— Siempre intentas dar lo mínimo de ti, siempre quieres que nadie te hable... No te muestras como eres, la única vez que lo hiciste fue el día del tiro con arco pero después cambiaste enseguida — dijo desesperado — Se que no se nada de ti pero... No sé si yo solo soy el confundido
— ¿Y eso que más te da? — pregunté mirándolo
— ¿Por qué no me lo dices eh? ¿Que es eso a lo que le tienes tanto miedo?
— Quieres saber todo de mi vida ¿No es así? — dije aún mirándolo y enojada
— Se que eres una persona que tiene muchos secretos y que por alguna razón me interesa saber de ti... Quiero saber quién en verdad eres Celeste
*No di respuesta y volví a mirar el mar*
— Solo dime... — dijo interesado y preocupado
Comencé a pensar ¿Será prudente decirle algo más allá de lo que le dije en el restaurante? Desde el momento uno Santiago me transmite confianza tanto que sería capas de contarle todo sobre mi pero no pienso hacerlo.
— Está bien... — dije inhalando y exhalando despacio — Respecto a los novios y esas cosas te diré lo que siento. Me da miedo tener alguien dentro de unos años, alguien que de verdad sepa que es lo mejor para mí y no poder
— ¿Tienes miedo de no encontrar al chico perfecto?
— Tengo miedo de que no me quieran... — dije mirándolo
*Se sorprendió al escucharme decir eso*
— Yo no sé que es sentir algo por alguien, no se que es tener cariño por las personas ni mucho menos se que es el amor, la verdad nisiquiera se si exista... — pasé saliva — Porqué creo que cuando te muestras como realmente eres dejas caer un escudo de protección que yo desde hace mucho tiempo lo tengo conmigo y no he dejado ver tal vez lo bueno que hay en mi.
*Me miró*
— Se que encontrar el amor hoy en día es realmente complicado, las personas engañan, mienten y salen lastimados... Pero encontrar a alguien que te siga queriendo incluso si ya vio o sabe tus más oscuros secretos es imposible, a eso se le llama suerte y no ocurre siempre — dije un poco con la voz cortada — Las personas siempre van a opinar Santiago y me cansé de que todos me digan lo único malo que hay en mi aunque siendo sincera nisiquiera se si hay algo bueno.
*Volví a mirar el mar*
— ¿Sabes lo que realmente pienso de ti? — dijo mirando el mar
— Ahórrate ese comentario — dije enojada
*Nos miramos*
— Pienso que eres alguien que ha pasado tantas cosas tan malas que no se da la oportunidad de conocer a gente nueva por miedo a que la lastimen.. — me acaricia la mejilla —Lo que yo veo en ti es que eres alguien dulce, realista, simpática a su manera — dijo riendo un poco — Pero sobretodo veo que tienes tanto amor que dar pero te da miedo entregarte a alguien.
En ese momento la conexión que siento con Santiago se comenzó a fortalecer más, sin duda lo que me está diciendo es tan dulce. Él no deja de acariciar mi mejilla, aún nos estamos mirando pero cada uno se está concentrando en los ojos del otro que no hace falta decir nada más.
Comencé a ver sus labios unos segundos y volví a mirarlo pero descubro que está haciendo lo mismo que yo. Decidí comenzar a dejarme llevar.
*Nos empezamos a acercar para besarnos pero algo nos interrumpe*
— Hola chicos, solo vengo a informarles que está noche se hará una fiesta con temática blanca aquí en la playa... Abra música y un banquete especial de comida, obviamente la organiza el hotel así que los esperamos — dijo enseñándonos un folleto
*Santiago lo tomo*
— Gracias — dije con una ligera sonrisa
*Observé que ya están poniendo todo para la fiesta a unos cuantos metros de dónde estamos*
*Me comencé a levantar y a despertar del suelo*
— Creo que debemos irnos a cambiar si queremos venir al evento — dije recogiendo la toalla del piso
*Santiago se levantó*
— Sí, creo que debemos irnos... — dijo él algo desanimado
— Nos vemos en un rato — dije con una ligera sonrisa y me fui de ahí para ir a mi habitación
SANTIAGO
— Nos vemos en un rato — dijo con una ligera sonrisa y se fue de ahí
¿Pero que acaba de pasar? — me pregunté a mi mismo — Estar con ella me hace sentir diferente, no se que es esto que está pasando. Jamás lo he sentido, con nadie me había pasado, disfruto de su compañía y lo que acaba de pasar no es por casualidad.
(……………)
Estoy en mi habitación cambiándome para irme al evento de la playa.
Me puse un pantalón blanco algo suelto y una camisa con botones del mismo color claramente*Me puse un poco de perfume*
Agarre la llave del cuarto y me fui a dónde está el evento.
Al llegar me recibieron con una copa de champagne. Al parecer solo los que estan aquí son gente exclusiva ya que me pidieron mi nombre para poder entrar.
Comencé a mirar el mar mientras tomo unos cuantos sorbos a la bebida pero al momento de voltear hacia la entrada veo a Celeste con un vestido blanco hermoso, con su cabello al natural y con esas ondas tan lindas que se le hacen.
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Pudimos haberlo tenido todo
Ficção AdolescenteAl principio pensé que estaba haciendo las cosas correctas, que hacerle caso a los demás era lo mejor que tenía que hacer para mí pero me cansé de ser una sombra. Lo conocí a él un día de copas en un bar cerca de la casa de la prima de Alondra (mi...