I can't feel you | Steddie M-PREG

Capítulo 7

Steve:

Desperté de golpe en cuanto escuché un fuerte ruido, Eddie también se alertó y me abrazó para protegerme.

—Eddie...

—Iré a ver qué es.

—Estás loco, puede ser cualquier cosa, inlcuso la policía. Yo iré, no voy a discutir más —dicho esto, me levanté del mueble sin escuchar un reproche de mi novio y caminé hacia la ventana para espiar.

—¡Ey, friki, sé que estás ahí, sal ahora mismo! —Jason golpeaba con fuerza la puerta de la casa de Rick.

—Mierda —susurré y sentí que Eddie se acercó.

—¡Más vale que salgas, idiota, solo quiero hablar!

—Ese desgraciado no quiere hablar, me quiere muerto —musitó Eddie apenas acercándose a la ventana.

—¡Munson, sal ahora o destruiré esta pocilga!

—¡Steve, ¿qué hacemos?!

Permanecí un par de segundos mirando el suelo mientras Eddie me pedía ayuda. Era arriesgado salir a confrontar a ese imbécil después de lo que pasó en la mañana, sobre todo por mi bebé. Pero si lograban entrar, sería peor aún, capturarían a Eddie y quien sabe qué le harían.

—Stevie...

—Huye, yo me las arreglaré con ese imbécil —lo miré seriamente a los ojos y caminé hacia la puerta.

—No, no, no, no, no, ¿qué harás? —tomó mi mano para detener mi paso.

—Lo voy a retener, mientras tú, escapa y escóndete, ¿sí? Nos comunicaremos por el radio, pero por favor, trata de que no te vean —dije tomando su rostro con ambas manos para besar su frente.

—Estás loco si voy a dejarte solo con esa bestia.

—Puedo con él, tranquilo, ve ahora.

—No, Stevie, puede hacerte daño... es mi culpa todo esto, no puedes hacerte cargo tú solo. Me quiere a mí, no a ti.

—¡Edward, maldita sea solo vete, si sales será peor, obedece! —me sentí pésimo en cuanto me di cuenta de que le grité, pues su expresión de susto me lo hizo saber en seguida.

Permaneció estático frente a mí, sin mover un solo músculo, únicamente su labio inferior temblaba por el shock y sus enormes ojos demostraban miedo. Dios, yo nunca le había gritado, pero en serio me sentía muy estresado por todo esto y no dejaba de culparme por haber reaccionado así.

—Ten cuidado, por favor —el tono de voz triste que utilizó me partió el corazón.

No dijo más, solo salió del lugar lo más callado posible para no ser descubierto. Suspiré y tomé mis sienes, mi cabeza estaba a punto de explotar de la preocupación y el miedo. Mandé al carajo todo y salí de la casa de botes para enfrentar a Jason, estaba de espaldas cuando salí, así que solté un portazo para llamar su atención. Efectivamente funcionó.

—Otra vez tú, Harrington —me miró mal.

—Sí, soy yo, cuidado mojas tus pantalones.

—¿Qué se supone que haces aquí? ¿Tienes a Munson encerrado ahí?

—Vine a buscarlo también, pero no está, eso no te importa.

—Pues creo que tendré que buscar yo, porque eres un inútil.

—No está, ¿no se entendió acaso? —me crucé de brazos y caminé hacia él para impedir que se acercara—. ¿No fue suficiente con la paliza que te dio Billy hoy?