Hospital

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— Hola — dijo mirándome aliviada

— ¿Qué pasó? — pregunté confundida

— Te ahogaste en la alberca de tu casa Jennifer... Milia y yo te vimos y te sacamos de ahí... Mientras Milia marcaba a una ambulancia yo te estaba dando RCP para poder hacer que reaccionaras y lo hiciste pero después te desmayaste.

— Al parecer no funcionó — contesté

— ¿Qué dices? — dijo sorprendida — ¿Tú querías morir ahí?

— Algún día vamos a morir Alondra, que mejor que sea pronto...

— ¿Pero tú estás loca?

— Como tú misma lo dijiste, ya no tengo nada porque vivir

*En ese momento llega el doctor a la habitación*

— Buenos días Jennifer ¿Cómo te sientes?

— Bien, con un poco de dolor de cabeza pero bien...

— Jennifer, tengo que hacerte unas pregunta... Te hicimos un examen y ahí salieron varias cosas que me tienen algo angustiado

— ¿Cómo cuales doctor? — preguntó Alondra angustiada

— ¿Jennifer usted ha sido abusada sexualmente?

*Mire a Alondra*

— No doctor, para nada — contesté

— Jennifer, ¿Usted a ingerido sustancias como la cocaína o marihuana?

— Para nada doctor...

— Ya veo...

—¿Otra cosa? — pregunté

— ¿Por qué me está mintiendo?

— No son mentira... Le estoy diciendo la verdad, solo quiero saber cuándo me podré ir de aquí.

— Está noche la daremos de alta... Ya está fuera de peligro

— Excelente...

*El doctor se fue*

Unos segundos después Alondra me miró sorprendida y se puso enfrente de mi 

— ¿Te has estado drogando? — preguntó sorprendida

— Eso tú ya lo sabías, te lo dije el otro día

— Sí, pero pensé que estabas hablando sin sentido en esa parte... No puedo creer que lo estés haciendo Jennifer

— Fue la única solución que encontré...

*Alondra comenzó a llorar*

— ¿Qué pasa?...

— Me duele tanto verte así — dijo con la voz cortada — Con esos ánimos de ya no estar aquí... Ya te diste por vencida Jennifer y, y tengo miedo de que vuelvas a intentarlo. Ya no se cómo ayudarte, no se que hacer...

— Imagínate como estoy yo... Estoy aterrada de volver a mi casa y soportar lo que me pueda decir Steve por esto tontería que no salió bien. Estaré durmiendo intranquila todas las noches rezando para que el imbécil no entre a mi recamara y me viole como siempre lo hace cuando mis papás se van de viaje... Lo único que quería era apagarlo, apagar los recuerdos, las caricias... Todo.

— Déjame ayudarte ¿Si? No puedo hacer nada si no me dejas.

— Esto no puede tener una solución porque no la hay.

*Entran las enfermeras*

— Señorita debe salir — dijo una de ellas

Alondra asintió, se limpio las lágrimas y se fue de la habitación.

ALONDRA

Me recargue en la puerta de la habitación de Jennifer... No se cómo ayudarla. ¿Cómo puedo ayudar a alguien que no quiere ser ayudado? — me pregunté a mi misma. Estoy en ceros.

Me fui a la sala de espera para poder hablar con el doctor que atendió a Jennifer y que me diga su caso real. Porque aunque ella le mintió él sabe que todo es real.

— Doctor Wheeler, mucho gusto soy Alondra la amiga de la señorita Jennifer Stone.

— Ah si, ¿En qué le puedo servir?

— Doctor, necesito que me diga el estado real de Jennifer ¿Se pondrá  bien verdad?

— Señorita, usted sabe lo que le está pasando a su amiga... Ella tiene varias heridas en su zona íntima, sin duda es notorio que alguien está abusando de ella... Y con lo de las sustancias afortunadamente no se han vuelto muy frecuentes en que han sifo ingeridas pero si no deja de hacerlo podría pasar cosas peores.

— Lo se doctor y créame que estoy igual de preocupada...

— Le mandé unas instrucciones con la enfermera, con eso espero que el dolor que ella siente en el vientre se termine por el momento — lo llamaron por las bocinas — Me tengo que ir... Cualquiera cosa avíseme por favor — dijo el doctor Wheeler

Me estoy quedando pensado que es lo que voy a hacer con Jennifer, ella está totalmente rendida. Se que cuando ella está así no hay manera de hacerla reaccionar.

*Volví a su habitación*

— ¿Está todo bien? — preguntó mirándome

— Sí, solo que hable con el doctor y me explico algunas cosas de tu caso. Por la noche regresaras a tu casa.

—¿Y la empresa?

— No te preocupes, yo me estoy haciendo cargo de todo

(.........)

Pasaron algunas horas. Llegó el momento de irnos de este lugar así que ayude a Jennifer a levantarse ya que tiene puesto un pans y la senté en la silla de ruedas.

— Señorita Alondra, afuera hay una multitud de reporteros queriendo hablar de lo sucedido con la señorita Stone — dijo un enfermero

— Malditasea — dije enojada —¿Y hay manera de salir por la parte de atrás del hospital?

— No señorita, están por todos lados y lo peor es que el auto en el que se irán lo están bloqueando

— Entonces tendremos que salir si o si con ellos afuera...

Comenzamos a salir de la habitación y empezamos a llevar a Jennifer a la entrada del hospital. En ese instante ví como todos los periodistas están intentando entrar para hablar con Jennifer

*Ella me volteo a ver preocupada*

— Ponte esto y tenemos que subirte rápido a la camioneta — dije entregándole unos lentes

Pudimos haberlo tenido todo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora