Wabi Sabi (Pedri González)

Capítulo 19

Desde la ventanilla del avión podía ver las inmensas aguas cristalinas a las que nos acercábamos, era precioso.

Noté cómo a cabeza de, Pedri, se movía a mi lado. Se acababa de despertar de la pequeña siesta que se había echado en mi hombro mientras yo leía y de vez en cuando me asomaba a la ventanilla.

- ¿Cuánto queda? -Pregunto cómo un niño pequeño mientras me robaba las típicas chuches que llevaba a cada viaje, me acuerdo cuando lo hizo por primera vez en el avión hacia una de nuestras muchas destinaciones durante este verano.

-Media hora, más o menos-Le contesté mientras le apretaba los mofletes-Dame mis chuches, anda-Le dije mientras le llenaba la cara de besos.

-Si sigues así, ten por asegurado que no te las voy a dar-Dijo mientras ponía los labios en forma de pez.

Después de esa media hora aterrizamos en Santorini, nuestro primer destino y uno de los más esperados.

Nada recoger las maletas pillamos un Uber que nos llevó al hotel, era precioso, el típico que salía en las fotos de Instagram con piscina, fachada blanca con detallitos azules y unas vistas que te dejaban sin aliento.

-Amor, esto es demasiado-Le dije sorprendida al ver la habitación.

-Que va -Me dijo mientras dejaba las maletas dentro, al lado de la inmensa cama.

-Dios, es que todo es inmenso, hasta la cama-Dije mientras me dejaba caer en ella.

-La cama era lo más importante, tiene que ser grande para pasárnoslo muy bien-Soltó sin pelos en la lengua el canario.

-Oye, canario-Le dije tirándole un cojín que encontré por la cama.

-Es verdad-Dijo mientras se encogía de brazos y yo me ponía roja.

-Luego no tengas la cara de decir que eres tímido con las personas, eh, guapo-Le dije mientras habría la maleta buscando mi bikini para ir a la playa-Venga anda, ponte el bañador.

-A la orden, mi capitana-Dijo mientras se volvía hacia la maleta buscando su bañador.

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Llegábamos a la playa más cercana del hotel en unos diez minutos, el agua era turquesa clara, preciosa, me recordó muchísimo a MAMMA MIA, mi película favorita.

-Amor, esto es precioso-Dije mientras empezaba a andar más rápido.

-Tranquila, muchacha-Dijo mientras frenaba nuestro paso un poco.

-Pero no lo ves, es precioso este sitio-Volví a decir mirando a mi alrededor.

-Amor, llevas diciendo precioso desde que hemos llegado-Dijo enternecido.

-Lo sé, pero es que es verdad.

-Venga anda, vamos a buscar un sitio donde dejar todo-Se volvió a encaminar el canario con su mano en mi hombro mientras dejaba pequeños besos en mi mejilla izquierda.

Escogimos un sitio en primera línea de playa como buenos españoles y dejamos nuestras cosas, enseguida nos quitamos la ropa que llevábamos y nos quedamos en bikini, después nos encaminamos hacia el agua.

El canario ya estaba dando brazadas por el agua y yo en cambio estaba con el agua por un poco más debajo de la cintura y mis manos alrededor de la misma, ya era costumbre.

-Amor, metete-Grito el canario mientras se acercaba a mí.

-Está helada-Le respondí en el mismo tono.