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-¡Mierda¡- gritó, el chico había despertado nuevamente alterado por el dolor de las heridas causadas por los murciélagos del otro lado.

Steve entró rápido en el cuarto, se acercó a Eddie, el cual seguía acostado en la cama, pero retorciéndose de dolor. -Munson, tranquilo, ¿sí? Respira.- se había sentado en la cama y estaba sosteniendo la cabeza del rizado, tratando de tranquilizarlo. -HENDERSON, EL PUTO CALMANTE- gritó un poco desesperado, ya que el chico en su regazo seguía retorciéndose y llorando del dolor. -Tranquilo, Munson, solo... respira.-

-CÁLLATE, HARRINGTON, CÁLLATE, MIERDA.- volvió a gritar nuevamente.

Dustin y Nancy entraron corriendo al cuarto, esta última con una inyección en sus manos, rápidamente se acercó al rizado. -Sostén su cabeza.- dijo a Steve para luego inyectar al chico en el cuello, vaya que esa chica sabe hacer de todo, el chico dejo de gritar y moverse, y en unos minutos sólo habían pequeños suspiros de su parte. Steve seguía acariciando su cabeza preocupado, mientras Nancy y Dustin lo veían igual de preocupados. -Hay que aprovechar para cambiar sus vendas ahora.- dijo la chica.

-Tienes razón, iré por unas limpias y lo necesario para volver a limpiar las heridas.- habló el pequeño chico antes de salir rápidamente del cuarto.

-Dios, esto debe ser una tortura para él.- habló Steve viendo al chico suspirar.

-Y que lo digas, pero al menos está vivo, pudimos sacarlo del upside-down a tiempo, eso es lo que importa ahora.- habló la chica de forma segura.

-Tienes razón, pero es que verlo así, es... Olvídalo.- concluyó al ver a Dustin llegar con las vendas. -Hay que hacer esto.- dijo moviendo un poco al chico dormido para quitar sus vendas viejas.

...

-¿Crees que puedas quedarte solo con él, Steve?- preguntó Robin. Estaban en la sala de la casa, o más bien, gran casa, de Steve, fue el primer lugar al que pensaron llevar a Eddie, nadie iría ahí, y los padres de Steve no se encontraban en el pueblo, eso lo hacía la mejor opción.

-Si te soy sincero, no, no creo poder, ¿Qué si vuelve a despertar? Yo no sé inyectar cuellos... ¿y si lo mato?- hizo la última pregunta con terror en su voz. -Nope, no puedo.- terminó de decir, recibiendo una mirada picarona de parte de Robin, a lo que hizo uno mueca de confusión.

-Él tiene razón, no sabe hacer esas cosas, si lo dejamos solo con Eddie y despierta no sabrá qué hacer.- habló Dustin. -Pero yo no me puedo quedar, mamá debe estar preocupada.

-Nancy debería quedarse con Steve, es la más preparada, ¿no?- dijo Robin en un intento de "ayudar a su amigo".

-Yo tampoco puedo quedarme, tengo que llegar a casa.- habló Nancy, estuvieron pensando un momento. -Robin, cuando investigábamos sobre Víctor Creel me contaste que habías inyectado a tu padre varias veces.- habló la rizada.

-Bueno, sí, pero no en el cuello.- dijo Robin.

-No es necesario que sea en el cuello, Robin, es un calmante puedes inyectar en otros lugares, el brazo por ejemplo.- Esta vez fue Dustin quién habló.

-Pues, supongo que puedo quedarme.- sonrió. -¿O querías que se quedara Nance, Steve?- preguntó moviendo las cejas de arriba a bajo.

-Quién sea está bien, lo importante es que sepa inyectarle el calmante a Eddie.- dijo serio, Robin solo río y giró sus ojos.

...

-Oye, Steve.- llamó Robin al chico alargando el sonido de la v, sólo estaban ellos dos en la sala, los demás se habían ido y Eddie seguía dormido arriba.

-Mhm- hizo un ruido con su boca en señal de que la estaba escuchando.

-¿Por qué no le insististe a Nance para que se quedara?- lo miró alzando una ceja.

-¿Por qué debería haberlo hecho?- preguntó confundido.

-Para pasar tiempo con ella, Idiota, ya sabes, tratar de conquistarla otra vez.- movió sus cejas de arriba hacia abajo repetidas veces.

-Dios, Robin, no me gusta Nance.- dijo luego suspiro cansado, no le gustaba Nancy, eso lo tenía muy claro, pero su amiga no parecía comprenderlo.

-Claro, Steve, y a mí no me gustan las boobies.- rió ligeramente.

-Es en serio, además, ¿cómo crees que podría "disfrutar tiempo con Nancy" cuando Eddie está arriba literalmente agonizando de dolor?- alzó una ceja en interrogación.

-Bueno, tienes razón.- se quedó callada unos segundos para luego volver a hablar. -¿Crees que aguante?-

-Claro que lo hará, ese chico no puede morir o Henderson me mata.- rió, contagiando a la chica con su risa.

-Oye, quiero dormir, hay que aprovechar ahora que está sedado.- se paró del sofá y estiró su cuerpo.

-Claro, ve a mi habitación, puedes dormir allí, yo me quedaré en la habitación que está Eddie por si despierta.- dijo también levándose del sofá para dirigirse al cuarto de invitados.

Ambos subieron las escaleras, para entrar a cuartos diferentes. -Buenas noches, Idiota.-

-Buenas noches, boobies.-

Huésped {Steddie}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora