Capitulo 28

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NEGACIÓN, PERO DESPUÉS VIENE LA ACEPTACIÓN ¿VERDAD?

A pesar de que ya habían pasado varios minutos de que se llevaron el cuerpo de Sawamura y Miyuki fue arrestado, el ambiente en Seidou seguía sin mejorar.

Ryo sostenía a su hermano inconsciente entre sus brazos, fue algo bueno que el menor se haya calmado, aunque haya sido con ayuda de calmantes, pero la parte mala fue que la calma le trajo sufrimiento, al dejar de preocuparse por su hermano fue más consciente de toda la situación, y si, todo era muy jodido, no quería dejar que las emociones lo superaran, no quería sufrir, quería que la falsa ilusión aun fuera una posibilidad. Pero ya no es así, y él tendría que aceptar a vivir en la realidad. De cierta manera era divertida la sensación que su cuerpo sentía, su cuerpo se sentía agotado pero su mente trabajaba a una velocidad increíble, pero ninguno era un buen pensamiento.

Al ver mejor lo que le rodeaba a quien primero busco fue a Kuramochi, lo vio junto a Tetsu, los vio a ambos en un mal estado, lamentablemente el corazón no era algo simple que se pudiera sanar. Jun estaba de rodillas llorando y lanzando maldiciones, Furuya se había sentado y ocultaba su rostro entre sus manos, Kanemaru y Tojo fueron a la entrada del almacén y parecían tener una pequeña discusión: "Todo este tiempo estuvo tan cerca, si tan solo... pudimos haber... debimos buscar... no se podía hacer nada... no había manera de que lo supiéramos... él debió estar tan asustado..." eran las palabras que escuchaba de ellos. Hubieron varios que prefirieron dejar el lugar. Pudo reconocer a algunos chicos de primer año, a veces Sawamura y Haruichi le mandaban fotos y le escribían historias divertidas de momentos que pasaban con ellos, no reconocía a todos pero si a los principales, y bueno, ellos no estaban mejor que los mayores, pero podía entenderlos, él también solo había estado un año junto a Sawamura y aun así sentía un terrible dolor por perderlo.

-Sé que todo esto es difícil, sé que lo que quieren es estar solos, sé que quieren muchas cosas y precisamente por eso debo vigilarlos, mi trabajo como entrenador es cuidarlos... y ya no quiero volver a fallar – habló con tristeza Kataoka –. Sé que esto no es lo que prefieren pero necesito que todos se reúnan en el campo principal. Tienen 20 minutos para ir. Por cuestiones de seguridad el almacén será cerrado... creo que es lo mejor para todos.

Con pesar y mucho esfuerzo los chicos se dirigieron con lentitud al lugar de reunión, era una vista poco agradable de ver, una vista que le rompería el corazón a cualquiera.

El campo principal, utilizado para entrenar y hacer prácticas, era ahora mismo el lugar donde la tristeza y el dolor eran casi palpables, los adolescentes ahí reunidos no parecían tener la misma vitalidad de antes, pero no era su culpa, el mundo les arrebato para siempre algo importante, alguien que era irremplazable y valioso.

-¡DÉJENME! ¡EXPLIQUENME LO QUE ESTÁ PASANDO! ¡DÍGANME QUE TODO ESTO ES UNA MALDITA BROMA! – gritaba alguien.

-¡Mei-san, por favor, cálmese!

Al campo iban ingresando los de Inashiro, Yakushi e Ichidai, los mismos que ayudaron activamente en la búsqueda. Iban en grupo e intentaban calmar a Mei, ellos ya habían sido informados de todo, pero es obvio que no se conformarían solo con eso. Cuando Shirakawa vio a Kuramochi se dirigió rápidamente hacia él siendo seguido por los demás.

-Kuramochi, explícanos lo que está pasando.

Claramente el peliverde no quería hablar, y aun sabiendo que era poco considerado preguntarle precisamente a él los demás le hacían preguntas sin parar, afortunadamente Yuki fue en su ayuda junto con Ryo.

-Oye, ex-capitán de Seidou, explícanos todo – demandó Mei.

-¿Qué fue lo que escucharon? – fue la simple respuesta de Yuki.

No te quiero perderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora