Llegaste a mi vida

Capítulo 31 - Negación

Jeon Jungkook POV

Me quedé en el porche y vi como Jimin se marchaba. Probablemente fue la cosa más dura que jamás había hecho además de dejar a mi esposa en la fría y dura tierra. Tomé un gran trago de aire salado del océano y luego volví a entrar en la casa. Somin y Min Ho estaban viendo una película en la sala de estar mientras que Taehyung todavía estaba recogiendo las cosas de la fiesta. Sentí un poco de culpa por dejarlo con el desastre y fui a ver si podía ayudar.

"¿Qué necesitas que haga?" pregunté mientras él ponía el último bol en el lavavajillas.

"Hay que plegar las mesas y llevarlas al garaje, pero eso puede esperar," dijo. Se acercó a mí y su mirada fija empezó a ponerme incómodo.

"¿Qué ha pasado?" Debería haber sabido que Taehyung se daría cuenta de mi angustia. Contemplé no decirle nada pero en ese momento realmente necesitaba alguien con quien hablar. Dejando salir el aire, me incliné en la encimera.

"Jimin se ha marchado," declaré simplemente. Taehyung me miró de reojo y luego arqueó una ceja en confusión.

"Volverá más tarde, ¿verdad?"

"No, no va a volver." Sentí el cuchillo clavarse más en mi corazón. "Hemos roto."

"¿Por qué?" Taehyung estaba completamente en shock mientras que yo me encogía de hombros.

"Cree que necesito enfocarme en Somin," susurré.

"Pero tú lo estás. ¿No le contaste a Jimin que tiene una cita con el consejero?"

"Sí."

"Entonces, ¿por qué demonios le has dejado salir por la puerta?" Taehyung levantó sus brazos y me lanzó una mirada furiosa.

"El solo ha confirmado lo que he estado pensando desde que volvieron las pesadillas de Somin."

"Jungkook," dijo en un tono exasperado, como si estuviera hablándole a un niño que le ha desobedecido. "Esto es ridículo. No puedes dejar que Somin dirija tu vida. Eventualmente ella se convencerá. Quiere que seas feliz, pero siente un conflicto con la lealtad a su madre. Eventualmente, esas paredes caerán y tú no puedes dejar que lo mejor que te ha pasado en la vida se marche." Sus manos estaban en sus caderas y me miraba expectante.

"Se ha ido, Taehyung."

"¡No, no se ha ido! Meterás tu trasero en el coche e irás hasta allí y le dirás que no puedes vivir sin él. ¡No volveré a tener al hermano abatido que tuve hace tres años!" Ahora me estaba gritando y yo me quedé ahí, ligeramente en shock, y absorbí todo su enfado. Una lágrima bajó por su mejilla y sentí el dolor que le había infligido los últimos años. Intenté alcanzarlo, pero el me alejó.

"No puedo hacerlo de nuevo, Jungkook," dijo en voz baja. Había tomado mucho de Taehyung. Él siempre estaba ahí para mí cuando lo necesitaba. Tomé sin ningún pensamiento lo que para él había sido poner su vida de lado por mi familia. Siempre me había preocupado porque él se arrepintiera de su decisión de mudarse para ayudarme con Somin y Min Ho y aquí estaba.

"Lo siento, Taehyung," susurré. "Sé que he echado todos mis problemas a tus pies y..." Pude ver el enfado cruzar por sus ojos mientras caminaba hacia mí, presionando su dedo en mi pecho, cortando mi disculpa.

"¡No te atrevas a disculparte conmigo!" dijo furioso. "No cambiaría ninguna de mis decisiones. Te quiero a ti y a tus hijos. Simplemente no voy a sentarme y verte convertirte en la sombra del hombre que eras antes. Ya has perdido un amor de tu vida; no dejes que Jimin sea el segundo."

Me sentí como si me hubiera golpeado en la cara con sus palabras. ¿Amor? No podía pensar en ello. ¿Qué bien haría, de cualquier manera? Jimin se había ido así que deseché la exaltación de Taehyung e intenté enfocarme en asegurarle que no volvería a deprimirme como hice hace tres años.