Capítulo 9

3.1K 96 2
                                    

Han pasado algunos días, hoy nos toca jugar contra Eslovaquia y sobre la relación con el canario, no es que haya mejorado ni cambiado, prácticamente le he estado ignorando durante todos estos días y mira que él ha tenido intenciones para hablar conmigo, pero siempre le decía alguna excusa tonta y me escabullía rápido.

Hoy me he vestido con la camiseta de España y unos tejanos azules, he estado encerrada toda la mañana ayudando a Joaquín, estoy aprendiendo muchas cosas con él y cada vez tengo más claro que no me equivoqué escogiendo esta carrera, tiene puntos muy interesantes y me gusta mucho ayudar y aconsejar a la gente, en este caso a jugadores.

Ahora mismo me encontraba comiendo una ensalada, durante estos pocos días había tenido bastantes atracones sin ningún motivo, empezaba y ya no podía parar, supongo que era para callar mi mente, ya que, al no estar con los chicos y pasar bastante tiempo sola me daba por pensar y recurría a la comida para no hacerlo. Ahora llegaba la culpa, el arrepentimiento... Intentaba aliviar esa culpa comiendo lo menos posible, en mi cabeza solo cabía lo mucho que había engordado, aunque no fuera así.


......................



Salíamos hacia el estadio de la Cartuja otra vez, me había sentado con mi padre, él notaba que algo en mí no estaba bien, que estaba abrumada y un poco triste, sin ganas de nada, me había preguntado antes de que el bus arrancara, pero le había respondido que no tenía ganas de hablar ahora, me quería centrar en la música y olvidar todo.

Al llegar, había decidido no entrar a vestuarios, no quería encontrarme al canario y como ya había dicho antes, no tenía muchas ganas de estar con gente. Les deseé suerte a todos cuando salieron hacia el túnel y yo fui y me senté en el banquillo.

Los jugadores llevaban unos 8 minutos en el césped, a mi parecer estaban jugando bastante bien, habían tenido varios acercamientos a portería con peligro y bastantes intenciones de gol.

No tardó en llegar un penalti a nuestro favor después de una entrada a Koke, el penalti lo iba a lanzar, Morata, después de que el árbitro diera su visto bueno haciendo sonar el silbato, Álvaro, se preparó y chutó el balón, un balón que el portero eslovaco impidió que entrara a su portería, nadie se lo podía creer.

Los minutos pasaron y muchos de los jugadores tuvieron sus oportunidades, Pedri entre ellos, que desde hacía un rato no paraba de buscar mi mirada.

En el minuto 30 la suerte se puso de nuestro lado haciendo que el portero eslovaco no pudiera agarrar bien la pelota después de un tiro de Sarabia y se la metiera en propia. En la prolongación de la primera parte también tuvo su oportunidad Laporte, con un cabezazo pudo mandar la pelota al fondo de la red, todos saltamos de alegría, en el banquillo, campo y grada.

Después del descanso los jugadores volvieron a salir al campo, estaban más confiados en ellos mismos y con más ganas de darlo todo en el campo.

Sarabia no tardó mucho en darnos el tercer gol, que para celebrarlo se había agarrado a Koke mientras corrían sonriendo y vitoreando.

Y llegaron mis goles favoritos, uno era el de, Ferran, con el tobillo había podido encajar un gol precioso, pero lo más importante es que como celebración se acordó de mí e hizo la "L", me lleno de felicidad por dentro y después le siguió, Pau, que después de hacer un corazón dedicado a su novia me hizo, otra vez, la "L" mientras me señalaba.



...........................


Wabi Sabi (Pedri González)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora