Horas extra, Yeonjun odiaba las horas extra en el trabajo pero era lo que le había tocado aceptar aquella tarde en la librería debido a la ausencia del hawaiano; la noche ya estaba muy avanzada pero a Choi no le importaba en lo absoluto ya que ahora mismo su misión era llegar a la vivienda del pequeño pelinegro y poder darle una visita rápida para preguntar cómo se encontraba de salud.
Sin mucho apresurar el paso disfrutaba de la fresca brisa de aquella noche iluminada gracias a la luz de aquella gran y blanca luna que yacía en medio del cielo oscuro sobre su cabeza, podía notar algunas cuantas nubes dispersadas pero por la forma de estas sabía que no había amenazas de lluvia, aún así, sonrió sabiendo que llevaba consigo su paraguas para cualquier imprevisto; al andar miraba los puestos a lo largo de las calles y callejones mientras le llegaban los deliciosos aromas de algunos restaurantes y bares que seguían abiertos a esas horas, por un instante pensó en comprarle algo de comer a su menor y colega de trabajo así que sin pensarlo de más se dirigió al primer puesto que le quedó más cerca y que llamó su atención.
Yeonjun miró detenidamente el menú notando que habían varios platillos famosos y otros que nunca antes había probado y se cuestionó cuál sería el mejor para el paladar de Kai y al recordar que el menor se encontraba enfermo de gripe prefirió optar por algo suave y liguero como una sopa que le ayudara a sentirse mejor así que pidió una sopa de vegetales y un té caliente, luego de pagar la cuenta tomó la bolsa con su compra y se despidió agradeciendo a la vendedora con una sonrisa.
No avanzó muchas cuadras más para finalmente llegar a la vivienda del menor, se acercó un poco inseguro al mirar la hora en su reloj pero luego de armarse de valor tocó el timbre de la entrada esperando paciente a que alguien saliera a su encuentro; pasaron los segundos sin llegar al minuto cuando se escuchó el seguro ser removido para posteriormente abrirse la puerta frente a él, quien abrió era una mujer y el menor supuso que se trataba de la mamá de Kai por el gran parentesco físico que tenían.
-Ah... buenas noches, mi nombre es Choi Yeonjun y soy compañero de Kai en la librería -se presentó haciendo una reverencia a la mayor.
-¡Oh! ¿Veniste hasta aquí para visitarlo? -la mujer miró al menor con sorpresa y alegría- ¿Veniste sólo? Es muy tarde ya... -preocupada miró los alrededores curiosa por si el contrario llevaba compañía.
-Sí vine sólo, hoy tuvimos la librería llena de clientes así que terminamos cerrando un tanto tarde... ¡P-pero no se preocupe! El camino es bastante seguro así que estuve bien llegando por mi cuenta; vine porque me comentó nuestra compañera que Kai está enfermo... ¿Cómo está? ¿Es grave?
-Hmm... no es la gran cosa, solo es una pequeña gripe con estornudos pero nada del otro mundo solo que le pedimos que no fuese a estudiar ni a trabajar hasta que se recupere para no contagiar a nadie... aunque si te preocupas por él puedes pasar y verlo, igual no creo que te contagie ya que como digo no es nada grave -la mujer rió al escuchar sus propias palabras y no sonar tan convincente ni para sí misma- pasa pasa, adelante.
Yeonjun se lo pensó un poco ya que en realidad no quería tardar mucho tiempo más para no llegar muy tarde a su apartamento pero al ver la alegría y la sinceridad en los ojos de la mujer mayor prefirió obedecer y pasar a la vivienda de los Huening.
Aquella casa era cálida y acogedora, se veía bastante hogareña a pesar de no tener recuadros familiares por todos lados clavados en las paredes tal como sí los había en el apartamento de Soobin, en esta casa solo tenían un recuadro grande familiar justo al lado de la chimenea que decoraba la sala del primer piso, en aquel recuadro se apreciaba a los padres de Kai y también a dos chicas más, una mayor y otra menor que el pelinegro pero tenían un parentesco enorme con él que por un momento confundió a Yeonjun y le obligó a apartar la vista del recuadro... la familia Huening tenía unos genes muy fuertes al parecer.
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El chico del apartamento 512 •||| YeonBin |||
Fiksi PenggemarUna historia en donde Yeonjun se muda a un apartamento para comenzar a vivir su vida independiente pero lo que no se esperaba era la gran dependencia que en un futuro comenzaría a sentir hacia su atractivo, tierno y sexy vecino pelinegro.