Capítulo 37 - Fiesta de las linternas

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Park Jimin POV

Finalmente Mingyu volvía a casa y yo no podía estar más feliz. Toda la semana había estado revoloteando por su habitación, limpiando sus sábanas, colocando sus juguetes e incluso me encontré a mí mismo echando de menos sus mascotas. Creo que Bom estaba mucho más entusiasmado que yo por la inminente llegada de Mingyu. Siempre me impresionaba como él podía sentir lo que estaba pasando. Mi entusiasmo encendió sus sentidos de mascota y le puso incluso más hiperactivo de lo que era normalmente.

Sehun se había tomado vacaciones y había pasado las dos semanas que le quedaban con Mingyu. La siguiente vez que Mingyu me llamó era un niño completamente diferente. Se lo estaba pasando genial con su padre y en realidad preguntó si podía quedarse más tiempo. Gracias a Dios, Sehun había comprado billetes que no podían devolverse, no creo que pudiera haber soportado estar lejos de él más tiempo. Una parte de mí estaba feliz porque él estuviera disfrutando su tiempo en Busan, mientras que otra parte de mí estaba triste porque él no me estuviera echando tanto de menos como yo a él.

Tenía cuatro horas más antes de que tuviera que ir a recoger a Mingyu en el aeropuerto. Él me aseguró una y otra vez que era un chico grande y que podía volar él solo. Era un vuelo directo de Busan a Incheon, así que acepté, pero aun así estaba extremadamente nervioso. La aerolínea le permitía a Sehun estar con él hasta que subiera al avión, así que sólo estaría solo lo que durara el vuelo. También le pondrían una pequeña etiqueta en señal de que era un menor viajando solo y los auxiliares de vuelo se ocuparían de cualquier necesidad que tuviera. Eso me dio algo de consuelo, pero no estaría completamente aliviado hasta que viera su dulce carita.

Cuando pasé por el restaurante de Hoseok de camino al trabajo, me acordé del día hace dos semanas cuando Jungkook me besó. Estaba confundido por su comportamiento agresivo cuando me arrastró hacia los baños, luego demandó saber quién era Jackson. En ese momento, estaba furioso porque él fuera tan rudo. Sus acciones hacia Sehun y luego hacia Jackson mostraban un lado de él que no había visto antes. Pero luego me besó y me olvidé completamente de sus pasadas transgresiones. Le quería. Mi cuerpo reaccionó instantáneamente y caí en su familiar abrazo.

Todavía podía sentir sus labios en los míos. Su sabor, su olor, todo me recordaba la pasión que una vez habíamos compartido. Cuando él se alejó, disculpándose, y luego me dejó solo, fue otro recordatorio de cómo se sintió perderle. Mis lágrimas cayeron con fuerza y me tomó todo lo que tenía el llegar a mi coche antes de que quedara como un tonto.

Yoon Gi fue compresivo y fichó por mí en el trabajo para que pudiera tomarme el resto del día libre. Pasé el resto de la tarde ponderando como iba a superar lo de Jungkook. A medio camino de mi proceso pensativo, recordé a Taehyung. Él me había pedido ir a comer, pero estaba con Jungkook en el restaurante. Me di cuenta entonces de que él estaba intentando juntarnos o, al menos, reanudar nuestra amistad. Lo quería y lo odiaba por ello. Había pequeñas cosas que él decía o hacía desde nuestra ruptura, y que ahora lo reconocía como un intento de reunirnos, pero mi autoimpuesto aislamiento siempre evitaba que el consiguiera algo.

Y entonces él llamó.

Hubo algunos momentos incómodos, pero en su mayoría fue una conversación cómoda. No pude evitar flirtear con él. Me regañé a mí mismo en el segundo en que las palabras salieron de mi boca, pero no podía molestarme por ello. Él quería que esperara por él. Yo quería, mucho, decirle que no podía verme a mí mismo con alguien que no fuera él, pero en su lugar contesté vagamente. Él todavía tenía que enfocarse al cien por ciento en Somin y Min Ho, hasta que Somin estuviera lista para aceptar a otra persona en su familia, entonces no había punto en hacernos daño a mí y a Mingyu.

Estaba haciendo un baile feliz en mi cabeza mientras aparcaba el coche y entraba corriendo en el acuario. Pronto, mi bebé estaría en casa. Recuerdo haber pensado cuando Sehun y yo hicimos el acuerdo de visitas, que tendría algo de tiempo para mí mismo, tal vez me buscaría un hobby. Que poco sabía lo duro que sería. Me eché en mi silla de oficina y me puse a trabajar. Había hecho tantas horas extras que mi jefe estaba más que feliz de darme tiempo libre. Me iría en un par de horas para recoger a Mingyu y luego no tenía que volver al trabajo durante una semana. Estaba muy metido en mi papeleo semanal cuando escuché un golpe en mi puerta. Taehyung asomó la cabeza con una enorme sonrisa y yo le hice un gesto con la mano para que entrara. Sorprendentemente, Somin entró detrás de él.

Llegaste a mi vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora