Capítulo 12

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El jueves en la tarde después de la práctica de fútbol, Sander me marcó para decirme que estaba en el estacionamiento. 

Los nervios me inundaron cuando miré a Julián  frente a mí en su casillero. No quería que se conocieran aún, así que me apresuré a girarme y tomar mis cosas para bañarme.

—¡Oye! ¡Mauricio! —Me gritó uno de mis compañeros, así que me detuve y me giré sonriente.

—¿Qué?

—¿Vas a bañarte? Siempre vas y meditas un rato en el campo —Me frunció el ceño confundido.

—Sí, no tengo tiempo para eso hoy —Me moví de nuevo y tomé una de las duchas.

Estaba enjuagando mi cuerpo cuando escuché a Julián .

—¿Mauricio vas al departamento? —Estaba al otro lado de la cortina, así que mi respiración se cortó —Recuerdas el juego de boliche. ¿cierto?

Carajo, eso era verdad. Miré la cortina con el terror de que la abriera mientras intentaba decirle algo para no asistir.

—Yo... surgió algo.

—¿Qué cosa?

—¡Algo! ¡solo báñate!

No volvió a emitir ningún sonido, por lo que, supuse entendió la indirecta de que no quería estar hablando a gritos con todos escuchando.

Me terminé de bañar rápidamente y salí de nuevo para tomar las cosas de mi casillero. Estaba guardando todo en mi mochila cuando Julián  se detuvo a mi lado.

—¿Ahora si me puedes decir por qué no irás?

Solté un suspiro y miré hacia los chicos para ver si estaban demasiado cerca y así era.

—Vamos afuera —Me siguió hasta que me detuve cerca de la banca —Olvidé que teníamos planes con los chicos —Murmuré —Así que hice planes con... Sander —Susurré el nombre más bajo de lo normal.

—Sander —Murmuro igual, entonces se distrajo mientras volteaba a ver hacia algunos de nuestros compañeros que ya se iban —Al fin sé su nombre.

Tragué duro y levanté la mirada del suelo.

—Si, bueno...

—Espera —Ladeo la cabeza mientras me observaba —He escuchado ese nombre antes —Se acercó dos pasos hacia mí, por lo que me alejé uno —El chico que nos topamos en el restaurante de comida china, el que te dejó la tarjera, el abogado fiscal —Sus ojos brillaron con reconocimiento y mi garganta se cortó. 

Carajo, olvidé lo bueno que es con la memoria.

—Uh...

—¡Es él! —Dijo confirmando al ver mi rostro, entonces su ceño fruncido apareció —Dijiste que solo era el hermano de un compañero.

—Podrías bajar el tono de voz —Gruñí, entonces cerré los ojos —No tengo que darte explicaciones de todo  —Lo miré —Si, él es el chico con el que salgo ahora.

Me observó varios segundos

—Bien, pues dile que venga.

—¿Qué?

—Sí, puede venir a la reunión con nosotros —Se encogió de hombros.

—No.

—¿Alguien sabe quién es? ¿Brendan? ¿Tiene idea de cómo luce tu... pretendiente?

—Dije, no. Julián , detente —Me giré para empezar a caminar hacia el dormitorio, tendría que distraerlo y hacerle creer que lo vería en un rato más, así tal vez se alejara de mí.

En medio de ambos (Serie amigos #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora