Cute Mess (Brangie)

Parte 26

Brisa

-Amiga, casi que no llegas al examen de Acosta, te mata si no llegabas.- Lourdes me miro con desaprobación.

-Ya, ya se.

-Espera, ¿estuviste llorando?

-No...

-Se te ve en los ojos, Bri ¿qué pasó?

-Solo... es qué pasó algo con un pariente.

-Mh.- me miro dudosa.- ¿Y está ella o el bien?

-Si, está bien. Y no quiero pensar más en el.

-Tranqui, Bri. Todos tenemos parientes molestos.

-Parece que no importa que, usted siempre encuentra tiempo para platicar en clase, señorita Domínguez.- la maestra había dejado de hablarle a la clase y me puso más atención.

Solo le di una mirada seria y siguió con la clase. El resto del día me pareció que pasaba demasiado lento, al final del día salí seguida de las chicas para encontrarme con la sorpresa de que Angie estaba en la entrada de la escuela, al parecer esperándome.

-Hola, chicas.- saludó a Marti y Lu.

-Hey, Angie.- Marti y Lu la saludaron de vuelta y con una mirada cómplice se despidieron también.

-¿Tienes hambre, Domínguez?

-Vaya, pues de hecho si.

-Dale, yo invito.- dijo señalando con la cabeza a su auto estacionado.
—-

-Pizza, eh.- dije riendo por su poca creatividad.

Llegamos a casa y nos pusimos cómodas, cuando salí del baño después de una rápida ducha para relajarme, me encontré con Angie en pijama en la sala con dos cajas de pizza sobre la mesita de centro.

-No es solo pizza, Bri. Es pizza de celebración.

-Mh, solo que no tenemos nada que celebrar.- me reí tomando una rebanada.

-Claro que si. Bueno estamos aquí vivas, comiendo pizza y bueno, nunca celebramos lo de tu herencia.

Yo rodeé los ojos riendo.

-De hecho, hay algo que quiero que hablemos.

-Mmh, decime.- dije de pronto ansiosa.

-Bueno, no hablamos sobre el beso.

-Lo se.- dije.- Mh, creo que el momento en el que estábamos, que yo estaba vulnerable y que fueras tan buena amiga hizo que pasara.

-Brisa, no somos solo amigas, lo sabes.

-Que-que tratas de decir.- la situación estaba poniendo muy nerviosa.

-Que a mi no me molesta que sea algo más, la cosa es ¿a vos?

-Eh...

-Mira perdón, se que esto está muy random.- dijo Angie acomodándose mejor en el sofá y de pronto igual de nerviosa que yo.- Es que no puedo solo fingir, me atormenta el pensar en que...

-¿Que?

-Que no hemos aclarado del todo lo que significamos la una para la otra.- pasó una mano nerviosa por su nuca y yo me morí de ternura.- Yo sé que... que quiero estar con vos.

A pesar de que estaba muriendo de ternura ahora mismo y gritando de emoción en mi interior, no pude evitar ponerme nerviosa, ¿en serio estábamos aclarando esto ahora mismo?

-Perdón yo.- dije insegura ante su mirada expectante.- Estoy tratando de encontrar las palabras..

-No quiero presionarte, Bri. Solo quería que lo supieras. Aún así.- soltó una risita nerviosa.- Necesitó algo de claridad, me estoy volviendo loca. Pero aceptaré cualquier decisión que tomes.

-Angie...

-Entiendo.- Angie había entendido con la mirada que le di.- Es repentino, pero Bri.

Se acerco a mi, que estaba sentada a su lado. Puso una mano en mi mejilla acariciándome, cerré los ojos permitiéndome disfrutarlo unos segundos y cuando los abrí la vi inclinase sobre mis labios pero la detuve.

-Angie, eres lo mejor que tengo ahora mismo, te tomo enserio.- hable cuidadosamente.- Por eso no puedo tomar esta decisión ahora.

-Pero.- me miro dolida.

Tome su rostro en mis manos, haciendo que me mirara a los ojos para que entendiera.

-No te estoy rechazando, solo... pospongamos esto, ¿si? Después de que termine con el desorden de mi familia, hablémoslo.

Negó con la cabeza dispuesta a objetar pero la interrumpí antes.

-Dime que me esperaras.- acaricie sus mejillas.- Prométeme que lo hablaremos después.

-Esta bien.- dijo con un suspiro rendido.- Lo prometo.

-Deberíamos ir a dormir.- le dije apenada.- Quiero que sepas, que hago esto porque sinceramente me preocupo por tus sentimientos.

-Te importan, pero no quieres estar conmigo.- dijo de pronto cabizbaja.

La vi levantarse del sofá ante mi ansiosa mirada.

-Angie.

-Buenas noches, Brisa.

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