Hoy era sábado y no había universidad, por lo cual me dispuse a pararme más tarde de lo habitual. Me paré de la cama estirándome completamente acompañado de un repentino bostezo. Los martinis y a la hora que me acosté a dormir se sobre pasaron con lo que solía hacer habitualmente.
Travis y yo habíamos acordado desayunar a las 10 en Starbucks para charlar lo que tanto a él le urgía hablar conmigo; además Yorleska y yo íbamos de compras para después ir en la noche al Bar central de California junto a Francisco, quien los fines de semana se la pasaba tocando Jazz con un pequeño grupo de amigos.
Me dirigí al baño y cepille mis dientes; me di una pequeña ducha, volví a la habitación y empecé a buscar un conjunto para ir a desayunar junto a Travis; sabía lo raro que sonaba esto; jamás me habría imagino estar en Starbucks junto a Travis "Desayunando y charlando" Agarre una camisa negra con un estampado de una frase en francés, un pantalón negro neutro, un suéter de terciopelo color gris y unos botines negros.
Me mire en el espejo de la habitación otra vez más, desordene un poco más mi cabello y me dirigí a la sala agarrando el teléfono, mi típica mochila vintage y las llaves de la casa junto a las del auto.
Baje el ascensor sintiendo una inmensa oleada de nervios. Estaba a tiempo de cancelar, pero no podía hacerlo, tenía que saber más información y quería saber ¿Por qué Travis quería hablar conmigo urgentemente? El tema de ¿Quiénes eran realmente Christian y Travis? Me habían vuelto viciosa, loca y desesperada por saber más; quería saber ¿Quiénes eran? Y ¿Por qué ocurrían esas cosas raras cada vez que ellos rodeaban cerca de mí? ¿Por qué mis dolores de cabeza?
No estaba segura, ni confiada en saber si eran brujos o magos, aunque parecía un poco graciosa la idea de mago, pero es que no se me ocurría nada que fuese "Sinónimo" a eso.
Y ¿Si son alguna especie inmortal? Como vampiros, lobos... Que ridiculez, eso no pasaría ni en mil años. Yo no era creyente de esas especies ficticias, por alguna razón sabía que no existían y que sería mentira que alguien fuese algo de eso. Aunque la idea me había abierto una gran duda sabía que no la tomaría mucho en cuenta.
Iba manejando pensando aun en el tema de "Inmortalidad" me tenía totalmente perdía hasta que casi iba atropellando a un gatito haciendo que frenará de manera brusca. Tome una bocanada de aire para luego soltarlo; cerré mis ojos y lleve mis manos a mi cara estrujándola, esto me estaba consumiendo, estaba haciendo que pensará más de lo que pensaba habitualmente. Abrí los ojos y seguí manejando con precaución hasta llegar a Starbucks. Agarre la mochila, el teléfono y las llaves, baje del auto y empecé a caminar a la entrada de Starbucks.
El lugar se encontraba más o menos llenos, busque con la mirada a Travis, pero no lo encontraba. Un silbido proveniente desde el fondo hizo que volteará rápidamente. Travis estaba de pie al lado de la mesa; estaba vestido con una camisa de cuadros abierta dejando ver una polera blanca, unos jeans y unas vans, su cabello castaño estaba un poco alborotado, pero aun teniendo esa imagen sexy y mala.
Camine hacía donde Travis se encontraba con pasos no tan firmes, aun no estaba segura de la idea de hablar con él, no sabría con lo que me saldría, y más si dudaba de que si Christian le había hecho el comentado sobre la conversación que habíamos tenido ayer. Por lo menos había visto que no estaba maltratado físicamente.
ESTÁS LEYENDO
El Talismán © (Editando)
Genel Kurgu"....- El chico es frívolo, sarcástico, orgulloso y un poco egocéntrico. - Comentó mi amiga al ver que lo veía fijamente. Era hermoso y muy misterioso. - Es demasiado reservado no esperes saber mucho de el..." Obra registra en SafeCreative. Código:1...