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-¿Recuerdas cuando nos conocimos? -cuestiono de la nada la rubia.

Mientras, a Ni-ki le invadieron los recuerdos de aquella vez que vio a Ari, y como sus rasgos extranjeros lo cautivo.

-¿¡No te recuerdas?!

-¡Lo hago! ¡Lo hago! -hablo entre risas.

-Menos mal~ Estaba a punto de irme.

-Ese día nos tuvieron que sacar -rio Ni-ki recordando.

-Cierto~ Recuerdo que con las que compratia apartamento me regalaron por llegar tarde -Rieron los dos-

-Mis hyungs también me regañaron aquel dia.

Los dos se quedaron viendo la luna en silencio, un silencio cómodo.

Hasta que el celular de aquella comenzó a sonar.

Videollamada entrante de "Alex"

-Alex... Ni-ki, yo -mostro su celular.

-Puedes contestar.

-No es eso... Solo que-

-¿Es alguien importante? —Ari asintio— Mmm, bien entonces ve a tu apartamento y yo recojo.

— Espérame, ¿si? -__ se levantó y contestó— ¡Alex!

—¡Mi niña! ¡Cuando pensabas llamar!

—¡Cuando pensabas llamar tu!

—Yo no te llamaba pensando que estarías ocupada.

—Puedes marcar cuando sea, menos en la madrugada~ Pero ahora.. —miro a Ni-ki, quien tomaba fotos de la luna.

-No me digas que estas ocupada...

-Estoy en una salida con amigos.

-Si claro. Cuando llame de nuevo quiero que me cuentes todo.

-No hay n-

-Si, si, te quiero niña, bye. -Y sin más colgó.

-¿Y? ¿Porque colgaste tan rápido?

-Me colgo a mi -hizo un puchero inconscientemente que no paso por desapercibido por Ni-ki.

-Bueno debería recoger. -se levantó Ni-ki.

-¿Porque?

-Para que hables.

-El ya colgó, mañana le marcare -sonrio.

-¿El? -murmuró pero ella alcanzó a escuchar haciéndola reír.

— ¿Estas celoso? -bromeo.

-Sí. -hablo serio.

-¿Eh?

-¡Si, Ari! Soy tu mejor amigo, ¿cierto?

-Lo eres.

-¿Solo yo?

-Em- bueno Ni-ki.

-Viste~

-Ni-ki, el que me marco fue el único que me apoyo con mi sueño. Jungwon estuvo conmigo cuando me sentía sola. Y tu fuiste mi primer amigo cuando llegue. Cada uno es especial.

-Mmm~ -Ahora Ni-ki se sentía mal- Lo siento.

-No lo sientas -revolvio el pelo de Ni-ki- Ahora ya sabes lo especiales que son.
-para pasar el momento de tensión se le ocurrió una idea- ¡A que no me alcanzas! -Grito y comenzó a correr.

Le tomo unos segundos en reaccionar pero enseguida corrió detrás de ella.

-¡Eso es trampa!

Solo los chicos y la luna, la luna que miraba a aquellos jóvenes enamorados muy secretamente.

Wildest Dreams - Nishimura RikiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora