El barco atracó en el puerto tras casi una semana de bravas olas y lluvias torrenciales. Pero por fin había llegado.
Cesibir.
La isla de los repudiados y encarcelados.
⏤Papeles ⏤indicó un hombre rudo, de hombros anchos y corta estatura, con un prominente bigote grisáceo que tapaba casi la totalidad de sus labios.
Rebusqué en mi bandolera violeta, entre frascos y cuadernos hasta que di con la cartera. Extendí la mano con la documentación necesaria soltando un bufido.
⏤Bien, Marquesa Ivette Rinascere, ¿que se le ha perdido en esta cárcel de mala muerte? ⏤cuestionó sorprendiéndose de mi procedencia teniendo que revisar varias veces la veracidad de mis datos.
⏤Vengo a recoger un... paquete ⏤respondí sin querer darle más detalles, evitando coincidir miradas.
Extendí otro trozo de papel, rasgado por los bordes y levemente emborronado.
⏤Mi paquete ⏤indiqué seria señalando al muchacho.
El guardia me miró con confusión y cierta desconfianza, pero ante mi título no podía hacer otra cosa que callar y obedecer.
⏤Acompáñeme ⏤indicó con desgana abriendo la primera puerta.
Nueve puertas repletas de cerraduras tanto físicas como mágicas, junto con dieciséis pasillos diferentes, fue lo que necesitamos recorrer para llegar a la sala.
Al abrir la puerta, un joven de menor edad que la mía se refugiaba en la esquina del fondo.
⏤Aún no es la hora de la comida... ⏤murmuró con recelo tirando la bandeja de metal hasta nuestros pies, sin llegar a alzar la vista de su esquina.
⏤Es tu día de suerte, han venido a por tí ⏤expresó el guardia sin ocultar el desagrado que le producía que me lo llevase.
Sus verdes ojos se cruzaron amenazantes con los míos, sorprendiéndose de que fuera, precisamente yo, la persona que le iba a liberar.
Se quedó unos segundos en silencio, inmóvil, analizándome junto con el ambiente. Hasta que sonrió ladeando la cabeza, mostrando el orgullo y victoria en su pícara sonrisa.
⏤Ivette, Ivette... cuanto tiempo ⏤bromeó sacudiéndose la tierra de sus ropas y plantándose a escasos pasos de mí.
⏤Ojalá hubiera sido más... ⏤expresé con media sonrisa forzada.
⏤Si sigo con vida y estás aquí, solo puede ser porque... Has conocido a mi hermano, ¿no? ⏤bromeó levantándose del suelo.
Su cuerpo estaba más delgado, sus ropas sucias y su pelo pelirrojo alborotado y largo, con tanta suciedad en el rostro que llegaba incluso a tapar las pecas de su rota nariz.
⏤Sí ⏤respondí intentando contener mis emociones y mis pensamientos que le daban la razón a Cassian en nuestra última conversación⏤. Y te necesito para recuperarlo.
FIN
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Augurio ✔️ (Libro 1)
FantasíaEn el día más deseado del año se celebraba la unión de los descendientes del Reino de Cornebu con el Reino de Itar. Pero, no todas las festividades son alegres, ni todas las ceremonias acaban en fiesta. Un robo, una incriminación y un viaje que seis...