Obito Uchiha un jefe de la mafia, tiene el mundo a sus pies, nunca lo han visto flaquear o mostrar debilidad, para el lo primordial es el dinero y poder lo demás sale sobrando.
Kakashi Hatake es un joven estudiante de secundaria, trabaja en una cafe...
Kakashi estaba de pie frente aquél espejo, trataba de arreglar su cabello, pero este volvía a su forma habitual, solo resopló maldiciendo un poco, no entendía porque se sentía nervioso, incluso estaba ansioso asegurándose que su ropa se viera bien, se colocó una chaqueta gris y una bufanda azul, era totalmente diferente de la ropa que usó para la cena, ya que esta la había comprado él en una pequeña tienda, escuchó que tocaban la puerta así que salió a abrir.
— ¿Ya estás listo? —Preguntó el azabache quién vestía un abrigo oscuro, camisa roja, pantalón negro y tenis rojos.— Te ves bien.
— ¿Enserio? Yo parezco un viejo taxi y tú un Lamborghini.
— Jajajaja ¿que el viejo no soy yo? —Bromeó el azabache.
— Sabes a lo que me refiero. —Murmuró Kakashi.
— Tú te ves mucho mejor que los modelos de revistas. —Mencionó Obito para luego agarrarle la mano y darle un beso, sonrojando al menor.— Y con ese tono carmesí, te vez mucho más lindo.
— Idiota... —Murmuró Kakashi avergonzado y salió junto a Obito.
El azabache condujo hasta la pista de patinaje, alquilaron un par de patines, ahora venía la parte difícil, Obito trató de no tambalearse, lo cuál era difícil ya que el peliplata se sujetaba de él, pero tenía que lograrlo por Kakashi.
— Obito... —Habló el peliplata mientras se sujetaba del brazo del azabache, este lo volteó a ver.— No sabes patinar, ¿cierto?
— Jeje claro que sí. —Contestó alejándose un poco ahora sosteniendolo de la mano pero fue difícil mantenerse de pie así que ambos se cayeron, aunque Obito jaló a Kakashi para que cayera sobre él.
— Eres un idiota. —Mencionó Kakashi, golpeando levemente el pecho del azabache.
— Lo sé... —Contestó él sonriendo de lado, deslizó sus manos hacia el trasero del peliplata apretándolo un poco.
— ¡Imbécil! —Kakashi lo golpeó más fuerte, pero Obito solo se rió.
— Soy tu novio, así que puedo tocarte.
Kakashi solo frunció el ceño y se levantó, al mismo tiempo que Obito, pero antes de que intentara ponerse de pie este lo jaló sentandolo en sus piernas, el peliplata se puso más rojo que un tomate volteó a ver hacia todos lados para notar si había alguien mirándolos, pero para su suerte no había nadie.
— Recuerda que estamos aquí, para demostrar que somos novios... —Le dijo al oído.
— Pero eso no significa, que vamos a cojer enmedio de la pista.
— En primera no estamos en el centro de la pista y segundo, aún tenemos ropa. —Dijo Obito sonriendo.
— Y no me verás sin ropa hoy. —Contestó Kakashi.
El peliplata intentó ponerse de pie, con los patines era difícil, pero colocando sus manos en los hombros de Obito lo logró, para este fue más difícil varios intentos y nada hasta que Kakashi lo agarró de la mano, luego empezaron a patinar con un poco de dificultad.
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