Huésped {Steddie}

14

''Es un freaky'' ''Puto asesino de mierda'' ''Ni si quiera sé porque lo dejan seguir estudiando aquí'' ''Merece morir'' ''Es un descarado'' ''Anda por ahí como si hubiese hecho nada'' Esos eran algunos de los muchos murmullos que Eddie tenía que aguantar todos los días en la escuela, desde la entrada hasta la salida. Hablaban de él con descaro, mirándolo de reojo; miradas juzgonas y asqueadas eran las que más recibía, quizá alguna que otra de miedo y muy pocas de lástima.

La policía ya había aclarado ante el pueblo su inocencia, pero aun así seguía siendo adiado por la mayoría.

salió de la nube de pensamientos en la que se había sumido cuando chocó con otro cuerpo en el pasillo, dirigió su mirada hacia abajo observando a la chica con la que había tropezado. Le ofreció una de sus manos para ayudarla a levantarse, pero no recibió más que un manotazo por parte de la chica.

-No te me acerques, maldito asesino.- luego de decir aquello se levantó por sí misma y se alejó rápidamente del rizado.

El rizado sintió una punzada en su estómago, se suponía que ya debía estar acostumbrado al rechazo de la gente, incluso antes de lo de Chrissy, pero no podía evitar sentirse lastimado y decaído cada vez que se encontraba en una situación similar. Tragó duramente antes de seguir con su camino hacia su próxima clase.

Mientras caminaba vio al grupo de Jason reunido en una esquina, inmediatamente se escabulló, lo menos que quería eran más problemas, suficiente había tenido con el puñetazo del lunes en la salida.

Flashback:

-Oh, miren a quién tenemos aquí.- Jason fingió sorpresa, había seguido a Eddie hasta el estacionamiento con sigilo, hasta que al fin se encontraron solos. -Pero si es el gran asesino de Hawkins, ¿qué tal has estado? ¿Todo bien? ¿Alguna otra víctima por ahí de la que me quieras contar?- Eddie describiría la sonrisa que adornaba su rostro como sádica, sin duda alguna.

-Jason, por favor, no quiero problemas.- no necesitaba eso ahora, tenía que llegar al hospital para ver a Max. Intentó abrir su camioneta, pero las llaves le fueron arrebatadas de las manos en un movimiento brusco por parte de Jason, y lanzadas al suelo.

-¿Sabes quién más no quería problemas, Freaky?- alzó una ceja en espera de una respuesta, pero Eddie se mantuvo callado, por lo que procedió a responder su propia pregunta. -Exacto, Chrissy, Pero ¿Eso te importó?- fingió pensar un momento y luego abrió su boca, como si hubiese acabado de recordar algo importante. -Yo diría que no, después de todo la mataste, ¿no?- Eddie suspiró cerrando sus ojos un momento evitando que se cristalizaran, recordar a Chrissy le afectaba, sólo le recordaba que era un maldito cobarde, y que nunca sería más que eso. -¡¿No es así?! ¡¿Eh?! ¡Maldito hijo de puta!- Jason estampó su puño contra la mejilla de Eddie, un golpe duro y certero que lo envió directo al suelo. -Puede que la policía crea tu estúpido cuento, pero yo no. ¡Yo no!-

Aprovechó el momento para tomar sus llaves del suelo, se reincorporó ante la mirada furiosa del chico. -¡Yo no le hice nada a Chrissy, maldita sea!- gritó antes de usar toda su fuerza para empujarlo, haciendo que caiga directamente en el piso. -Acéptalo ya, Chrissy tenía problemas, y lo hubieses sabido si le hubieses prestado más atención, en lugar de pretender perfección.- soltó mientras subía a su camioneta, la encendió lo más rápido que pudo y se fue del lugar, dejando a un Jason furioso en medio del suelo. Sabía que eso no había acabado ahí, sabía que Jason iría por más, que intentaría acabar con él nuevamente. Por ahora solo le quedaba hacer lo que siempre hacía, huir.

Fin del flashback

Al fin había llegado al salón de historia, entró obteniendo la mirada de todos incrustada en su persona. Vio a Robin al final del salón, la chica lo saludó con la mano, invitándolo a sentarse junto a ella.

Y así lo hizo, caminó hasta estar a un lado de la chica, chocaron los puños antes de que Eddie tomara asiento a su lado. Unos minutos después llegó en profesor y comenzó a dar la clase, haciendo que la atención de todos los demás pasara de estar en el rizado a estar en el pizarrón.

Durante la clase Robin le habló acerca de una reunión en casa de Steve el sábado, le dijo que ya había hablado con todos los chicos, y habían aceptado.

-Será divertido.- susurró tratando de no llamar la atención del profesor. -Ya sabes, películas, comida, chistes y juegos, algo normal para variar.-

-Lo voy a pensar, no sé si tenga mucho tiempo.- Claro que tenía tiempo, y nada que qué pensar, pero no sentía que realmente perteneciera al grupo, todos ellos se habían esforzado en salvar al mundo más de una vez, tenían un vínculo que los unía, él sólo había sido un daño colateral, ¿realmente merecía asistir a una reunión con ellos y pasarlo bien como si realmente fueran amigos? Una cosa era pasar el rato con los más pequeños, los que eran parte de su club, otra muy diferente era agregar también a la hermana de Wheeler, la cual, nunca lo admitiría en voz alta, pero le intimidaba y al novio de ésta, al que ni siquiera conocía más que de vista. De alguna manera, se sentía más íntimo, como algo en lo que él no debería estar incluido.

-No tienes nada que pensar, hombre, sólo ven, quizá hasta convenza a Steve de jugar ese juego raro tuyo de los dragones.-

-D&D, Robin, D&D.- rió por lo bajo, comenzando a prestar atención a la clase.

...

Steve había despertado por una pesadilla nuevamente, últimamente eran mas seguidas, eso lo estresaba. Odiaba tener esas horrorosas pesadillas, siempre habían escenarios caóticos que se sentían tan reales, aveces lo hacían dudar de la realidad misma. Había tenido pesadillas acerca de tantos finales distintos respectó a Vecna, y ninguno era bueno, siempre perdía personas, personas importantes para él. Le daba miedo que ese bicho pudiese volver, y que esta vez no sea capaz de salvarlos, que todo salga como en alguna de sus pesadillas. Esa idea sin duda lo aterraba.

Se sentó en su cama por un momento, podía sentir el sudor frío recorrer su cuerpo, se sentía pesado. Dio una rápida mirada a su reloj en la mesita, 4:15 a.m, suspiró pasando sus manos por su rostro varías veces. Luego de unos cinco minutos en la misma posición, decidió levantarse, ya que tomaría una ducha. Se desvistió por completo, tomó su toalla y ropa interior limpia para luego dirigirse al baño. Maldijo internamente cuando al abrir la ducha nada salía del objeto, sería algo que resolvería después, suspiró y salió de su baño y habitación para dirigirse a la antes ocupada por el rizado. 

Una vez en el cuarto de huéspedes, se adentró al baño de éste, tomando una larga ducha de agua fría, de alguna forma sentir el frío del agua recorrer todo su cuerpo lo relajaba. Al terminar se colocó la ropa interior y salió del baño. No quería volver a su habitación, no sabía exactamente el porqué, pero no tenía ganas de hacerlo en ese momento, todas las pesadillas que había tenido habían sido ahí. Comenzó a secar su pelo sosteniendo la toalla con una de sus manos, mientras con la otra rebuscaba en el closet de la habitación, toda la ropa allí era la que había dejado el rizado. Tomó una camiseta gris oscura que tenía un estampado que decía "Black Sabbath", decidió usarla, al colocársela se dio cuenta de que le quedaba bastante suelta, sonrió con el pensamiento de lo grande que debía quedarle al rizado y lo tierno que debería verse en ella.

Tiró la toalla en un pequeño sillón en la esquina de la habitación, y se acostó en la cama envolviéndose completamente en las sábanas. Todo a su alrededor olía a Eddie; la camiseta que traía puesta, las sábanas de la cama e incluso las almohadas. Se aferró a una de las almohadas, abrazándola como si fuese un pequeño koala, mientras aspiraba el olor que desprendía de ella. Una pequeña sonrisa hizo acto de presencia en su rostro mientras suspiraba tranquilo, ni siquiera se dio cuenta en el momento que cayó en los brazos de Morfeo.