Obito Uchiha un jefe de la mafia, tiene el mundo a sus pies, nunca lo han visto flaquear o mostrar debilidad, para el lo primordial es el dinero y poder lo demás sale sobrando.
Kakashi Hatake es un joven estudiante de secundaria, trabaja en una cafe...
Otro día más, la misma rutina estaba por comenzar, Kakashi se levantó y se dió un baño, después caminó hacia la cocina tan solo envuelto con una toalla de la cintura para abajo, tenía que alimentar a pakkun, así que agarró el plato, en su otra mano llevaba la comida del cachorro, salió de la cocina pero una voz desde el mueble lo asustó.
— Buenos días... —Dijo Obito abostezando, se sentó en el mueble aún con los ojos cerrados, pero cuando los abrió lo primero que vió fue el plato de pakkun volar hacia su rostro y luego escuchó el grito de Kakashi.
— ¡¡No vea mi rostro!! —El menor se fue corriendo hacia la habitación, la comida quedó tirada en el suelo.
— Mierda eso dolió... —Obito sobó su cara, lamentablemente lo único que pudo ver fue la espalda de Kakashi cuando corrió hacia la habitación, bueno no fue tan lamentablemente ya que era una linda vista, pero habría sido mejor si Kakashi si hubiera quedado quieto.
A los minutos Kakashi salió del dormitorio ya vestido y con su mascarilla puesta, apartó a pakkun de la bolsa antes de que se terminara la comida, en cambio Obito lo veía con el ceño fruncido.
— Le salió un cacho. —Dijo Kakashi divertido viendo el chichón en la frente de Obito.
— ¿Te crees muy gracioso? —Contestó molesto.— Vaya forma de dar los buenos días.
— Olvidé que estaba aquí... —Murmuró Kakashi.— Por favor, dígame que no vió mi rostro...
— Osea que...¿puedo ver todo de ti a excepción de tu rostro? —Preguntó alzando las cejas.
— ¿Eh? ¡No! —Contestó sonrojado y luego caminó a la cocina.— Iré a preparar el desayuno, vaya a darse una ducha y después póngase hielo en eso.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El azabache observaba al menor cocinando, aparte del pantalón un poco apretado y la camisa gris de cuello alto, usaba un delantal, sonrió de lado, colocó la bolsa de hielo en la mesa, a veces vale la pena arriesgarse, así que acercó y abrazó al peliplata recargando su mentón en el hombro del menor.
— Huele bien... —Susurró cerca del oído de Kakashi, quien solo se estremeció por la cercanía.— Hacemos una boni...
— ¡Alejese! —Kakashi remachó con su pie el de Obito quien retrocedió cojeando un poco.
— Primero mi frente y ahora mi pie... —Se quejó el azabache.
— ¡Pues no se me vuelva a acercar así! —Kakashi resopló y siguió dándole vuelta a aquellos panqueques, trataba de no sonar nervioso, la verdad siempre había evitado ese tipo de contacto físico, bueno no le atraía ninguno de sus pretendientes, así que los mantenía lejos, no es que no hubiera recibido abrazos ya que Guy lo abrazaba a cada rato, pero no de la manera que lo hizo Obito.
— Eres muy lindo... —Dijo el azabache, Kakashi se sonrojó pero como estaba de espalda Obito no lo notó.— ¿Yo te parezco lindo?
— No, usted me parece un idiota. —Contestó y empezó a servir los panqueques.
