Jeon Jungkook POV
Me alejé de nuestro beso y le sonreí a Jimin. Sus pestañas revoloteaban suavemente contra sus mejillas antes de que abriera lentamente sus ojos y me devolviera la sonrisa. Lo ayudé a cruzar los aparejos e ir a la cubierta mientras el miraba a su alrededor en silencio, impresionado.
"Es hermoso," susurró, pasando su mano por la botavara.
"Hermosa" corregí mientras se daba la vuelta y me sonreía con astucia.
"¿Significa eso que tengo que estar celoso?" preguntó Jimin con un brillo en los ojos. Fui detrás de él y envolví mis brazos en su cintura, besando su cuello suavemente.
"Difícilmente," susurré contra su suave piel. El levantó su mano y la pasó por mi pelo. Tuve ideas de llevarlo abajo y no salir hasta mañana pero miré al cielo y vi al sol haciendo lentamente su descenso. Si quería llegar a Neungdong antes de que oscureciera teníamos que irnos ahora. Besé su cuello una vez más y cogí su mano, llevándolo a la cubierta inferior.
"Déjame enseñarte esto y luego saldremos de aquí."
"¿A dónde vamos?" preguntó suavemente. La aprensión era obvia en su voz.
"¿Has navegado antes?" evadí su pregunta mientras lo ayudaba a bajar las escaleras. El sacudió su cabeza rápidamente.
"No, nunca he estado en un velero, solo en un buque de investigación," dijo aprensivamente.
"Entonces debería darte algo de dramamine, los barcos más pequeños tienden a balancearse más." Me alegraba haberme asegurado de que teníamos cuando preparé el barco esta semana. Fui al armario de la galera y abrí el cierre de seguridad, cogí la caja de las medicinas y le di una pastilla, recordando que él no tolera muy bien las medicinas. El me miró con duda en los ojos
"Te ayudará a no marearte. Hasta que sepas como reaccionas al movimiento, es mejor que la tomes para estar seguro," expliqué mientras le daba una botella de agua y el la tragaba.
"¿Tú no te mareas?" preguntó y yo reí levemente.
"Uh... sí, la primera vez que estuve en un barco pasé todo el tiempo con mi cabeza colgando de la barandilla," admití, esperando que a él no fuera a pasarle lo mismo.
Él se estremeció levemente y yo sonreí intentando aliviarlo. "Ya no me molesta más. Algunas personas nunca tienen problemas." Sacudí la caja antes de ponerla de vuelta en el armario.
"Esto ayudará, lo prometo," aseguré. El asintió y fue más lejos en la cabina. "Es... Ella es hermosa. ¿Qué tipo de madera es esta?" preguntó mientras pasaba su mano por la encimera.
"La mayoría de los veleros tienen teca. Aguanta mejor el aire salado que otras maderas," expliqué mientras él me sonreía y yo cogía su mano otra vez.
"Así que, esto es la sala de estar y la galera." Lo llevé a la proa del barco. "Hay dos camarotes en frente," dije mientras lo llevaba hacia delante y apartaba las cortinas en los dos lados para revelar un set de literas y una sola cama en el otro lado. El asintió y se agachó para asomar su cabeza en la pequeña área de dormir.
"Entonces, un camarote es un dormitorio," reflexionó en voz baja. "Es pequeño," dijo mientras salía. "No puedo imaginarte ahí apretado." Yo reí y sacudí la cabeza.
"Ahí es donde duermen los niños." Lo llevé hacia la popa. "Este es el cuarto de baño," dije mientras el entraba en el pequeño baño y asomaba su cabeza en la ducha.
"¿El inodoro y la ducha están en el mismo lugar?" preguntó con una linda arruga en su ceño. Yo reí por su expresión perpleja.
"Sip, no hay mucho espacio en un velero de 11 metros." Lo llevé de vuelta al pequeño pasillo y abrí la puerta del dormitorio.
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Llegaste a mi vida
Hayran KurguTras su divorcio, Jimin empieza una nueva vida con su hijo. Pronto conoce a un guapo doctor que está lidiando con su propia pérdida y lucha para criar a sus dos hijos. Es una historia de encontrar fuerza durante la adversidad y aprender a amar de n...