En ese momento estoy mirando a una niña pequeña que está jugando a sus muñecas y noto que se me está quedando viendo demasiado, de la nada empieza a levantarse del pasto y viene hacia mi corriendo con una Barbie para poder abrazarme.
Al momento de abrazarme sentí algo diferente, algo que jamás había sentido en un abrazo, la sensación más pura que había tenido.
— Elena! — dijo su madre preocupada — Mi amor ¿Qué haces? — dijo apenada
*Comencé a reír un poco*
— Lo lamento — dijo agarrándola del brazo
*Me levanté de la jardinera*
— No, no pasa nada — dije — Elena no estaba haciendo nada malo ¿Verdad? — dije sonriendo a la niña
*Ella me volvió a abrazar al igual que yo a ella*
Admito que en el segundo abrazo una lágrima comenzó a salir pero trate de disimular quitando la rápido de mi rostro.
*Elena y su madre se fueron al igual que yo*
*Regrese a la casa*
Al regresar a la casa mire como Santiago está tocando y tocando la puerta empezando a qué alguien le abra. Así que cuidadosamente quise regresar al parque pero hice un ruido que provocó que me descubriera
*Me mira*
*Lo mire*
— Hola — dijo
— Hola — respondí
*Silencio*
Nuestras miradas comenzaron a conectarse nuevamente
— ¿Podemos hablar? — preguntó
Yo sin decir nada empecé a acercarme y abrir la puerta para dejarlo pasar.
— Pasa — dije — ¿O quieres hablar aquí afuera? — pregunté seria
*Él entro y después yo para cerrar la puerta*
*Me recargue en la puerta*
Estoy tratando que este momento no fuera incómodo para mí y poder escuchar con mucha atención lo que me quiere decir
— ¿Quieres agua? — pregunté
— ¿Eso es todo? — preguntó
*Rodé lo ojos*
— En serio que no te entiendo, quiero hablar contigo tranquilamente y comienzas con tus cosas — dije tratando de no enojarme
— Es que siempre actúas como si no te importara nada Celeste, no me hablas, me evitas, dime qué es lo que quieres de mi — dijo comenzando a enojarse
— ¡¡Quiero que dejes de jugar conmigo!! — dije enojada — QUIERO QUE POR UNA MALDITA VEZ ME DEMUESTRES QUE EN VERDAD QUIERES ESTAR CONMIGO — dije enojada
*Santiago se acerca a mi*
— Ni te atrevas a darme un beso porque así no se solucionan las cosas — dije firme
*Me miró a los ojos*
Yo estoy tratando de evadir esa mirada, mi punto debil es mirarlo a los ojos pero no puedo caer.
— Mírame — dijo acariciando mi mejilla
Estoy mirando al techo tratando de que ninguna lágrima resbale sobre mis mejillas.
— No — dije con la voz cortada
— Celeste... Mírame
*Cerré los ojos para poder tener la cabeza enfrente*
— ¿Por qué no quieres verme? — dijo acariciando mi mejilla
— Esto no se soluciona así — dije aún con los ojos cerrados y con la voz cortada
*Mis lágrimas empezaron a salir aún con los ojos cerrados*
*El empezó a limpiar cada una de ellas así que no tuve más remedio que abrir los ojos*
— Estoy cansada — dije con la voz temblorosa — Estoy cansada de todo esto — respondí
*Santiago comenzó a acercarse más a mi*
*Juntamos nuestras frentes*
— Quiero estar contigo... Te prometo que siempre estaré contigo porque tú eres lo que me hace feliz, tu eres la única con la que quiero estar
*Nos volvimos a mirar*
En ese momento nos abrazamos y comenzamos a besarnos de una manera demasiado tierna... Sus labios tan lindos y suaves volvieron a tocar los míos.
ALONDRA
Día siguiente
Estoy en la empresa mirando algunas reseñas de la colección que acaba de salir y mis sospechas fueron ciertas. Todos, absolutamente todos dijeron que la calidad de nuestro material había sido de los peores. Las ventas no van para nada bien y obvio esto jamás tuvo que hacer salido con esos insumos.
— Alon — dijo Simón entrando a mi oficina bastante enojado — ¿Qué rayos está pasando con mis diseños? Son impresionantes pero los materiales que me obligaron a usar son asquerosos y por eso no se están vendiendo — dijo enojado
— Ya se Simón, ya se, pero no me culpes a mi... Dile al tan inepto que tenemos en esta empresa, él fue el que aprobó todo.
— Alondra, nos estamos yendo a la bancarrota con todo esto... Cuando Jennifer estaba aquí era una de las mejores empresas y ahora este pelafustan de pacotilla está haciendo que la empresa sea una de las peores en la industria.
— Lo se — dije fastidiada con todo esto — Pero ¿Qué puedo hacer? El inútil me amenazo, y la verdad creo que ya no está en mi sacarlo.
— Pues no sé cómo lo haremos pero Steve tiene que irse
— Suerte con eso — dije derrotada
*Simón se fue enojado y triste*
Yo estoy comenzando a pensar que rayos vamos a hacer con la empresa, no está entrando la misma cantidad de dinero por la colección y tenemos que pagarle a los empleados, todo esto es un desastre.
¿Que tengo que hacer? Será prudente hablarle a Jennifer para que me diga o arreglo esto por mi cuenta.
La única salvación es volver a sacar una colección nueva, una colección no antes vista con lo poco que nos queda para poder repara todo este daño y que la empresa no entre en bancarrota.
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Pudimos haberlo tenido todo
Teen FictionAl principio pensé que estaba haciendo las cosas correctas, que hacerle caso a los demás era lo mejor que tenía que hacer para mí pero me cansé de ser una sombra. Lo conocí a él un día de copas en un bar cerca de la casa de la prima de Alondra (mi...