Intimo

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Después nos alejamos, juntamos nuestras frentes  unos segundos y volvimos a besarnos. Santiago con sus manos me acerco más a él para que nuestros cuerpos estén más juntos y volvió a acariciar mis brazos pero cuando empezó a bajar sus manos a mis muslos para meter su mano deje de besarlo y me aleje.

—¿Qué sucede? — preguntó susurrando

— Creo que esto se está saliendo de control — dije levantándome de ahí

— Celeste... — dijo deteniéndome — Se que algo dentro de nosotros quiere que esté momento suceda por favor ¿Qué es lo que sucede?

— Quiero tiempo...

*Subí la escaleras para poder ir a mi habitación*

*Cerré la puerta y me recargue en ella*

Lo deseo tanto — dije recordando lo que acaba de pasar — Pero el simple echo de que me toque me da miedo por los abusos de Steve. Se que él no es Steve pero no sé si aún estoy preparada para dar ese paso.

Dos días después

Estoy en el centro de ayuda de  Dianna, la verdad quiero visitar a esas personas... Se que alguna de ellas a sufrido lo que yo pase y quisiera saber su experiencia para ver si eso me ayudara a salir de esto.

— Hola — dijo Dianna

*Nos dimos un abrazo*

—¿Qué haces aquí?

*Respiré y exhale despacio*

— Necesito repuestas — contesté

— ¿Hacerca de qué?

— De cómo salir adelante sobre las violaciones que tuve — dije y guarde silencio unos segundos — El día de la fiesta en la noche hace dos días Santiago y yo regresamos a la casa y algo sucedió

— ¿Tuviste relaciones con él?

— No pude... — dije mirando las áreas verdes del centro desde el balcón del piso donde estoy

— ¿Por qué? ¿Qué fue lo que pasó por tu mente?

— Cuando empezó a tocarme intenté no pensar en esas noches, en las noches dónde Steve llegaba y me hacía daño... Sobretodo en esa noche donde me encerró en su cuarto y pasaron cosas sumamente grotescas.

— ¿Y Santiago hizo algo que te incomodara?

*La mire*

— Ese es el problema... Me gustó la manera en como comenzó a tocarme, la manera en como nos conectamos y sobre todo la manera en como me hizo sentir.

— Jennifer, Santiago no es Steve... Tú misma te diste cuenta que esas caricias te hicieron sentir plena y querías más, querías que sucediera pero te dió miedo volver a sentirte lastimada y es normal... Aún esos recuerdos te hacen frenarte de cosas que posiblemente ya estás preparada pero no te has dado cuenta.

— Es por eso que quiero estar aquí... Quiero platicar con esas mujeres, quiero respuestas.

*Nos dimos un abrazo*

— Está bien... Tomate todo el tiempo que necesites ¿Okey?

— Gracias...

(...........)

Estoy caminando por las áreas verdes que tiene el lugar y comencé a saludar a las chicas que están aquí, me senté con algunas y empezaron a contarme algunas historias pero en estos momentos a lo lejos estoy observando a una chica algo tímida, está sentada abajo de un gran árbol y algo dentro de mi me hizo ir hacia ella.

— Hola — dije acercándome despacio

*Me miró*

— Hola — dijo desconfiada

— ¿Puedo sentarme?

*No dió repuesta así que decidí hacerlo*

— ¿Cómo te llamas? — pregunté

*Me miró*

— Jennifer — contestó

No podía creer que se llamará como yo.

— Yo soy Celeste — dije con una ligera sonrisa

*Ella miró al suelo unos segundos*

— ¿Qué haces aquí? — preguntó

— Solo vengo de visita, soy una vieja amiga de la dueña de aquí y quise venir a verlas.

*No dió repuesta*

Creo que se siente incómoda ya que se está abrazando el brazo. Decidí levantarme para no hacerla sentir incómoda pero algo me detiene.

— No se que hacer... — dijo desanimada

— ¿Perdón?

— ¿Cómo se sale adelante después de esto? — preguntó mirándome

*Volví a sentarme*

— ¿Qué fue lo que sucedió? ¿Quieres decirme? 

— Fue hace algunas semanas — dijo con más confianza — Yo estaba en mi casa un fin de semana sola— contestó con pausas y con la voz algo quebrada — Hasta que un vecino como de mi edad entro a escondidas, aún recuerdo la sensación que tenía esa noche. Sin darme cuenta me tapó la boca con su mano y me llevo a la fuerza a mi habitación ya que estaba en la sala viendo una película.

*Sus lágrimas empezaron a salir*

— Siempre pensé que mi primera vez sería algo especial pero no lo fue — dijo — Todo fue una pesadilla, aún siento como sus manos tocaron todo mi cuerpo y paralizada deje de luchar... Después de esa noche pensé que esa pesadilla porfin había acabado pero no fue así. Todas las noches en las que mis padres no estaban en la casa aprovechaba para entrar a la mía y aunque estuviera cerrada de todas partes, él siempre buscaba la manera de entrar y abusar de mi.

*La abrace*

— ¿Cómo es que se sale adelante después de eso? — preguntó

— Se de esa sensación — dije — Te entiendo completamente y sinceramente no tengo una respuesta para esa pregunta porque ni siquiera yo me la he podido contestar. Solo se que aquí nunca estarás sola creeme, estás en un lugar seguro ahora.

— Desde que te acercaste pude notar que tú también sufriste lo que yo... Y me dió confianza al decírtelo — dijo más tranquila

Al escucharla decirme eso algo dentro de mi me movió, se que no es fácil salir de un abuso como el de nosotras pero si hay opción de poder salir adelante y volver a confiar aunque lleve tiempo. Y ahora de que es lo que tengo que hacer.

Pudimos haberlo tenido todo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora