Brisa
-El lugar es mío ahora desde que mi mama falleció antes de mi padre. - Angie me contó mientras pasábamos dentro de la casa.
Antes de entrar se había limpiado con un trapo y se puso encima de su top un buzo delgado. No sabía si quejarme o agradecer pues ya no había riesgo que me atrapara viéndola.
-Y perdona el desorden. - continuo cuando ya nos encontrábamos en lo que parecía la sala de estar. - No tenía idea que tendría invitados hoy.
-Esto es un desastre. – dije. - Tu sofá está harapiento.
El lugar era pequeño, una sala, con un sofá y una mesa de centro pequeña, a nuestras espaldas a solo unos pasos una pequeña cocina la cual se separaba de la sala solo por una barra, luego solo podía ver 4 puertas, que no sabía si daban todas a habitaciones diferentes y era todo. El sofá se veía viejo, no tenía cojines, y encima lo que apenas parecía un cubre sofás. Al menos la cocina se veía limpia y los colores en general de las paredes eran claros y combinaban.
-Así es como te das cuenta que es un buen sofá. - me dijo orgullosa, importándole un carajo mi critica.
-Esta casa es del tamaño de mi guardarropa. - dije mirando alrededor.
-Bueno, lamento no haber nacido en una familia de billonarios. - dijo irónica. - Mi padre era un simple mecánico. Tal vez arreglaba autos lujosos, pero no podía pagar uno para el mismo.
Camino alrededor recogiendo un poco.
-Así que quédate o vete, señorita reina Domínguez, no me importa.
La mire molesta.
-¿Sabes qué? No he sido más que amable y educada vos. – la apunte con un dedo acusatoriamente, bueno tal vez criticando su casa no lo fui pero. - Te hice una oferta muy generosa. Y por no mencionar lo increíblemente buena compañera de piso que puedo ser. Así que cuida tu tono. Me largo.
¿Para qué había aceptado el trato si luego iba a decir que "no le importaba"? Camine hacia la puerta ofendida.
-¡Y no trates de detener que me vaya!.- le dije dramáticamente.
La vi seguirme y sonreí satisfecha.
-Yo no soñaría con eso. - dijo a mis espaldas.
-Ni siquiera ruegues porque me quede. - insistí porque me había seguido, pero no parecía tener intenciones de pedirme que no me fuera.
-No lo iba a hacer. - dijo aburrida.
-Nada que digas va a convencerme. - pase por el umbral de la puerta.
-Okay.
-Y...
Ni siquiera pude terminar la frase cuando me cerro ruidosamente la puerta en la cara. Bueno, ya iban dos en un solo día.
-¡Bueno, tú te lo perdes, Angie!
Pataleé en mi lugar y salí furiosa del porche. Camine por la acera maldiciéndola. A lo lejos vi a dos chicos fumando cerca de un callejón, mierda, tenía que pasar por ahí sí o sí. Nerviosa continue con camino.
-¡Oye!.- grito de pronto uno de ellos cuando pase por su lado, maldije, ¿todo hoy me iba a salir mal?- ¿No te he visto yo antes?
Traté de ignorarlo y seguí caminando, pero se plantó frente a mí. Traía unos feos shorts caqui y una chaqueta de jean y su cabello era largo, lleno de rulos y negro.
-No tenes por qué ser grosera. - me miro mal. - Sé que te he visto antes.
Di unos pasos para atrás tratando de alejarme.
ESTÁS LEYENDO
Cute Mess (Brangie)
FanfictionLa vida de Brisa se cae a pedazos después de que su familia queda en quiebra. Después de eso no tendrá otra opción, excepto mudarse con una linda extraña, la cual podría convertir su vida en un desastre, desastre al que odia amar.