando su mirada en el techo.-Ella era dos años más joven que yo, su pelo era largo y con un tono castaño muy bonito, su cuerpo era perfecto... Probablemente sus caderas fueran lo que más llamaba la atención de ella junto a su piel bronceada y el brillo de sus ojos. Le gustaba tener a todo hombre comiendo de su mano y todos ellos estaban encantados de tratarla como la dama que era y, también, solía hablarle a la luna cada noche sin importarle si alguien la veía y pensara que estaba loca.

-Suena a una mujer increíble.

-Lo era...-Sonrió de lado todavía con la mirada perdida en el techo.-Recuerdo una vez en la que pasé cerca de su casa y la vi colocando un jarrón de agua en su jardín. Le pregunté que por qué hacía eso y ella simplemente señaló a la luna y dijo "esta noche hay luna llena y debo aprovechar esta energía, no hay nada más bonito que el poder de la luna cuando más lo necesitas".

-Sí que estaba enamorada de la luna.

-¿Sabes una cosa? Ella me recuerda mucho a ti.

-¿Por qué lo dices?

-Tenéis un carácter muy similar y tú también le hablas a la luna cuando estás preocupada.

-¿Cómo sabes eso?

-En las noches en las que me asomaba por la ventana para fumar, te veía en los columpios hablando sola mientras la mirabas. La verdad es que a las dos os sienta muy bien la luz de la luna, estáis preciosas bajo ella.

-¿¡Me estabas espiando!?

-Estamos en la misma casa, tonta.

-Cuéntame más de ella.

-Otro día, ahora mismo tengo ganas de molestarte un poco.

Una vez dijo eso, se tiró encima mía y empezó a hacerme cosquillas. No dejaba de reír y trataba de escapar de su agarre dándole patadas, siendo feliz con tan poco. Me sentía llena aún estando vacía.

Le necesitaba de vuelta, me negaba a aceptar que él ya no estaría conmigo nunca más. Quería tener la oportunidad de abrazarle, una vez más, solo una, por favor.

Me acerqué a la mesita de noche y cogí un bloc de notas que se encontraba encima junto a un bolígrafo y, sin pensarlo más, empecé a escribir.

12 de julio.

Cada vez que me viene tu recuerdo a la mente, rompo a llorar. Espero que puedas escucharme estés en dónde estés. Te necesito más que nunca a pesar de que lo nuestro fuera una simple historia breve, a pesar de que existieran complicaciones...

No me importa, solamente me importa tenerte aquí y mantener un pensamiento ficticio de que algún día volveré a verte.